El apoyo que siempre ha mantenido el Unicef en el trabajo conjunto con Cuba, fue destacado por el primer secretario del Comité Central del Partido Comunista y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, al recibir en horas de la tarde de este martes, en el Palacio de la Revolución, al señor Garry Conille, director regional de esa agencia de Naciones Unidas para América Latina y el Caribe.

El mandatario subrayó la colaboración del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia cada vez que algún desastre natural u otro evento tiene impactos negativos sobre nuestra población infantil.

Destacó el permanente apoyo al Programa Nacional de Vacunación, que Cuba mantiene invariablemente, sobre todo con vacunas propias, así como a otros proyectos y programas para garantizar el bienestar de niños y adolescentes.

Díaz-Canel señaló que el programa de inmunización, que Cuba no detuvo ni siquiera en la etapa más difícil de la COVID-19, continuará desarrollándose tras la pandemia y a pesar del recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero del gobierno de EE.UU., y ponderó la ayuda de Unicef en nuestras campañas de vacunación.

Recordó que Cuba fue el primer país del mundo en proteger a su población infantil mayor de dos años de edad con vacunas anti COVID 19, y lo hizo con inmunógenos propios, y ahora, en la etapa pospandemia, aplica un protocolo para el apoyo al paciente pediátrico convaleciente de COVID-19.

El doctor Garry Conille, director regional de Unicef para América Latina y el Caribe, subrayó la acogida con que ha sido recibido y la oportunidad que ha tenido para conocer el trabajo de distintas instituciones a favor de niños y adolescentes.

Explicó que su formación es precisamente en el sector de la Salud, por lo que se mostró impresionado por el sistema de Salud Pública cubano, el cual, enfatizó, es el modelo que debe existir en el mundo como servicio de salud comunitario.

Se trata, subrayó, de un servicio muy integrado, organizado, “es algo –dijo al presidente cubano– que yo había estudiado y aquí lo he podido observar por primera vez”.

El director regional de Unicef ponderó junto al jefe de Estado, entre otros temas, el proyecto del sistema nacional de salud de digitalizar sus procesos, un programa en el que el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia tiene el propósito de participar.

En las palabras de bienvenida al señor Garry Conille, el presidente de la República había enfatizado, además, en el éxito de la colaboración entre Cuba y Unicef en diferentes campos y ratificó la disposición de seguir trabajando con esta agencia de la ONU, con la que el país tiene una histórica relación.

Recordó que Cuba fue uno de los primeros países del mundo en firmar la Convención sobre los Derechos del Niño y ha trabajado por mantener todos los principios de la misma, con esfuerzo propio y también con el apoyo de Unicef.

Como agencia de Naciones Unidas que tiene como objetivo garantizar el cumplimiento de los derechos de la infancia y adolescencia, y asegurar su bienestar en todo el mundo, Díaz-Canel también comentó al visitante que en julio pasado la Asamblea Nacional del Poder Popular aprobó la Política de Atención Integral a la Niñez, Adolescencia y Juventudes, que ya se está aplicando y que, en la sesión ordinaria de diciembre, según lo previsto, debe ser convertida en ley.

El presidente cubano reiteró al doctor Garry Conille la disposición de trabajar con Unicef en cualquier esfuerzo que esta demande de Cuba en sectores como la salud, la educación y otros, en beneficio de América Latina y el Caribe y otras regiones del mundo.

En el encuentro con Díaz-Canel, el director regional de Unicef para América Latina y el Caribe estuvo acompañado por la señora Alejandra Trossero, representante de la agencia en Cuba. Por la parte cubana, participaron la viceministra primera de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Ana Teresita González Fraga, y la viceministra de Relaciones Exteriores, Anayansi Rodríguez Camejo.

5 octubre 2023| Fuente: Cubadebate| Tomado de Noticias| Política

Una doctora que aprendió en la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) las mejores esencias para atender a sus pacientes; un empresario que se empeña en saltar los obstáculos que impone el bloqueo para hacer llegar medicamentos e insumos a Cuba; una voluntaria, que como otros miles en este país, admiran y apoyan a la Mayor de las Antillas.

