El Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (Cecmed), como Autoridad Reguladora en el país, constituye una institución de alto prestigio en el sistema de Salud cubano, afirmó la viceministra primera del sector, doctora Tania Margarita Cruz Hernández.

Al presidir este miércoles el acto central por el aniversario 35 de la entidad, resaltó su papel para lograr el adecuado aseguramiento de la calidad, en correspondencia a los estándares requeridos por la Organización Mundial de la Salud, y a partir de procesos de ampliación de su capacidad instalada «no solo en cuanto a su equipamiento tecnológico, sino también su infraestructura».

«Han sido múltiples los logros de esta institución a lo largo de 35 históricos años, subrayó la viceministra primera, participando decisivamente en los más disimiles escenarios y batallas que apuestan por la salvaguarda de la vida de la población».

De manera particular ponderó el imprescindible aporte del colectivo en la pandemia, cuando la infección por el virus SARS-CoV-2 desencadenó la peor crisis sanitaria de este siglo y se convirtió en un reto para las autoridades de regulación sanitaria, «de las que se demandó una actuación rápida y flexible ante nuevos medicamentos y dispositivos médicos desarrollados para su tratamiento, y donde el Cecmed demostró su valía y consagración».

En este contexto, en una mañana de homenajes, apuntó cómo a lo largo de su historia, el Cecmed ha desarrollado estrategias y protocolos que le permitieron dar respuesta a la demanda sanitaria y de la industria nacional innovadora, por ejemplo, con la contribución de que Cuba cuente con tres vacunas aprobadas: Abdala, Soberana 02 y Soberana Plus.

«Sirva esta nueva conmemoración como motivación y estímulo para crecer y avanzar hacia relevantes metas en la Isla y dentro del Sistema de Salud, en función de alcanzar todos los estándares internacionales posibles», refirió la doctora Tania Margarita Cruz Hernández, a la vez que trasladó un mensaje de reconocimiento del Ministro, doctor José Angel Portal Miranda, a cada uno de los trabajadores de la prestigiosa instalación, por las hermosas páginas escritas junto al pueblo.

Por ello, para la doctora Olga Lidia Jacobo Casanueva, directora del Cecmed, la fecha es homenaje también para esos especialistas que dejaron una profunda huella en su colectivo y que ya no se encuentran físicamente. «Por su meritorio tributo a la Salud Pública cubana, en jornadas intensas de trabajo, decimos gracias a todos».

Emocionada resumió la satisfacción por arribar a los 35 años con un capital humano donde muchos son expertos a nivel internacional; por contar con mecanismos de colaboración con otras agencias reguladoras y con 26 memorándum de entendimiento aprobados para consolidar los mecanismos de cooperación «y sobre todo con una capacidad demostrada en encontrar, con esfuerzo y talento, soluciones diarias ante los complejos problemas y adversidades que enfrentamos con el recrudecimiento del bloqueo del gobierno estadounidense hacia Cuba».

En su intervención, en el acto central por la efeméride, detalló ese quehacer integral en función de garantizar a la población, el acceso a medicamentos y productos con calidad, seguridad, eficacia y efectividad requeridas, reafirmando ese compromiso de continuar fortaleciendo «nuestro sistema de regulación sanitaria, que nos permita alcanzar la condición de autoridad listada por la Organización Mundial de la Salud».

Por último, la directora del Cecmed, aseveró que reciben este 35 aniversario con el orgullo de ser hoy una autoridad reguladora de referencia en la región de las Américas, con un robusto sistema de gestión de calidad implementado, y a favor de su pueblo.

La ocasión fue propicia para homenajear en este centro con la distinción Manuel Piti Fajardo, que otorga el Sindicato de Trabajadores de la Salud, a quienes permanecen de manera interrumpida en el sector desde hace más de dos décadas.

24 abril 2024 Fuente: MINSAP/ Noticias

Desde su cuenta oficial en la red social X, el presidente Díaz-Canel Bermúdez compartía impresiones sobre su visita a un instituto que tiene una historia muy importante con Cuba y es parte de las relaciones de hermandad existentes entre la isla y la República Islámica de Irán.

“Muy grato visitar el Instituto Pasteur de Irán. Su exitosa experiencia con el @FinlayInstituto en la producción conjunta de vacunas contra la COVID-19 es un ejemplo a seguir. Tenemos el compromiso de afianzar los nexos que nos unen, en función del bienestar de nuestros pueblos”.

En la jornada, donde confluyeron científicos de ambas naciones, el dignatario afirmó a modo de justo homenaje al Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz: “Hemos llegado hasta aquí por Fidel, que está presente como expresión de la solidaridad que nos enseñó”.

Durante los duros e inolvidables tiempos de pandemia de COVID-19, el Instituto Pasteur de Irán y el Instituto Finlay de Vacunas (IFV) estrecharon alianzas a partir de la vacuna cubana Soberana. Este lunes, durante la visita del presidente Díaz-Canel al centro científico ubicado en Teherán, el director general del IFV, Vicente Vérez Bencomo, estuvo presente en ese momento de indudable relevancia para la ciencia de ambas naciones.