Ellos, junto a más de una docena de personas de este país vinculadas al sector de la Salud, pusieron rostro y nombres a historias de cooperación que unen a nuestros dos países y compartieron en la tarde de este viernes junto al Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y una representación de la delegación cubana que lo acompaña en estas sesiones de trabajo en las Naciones Unidas.

La cita tuvo lugar en la sede de la Misión Permanente de la Mayor de las Antillas en las Naciones Unidas, un lugar que desde la llegada del mandatario cubano a esta ciudad el pasado domingo, se ha convertido en un espacio para el diálogo y las emociones.

Al darles la bienvenida en la sede diplomática el Jefe de Estado cubano les agradeció por aceptar este encuentro. “Vernos con ustedes tiene una altísima satisfacción, pues representan a las instituciones que en medio del injusto bloqueo que se impone a Cuba, han mantenido los vínculos”, aseguró.

Eso demuestra, dijo, que nuestros pueblos están conectados y hay caminos posibles en cosas que nos unen para poder desarrollar esa relación. “En todo este tiempo las relaciones que se han indo forjando nos ha permitido crear un espacio de confianza y cooperación, que permiten ampliar estos nexos y seguir proponiendo momento superiores en esta colaboración”, valoró.

En sus palabras, donde primó el agradecimiento por todo lo que han hecho y continúan haciendo para estrechar los nexos de trabajo, el Presidente Díaz-Canel compartió ideas esenciales que distinguen al Sistema Nacional de Salud, y cómo sus tantas fortalezas nos permitieron estar en mejores condiciones para enfrentar la pandemia de la COVID-19.

Del bloqueo y sus graves consecuencias al sector sanitario habló también el Presidente, porque es esa, dijo, una cruel política que de no existir permitiría mayores avances de la Salud en Cuba y también una mayor cooperación con ese sector en Estados Unidos.

De la ciencia, la innovación, la prevención, la atención primaria y otras tantas fortalezas comentó también el mandatario a los amigos presentes. Y justamente en la ciencia, dijo, encontramos muchas de las respuestas para hacer frente al reto que trajo consigo la pandemia. Compartió entonces sobre la creación de nuestras propias vacunas, y el esfuerzo titánico que implicó la inmunización de toda nuestra población vacunable mayor de los dos años de edad.

Es nuestro propósito con este encuentro, aseguró, que ustedes “sientan el reconocimiento que tienen del pueblo y el Gobierno cubanos, por haber mantenido relaciones y apoyo con nuestro país a pesar del bloqueo, y tenemos toda la disposición para continuar profundizándolas”.

Las potencialidades científicas que en el sector de la Salud existen entre ambos países, dijo, nos abren un camino para poder contribuir y aportar a un mundo cada vez más convulso.

A ustedes, el reconocimiento, el aprecio y el respeto por todo lo que han hecho y siguen haciendo por Cuba.

Agradecer y hacer, caminos para la cooperación

En las voces de los amigos se escuchó hablar en la tarde de este viernes de compromisos, cariño, agradecimiento, tenacidad, apoyo, amistad…todos querían compartir su historia y a todos escuchó el Presidente.

Una contó sobre su afán por escribir la historia de la colaboración médica de Cuba en América; otros compartieron experiencias sobre sus aprendizajes en la isla caribeña sobre lo hecho en materia de Salud; otros contaron sus peripecias para sortear los obstáculos que impone el bloqueo a la Mayor de las Antillas y hacernos llegar donaciones, medicinas y suministros.

El diálogo fue tejiendo el hilo de una historia de varios años de cooperación que ha forjado innumerables alianzas. Sobre esas alianzas habló la doctora Miriam, quien aseguró que justamente a partir de esa alianza con los profesionales cubanos se “han abierto puertas más grandes para nosotros, permitiéndonos colaborar en otras naciones de manera multifacética”.

Del aporte que para ellos significan los eventos científicos que se realizan en Cuba; de los tantos aportes que puede hacer el Sistema de Salud cubano al de los Estados Unidos; de la condena a las atrocidades que realiza el Gobierno norteamericano al pueblo de Cuba; del hacer con alma que se adivina en los médicos cubanos que no solo “curan con pastillas”, hablaron los presentes y sus palabras de muchas maneras ratificaron que Cuba, definitivamente, no lucha sola.

De agradecimiento habló también a ellos el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda: por la cooperación, por el respaldo y el acompañamiento que desde múltiples escenarios han hecho y continúan dando al Sistema Nacional de Salud Pública.

Tras compartir con ellos varias de las fortalezas que distinguen a nuestro sistema sanitario, Portal Miranda destacó el desarrollo de la industria biofarmacéutica cubana, que no está separa del Sistema Nacional de Salud, sino que es parte indivisible de él, y con el camino de desarrollo que ha consolidado “abre un campo para la cooperación en el que podemos avanzar”.

Gracias, dijo, por movilizar recursos que han sido de inestimable ayuda para nuestro país; gracias por multiplicar en tantos lugares del mundo la realidad del quehacer de la salud en Cuba. “Ustedes pueden contar con nosotros para seguir en algo tan importante como es la defensa de la vida”, aseguró.

La voz de los amigos

Teasha Guerrafe, es una doctora norteamericana que se graduó en el 2011 en la Escuela Latinoamericana de Medicina, y desde entonces ha ocupado múltiples responsabilidades asociadas al campo sanitario, incluida la enseñanza. Son escenarios desde los cuales se empeña día a día porque se conozca y reconozca cómo funciona el sistema de salud en Cuba, donde para los médicos y los científicos, dijo, “el pueblo cubano es siempre lo primero”.

Sobre esas experiencias de estudiar en Cuba, compartió con el equipo de prensa de la Presidencia al concluir el intercambio con el Presidente Díaz-Canel. No solo le aportó mucho como profesional, aseguró, sino que también abrió para ella otros horizontes de como persona y sobre cómo ver la medicina.

Realmente estudiar en Cuba hizo toda la diferencia, reflexionó, pues “cambió totalmente mi manera de tratar a los pacientes, lo cual intento transmitir también a mis estudiantes”.

Roberto Stuartz, vicepresidente de Global Health Partnes, es uno de esos testarudos que por varias décadas se ha empeñado en buscar caminos para sortear el bloqueo que impone el Gobierno de los Estados Unidos a Cuba. Acerca de esos tantos obstáculos compartidos durante el diálogo con el mandatario cubano, compartió luego con la prensa el señor Stuartz.

La inclusión de Cuba en la lista de estados supuestamente patrocinadores del terrorismo, detalló, nos impide, por ejemplo, “encontrar un proveedor que nos quiera vender esas medicinas”, y luego, cuando “logramos tenerlas en la mano, hacer el flete, hacer la transportación, es muy complejo, porque nadie se quiere poner de acuerdo con nosotros”.

Antes era más fácil, comentó, ahora es casi imposible, y después de la pandemia “tenemos que elegir un corredor desde Nueva York hasta Bruselas, luego a Madrid y seguidamente a La Habana”.

“No solamente es difícil y es retador sino que se vuelve muy costoso”, explicó, aunque ello aseveró, “no va a hacer que después de 30 años de colaboración cambiemos lo que hacemos, por el contrario, mientras más difíciles se vuelvan las circunstancia, más vamos a ayudar a Cuba”.

La Coalitión of Concerned Medical Professionals, es una institución cuya presidenta es Elisabeth L. Stevens, y en la cual se agrupan cientos de voluntarios que apoyan y defienden la causa cubana. Para ella, este encuentro con Díaz-Canel, nos dijo, es algo “muy especial”, porque “nos permite reconocer y agradecer todo lo que hace Cuba por la Salud en el mundo”.