Horas después, en diálogo con parte del equipo de prensa de la Presidencia de la República de Cuba, el científico recordó: “Nosotros empezamos una colaboración con el Instituto Pasteur hace unos cuantos años: desde el 2016 empezamos a verla, y la firmamos en el 2019”.

Bencomo dijo que el Instituto Pasteur de Irán había tenido una colaboración con el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) de Cuba, donde se había transferido un grupo de tecnología y se había propiciado una facilidad productiva, donde “las plantas se habían hecho a partir de transferencia de tecnología; o sea, que hay todo un precedente”.

“Ellos (los amigos) se mostraron muy interesados en la vacuna conjugada contra el neumococo, que en estos días estamos terminando”. Sobre ese producto científico complejo y que ha llevado no poco tiempo hacer, Bencomo recordó a la prensa que es “una vacuna que en aquel momento solo la tenía una firma norteamericana, y por lo tanto nuestros niños y los de ellos no tenían”.

“Es una vacuna que promete, por lo que han explicado nuestros científicos”, le comentamos.

“Sí. Y ellos (los iraníes) se interesaron mucho en la tecnología”, explicó el experto, quien hizo alusión a un contrato de transferencia de tecnología y a un pago que el país del Oriente Medio iba a hacer al país caribeño, “para nosotros reinvertirlo en terminar de desarrollar la tecnología” necesaria.

Ahí, según explicó Vicente Vérez, “empezó una relación muy buena con ellos. Avanzamos mucho”. Y en ese punto, el científico trajo a colación la vacuna contra la covid-19, la Soberana 02, una vacuna conjugada, al igual que la vacuna contra el neumococo. Lo dijo porque “cuando empezamos a desarrollar una vacuna conjugada contra la covid, que es la única conjugada que se hizo para la pandemia en el mundo, ellos dijeron: ‘Ya tenemos pasos de avance en transferencia y tecnología de vacunas conjugadas, ¿por qué no hacemos también esto para la covid y empezamos una transferencia de la vacuna Soberana 02?’”.

Con la concreción de esa propuesta, Cuba se benefició de la gran capacidad técnica de los científicos iraníes: “Se hicieron muchos ensayos clínicos en Irán, que validaron la vacuna también, y realmente tenemos un nivel de colaboración con ellos muy importante”.

Como todos los caminos verdaderos, este de alianza científica generó, recordó Bencomo, “momentos tensos y momentos de alegría, y realmente hemos creado un equipo conjunto de trabajo entre las dos instituciones”.

Sobre la visita del presidente Díaz-Canel a Teherán, el científico cubano resaltó el valor que ha tenido para relanzar la colaboración mutua “a un momento más alto”.

“Por lo tanto –dijo el director general del Instituto Finlay de Vacunas–, ahora estamos justamente proponiéndonos integrarnos más, ser más complementarios. Ellos tienen algunas vacunas que podemos utilizar en Cuba a través del Instituto Finlay, llevándolas incluso a América Latina, y nosotros vamos a aprovechar la capacidad de ellos para hacer ensayos clínicos aquí, utilizarlas aquí y también en la región”.

Es ese –agregó– un acuerdo estratégico que hemos firmado también, además de todo lo que ya permitió que deudas que teníamos y algunas otras cosas se aclararan en acuerdos que firmamos. “Vamos a lanzar la relación a un nivel mucho más alto”.

“Esto, evidentemente es muy positivo para las dos instituciones, en primer lugar, y para los dos pueblos”.

La visita del presidente cubano al Instituto Pasteur, consideró Bencomo, “fue muy importante”. Primero, porque permitió al mandatario “ver el nivel de relaciones entre las dos instituciones, tan cercanas y tan complementarias”.

La segunda razón tiene que ver con que el dignatario “explicó muy bien el origen de las relaciones entre Irán y Cuba, y qué papel juega la relación entre el Instituto Pasteur y el Finlay”. Bencomo contó a la prensa que en los rostros de los investigadores allí presentes era palpable un efecto, en positivo, que nacía de las palabras del mandatario.

Ante la pregunta de si él siente como promisorio todo lo que se está haciendo, Vicente Vérez Bencomo fue rotundo en la afirmación y dijo estar “muy satisfecho” con todo lo que se ha logrado hasta ahora.

7 diciembre 2023|Fuente: Cubadebate | Tomado de |Noticias| Política

La ONG Entrepueblos hizo posible que la científica cubana Claudia Bernal Estrada recalara el pasado miércoles 18 de octubre en Murcia, en la gira que está realizando por varias ciudades y capitales de España invitada por el Movimiento Estatal de Solidaridad con Cuba, para dar a conocer los logros de la investigación biotecnológica en su país que se lleva a cabo en el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), una “resistencia creativa” a pesar de las condiciones impuestas por el bloqueo de EE.UU., según destacó esta científica.

La biotecnología es una rama interdisciplinaria de las ciencias biológicas que se empeña en la aplicación tecnológica de sistemas biológicos y organismos vivos o sus derivados para la creación o modificación de productos o procesos para usos específicos. Tiene amplias aplicaciones en la industria, la agricultura, la medicina, la farmacología y el tratamiento de residuos sólidos, líquidos y gaseosos. La primera industria del mundo surgió en 1976 y en Cuba a principios de los 80 del pasado siglo.

Claudia Bernal puso especial énfasis en afirmar que, en Cuba, a diferencia de los países de la órbita capitalista, el tratamiento de la enfermedad es un asunto prioritario, las y los enfermos son tratados como un problema de salud y no como clientes. Expuso unos gráficos en los que se demuestra el ranking ventajoso de la isla en el tema sanitario, pese al bloqueo impuesto.

El Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) de Cuba es puntero y se creó en 1986, con la finalidad de investigar y comercializar vacunas, medicamentos y otros productos agropecuarios. A título de ejemplo, el Heberprot, medicamento que se basa en el factor de crecimiento humano recombinante, con infiltración en el interior de la lesión, desarrollado por el CIGB, se emplea como acelerador de la cicatrización de las úlceras del pie diabético, disminuyendo por tanto la prevalencia de amputaciones y mejorando la calidad de vida del paciente.

Claudia destacó que, ya en su día, Fidel Castro entendió la importancia de la ciencia y de la biotecnología. El Dr. Randolph Lee Clark, oncólogo estadounidense, le describió a Fidel las bondades del interferón en 1981. La información le animó tanto que inmediatamente armó un frente biológico y envió dos investigadores cubanos a la Universidad de Texas para estudiar el tema: así nació la biotecnología cubana. Posteriormente, seis científicos cubanos estuvieron nueve días de visita en Finlandia y, a su regreso, lograron sintetizar el primer interferón cubano.

Ciclo completo

Desde entonces, el impulso a la investigación médica y biotecnológica en Cuba no cesó. BioCubaFarma, con 20 000 empleados, agrupa a unas 46 empresas, con 80 líneas de producción y exportando a 40 países del mundo. Desarrolla el ciclo completo: investigación, desarrollo productivo, negocio y comercialización. Y algo a destacar: las empresas integrantes trabajan en estrecha colaboración, sin la competencia que se da en el ámbito occidental. Este grupo empresarial anunció a través de Twitter un nuevo acuerdo de cooperación con la empresa mixta china Changheber para la introducción de una inmunoterapia innovadora para el tratamiento del cáncer en aquel país.

Otro producto desarrollado es el HeberFERON, para el tratamiento de los cánceres de piel. Por otro lado, Jusvinza ha demostrado ser muy eficaz por sus propiedades antiinflamatorias en procesos reumatoides y artríticos, con una recuperación de un 85% de los pacientes.

Pero si hay que destacar un éxito evidente en las investigaciones del CIGB para poner coto a la covid-19 ha sido el procesado y distribución de las vacunas Abdala, Soberana 2 y Soberana, las primeras de Latinoamérica, vacunas que, con su dosis de refuerzo, Mambisa, han sido suministradas a más de siete millones de personas en Cuba y que han llegado también a países como México, Venezuela, Vietnam y Nicaragua. Mambisa fue el primer candidato de vacunas por vía nasal. Respecto de Abdala, el prestigioso medio británico The Lancet Discovery Center llegó a afirmar que esta vacuna es segura, bien tolerada y con una eficaz respuesta inmune contra la enfermedad.

La labor del CIGB no se detiene ahí, pues también ha procesado una vacuna contra la peste porcina, Porvac, premiada por la Academia de Ciencias de Cuba, así como soja transgénica, en línea con la obtención de la máxima soberanía alimentaria.

Implicación de la juventud y las dificultades del bloqueo

La investigadora Claudia Bernal destacó la implicación de la juventud cubana en la colaboración con estos procesos, y ello pese a la implementación de las 242 medidas para el bloqueo de Donald Trump, la vigente Ley de Comercio con el Enemigo, la evidencia, por tanto, de que los suministradores externos se muestran remisos a comerciar con la isla, y los ataques de todo tipo contra el país por los evidentes éxitos de las vacunas contra la pandemia de la covid.

Las empresas extranjeras se ven forzadas, por la presión de las multinacionales farmacéuticas y otras, a no comerciar con Cuba, por lo cual el país ha de buscar insumos en terceros países, por la dificultad de acceder al mercado norteamericano, lo que aumenta la carestía de la producción. Y ello contando con el boicot de la banca extranjera, como es el caso de Caixabank.

Pese a ello, esta joven investigadora recordó que la esperanza de vida en Cuba, en relación con el nivel económico de la isla, es muy alta, en línea con la de los países más desarrollados.  (Tomado de elDiario.es)

2 noviembre 2023| Fuente: Cubadebate| Tomado de Noticias Especiales de Salud