De los tantos caminos para la cooperación comentó la señora Stevens, quien consideró mostrar a la población norteamericana, por ejemplo, los beneficios del uso del Heberprot-P es también una manera de ayuda a romper el bloqueo.

En Estados Unidos, subrayó, en lugar de un sistema de Salud tenemos un negocio de Salud, y eso no sucede en Cuba.

Queremos, dijo, que “el pueblo cubano sepa que hay muchos estadounidenses que lo ven como hermano, y que realmente estamos trabajando para tratar de cambiar esas políticas”.

22/09/2023

Fuente: (cubadebate)        Tomado de Noticias | Salud

Nueva York.- «Sí es posible, aunque no sea fácil», dijo risueña ante la grabadora la científica estadounidense Valerie Miller, directora del Programa Océanos del Fondo de Defensa Ambiental con sede central en Nueva York.

Pero ¿Qué es posible aunque no sea fácil? Eso lo sabe bien esta muchacha de ojos azules como el océano, cuya sostenibilidad la desvela. Valerie Miller, es su nombre y fue una de las profesionales de la ciencia que este jueves participó en un encuentro que sostuvo el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, con científicos del país norteño.

En el encuentro, celebrado en la Sede Permanente de Cuba ante Naciones Unidas, el dignatario agradeció la presencia de los visitantes y llamó a promover un mayor intercambio bilateral en materia de ciencia y tecnología; así como a expandir el aprendizaje mutuo para el beneficio de ambas naciones.

Díaz-Canel puso al día a los científicos estadounidenses sobre cómo a la preparación de los recursos humanos Fidel apostó desde la campaña de alfabetización, con la meta de hacer de Cuba “un país de hombres de ciencia” y luego la Revolución fundó universidades en todas las provincias, incluso se creó el polo científico en medio del periodo especial.

En el intercambio Díaz-Canel compartió detalles de cómo y ante qué presiones se alcanzó la proeza reciente de la ciencia cubana, las vacunas anti COVID-19. Si logramos hacer nuestros propios inmunógenos bloqueados, reflexionó el mandatario, cuánto podría hacerse con la unión entre los científicos.

Miguel Díaz-Canel

De igual manera, significó la función que ha tenido la ciencia en el proyecto de desarrollo social de Cuba y su carácter prioritario en los últimos 60 años.  La ciencia, precisó, ha desempeñado un papel fundamental en la reducción de las desigualdades, en la democratización de los beneficios sociales y en la identificación de soluciones a los problemas de la economía cubana.

Que es posible tener una relación civilizada de colaboración entre cubanos y norteamericanos lo demuestra Mark Spalding, Presidente de la Fundación Océanos, quien al concluir el evento conversó con la prensa y contó sobre los 30 años de relaciones con Cuba, con la Universidad de La Habana, con el Centro de Investigación Marina.

Fundación Océanos es ahora mismo la inspiración de que es posible diversificar las áreas de intercambio y proyectos de colaboración entre cubanos y norteamericanos. En ese sentido el Jefe de Estado instó a profundizar los vínculos e intercambios que históricamente han tenido las comunidades científicas de los dos países.

“Si es posible, aunque no sea fácil”, dijo la muchacha de ojos azules, que lleva en su vida a Cuba y a Estados enlazados por un puente: la ciencia.

El encuentro ocurre en el contexto del quinto aniversario del establecimiento de la Innovative Immunotherapy Alliance S.A, empresa mixta entre Cuba y los Estados Unidos dedicada a la investigación sobre el cáncer, y la reciente firma de un Memorando de Entendimiento con la organización The Ocean Foundation en el área de conservación marina.

Escuche y descargue desde nuestro Canal iVoox la propuesta radial.

22/09/2023

Fuente: (radiorebelde)     Tomado de Ciencia| Destacadas           Copyright © 2023

septiembre 25, 2023 | Gleidis Hurtado Cumbá | Filed under: Ciencia, Cuba, De la prensa cubana, Presidente Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez | Etiquetas: , , |