El Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Sancti Spíritus (CIGBSS) reanudó recientemente la producción de tirillas para el diagnóstico temprano del embarazo que se comercializa bajo el nombre de HeberFast Line® MaterniTest II, un método sencillo y confiable que, tras poco tiempo de espera, ofrece un resultado certero.

De acuerdo con Enrique Rosendo Pérez Cruz, director del CIGBSS, en las próximas semanas serán repartidas 120 000 unidades para las farmacias del país de un producto que está basado en el empleo de anticuerpos monoclonales específicos contra la Gonadotropina Coriónica Humana (hCG por sus siglas en inglés), una hormona producida por las gestantes y cuya presencia se determina por este diagnosticador en muestras de orina.

“No es menos cierto que hemos presentado afectaciones en lo financiero debido, en lo fundamental, al bloqueo norteamericano y a la imposibilidad de pagarle a nuestros proveedores, pero ya hoy la producción de MaterniTest II está en proceso y en breve debería comenzar su distribución a la red de farmacias cubanas”, expresó.

Explicó que todas las tirillas son elaboradas en Sancti Spíritus, donde cumplen con los estándares regulatorios para este tipo de producto, además de poseer la certificación de buenas prácticas de fabricación; así como la licencia sanitaria para la producción de diagnosticadores y reactivos biológicos que otorga la Autoridad Reguladora de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos de la República de Cuba (CECMED).

El director del CIGB Sancti Spíritus agregó que estos autoensayos son de gran importancia para los médicos cubanos y reducen el riesgo de que las mujeres acudan a la consulta de planificación familiar sin el conocimiento exacto de su condición como gestante o no.

“Dar continuidad a esta producción significa poner a disposición de la comunidad un diagnóstico temprano del embarazo, especialmente en el período más complicado de la gestación, cuando pueden ocurrir abortos espontáneos sin que esa persona sepa que está embarazada”.

Aseguró que la referida autoprueba también es útil para valorar el caso de un embarazo ectópico, el cual se produce cuando un óvulo fecundado se implanta y crece fuera de la cavidad principal del útero. Si no se trata con prontitud, el óvulo fecundado no puede sobrevivir y el aumento de tejido puede provocar un sangrado que ponga en riesgo la vida de la paciente.

“MaterniTest II ayuda a evitar métodos invasivos. Estudios previos realizados por nosotros demostraron que el 42 por ciento de las mujeres que acude a las consultas de planificación familiar por causa de amenorrea o ausencia de menstruación no estaban embarazadas”.

“Lo anterior tributa al Programa Materno Infantil en Cuba y contribuye a la salud de la mujer en edad fértil que puede presentar algún trastorno fisiológico o ginecológico desconocido, el cual pudiera ser revelado con ayuda de este diagnosticador”, acotó.

Enrique Rosendo Pérez Cruz aseguró que desde el 2013 han producido más de un millón de tiras para el diagnóstico temprano del embarazo y jamás han recibido ni una sola reclamación asociada a una baja calidad de MaterniTest II.

Comentó que la exactitud, rapidez del procedimiento y la posibilidad de repetirla cuantas veces la mujer considere necesaria son beneficios añadidos a este tipo de diagnóstico: “Se trata del primer diagnosticador que se vende en las farmacias cubanas y debemos aproximarnos este año a las 270 000 tirillas producidas”, informó.

Para resultados más fehacientes, los especialistas recomiendan realizar la prueba 72 horas después de la ausencia del período, porque el organismo habrá liberado suficiente hCG para frenar el sistema inmunológico materno y aclaran que la primera orina de la mañana constituye la muestra ideal.

El diagnóstico de embarazo mediante la detección de hCG es uno de los más certeros del mundo, además de ser un test sencillo que se puede realizar en el hogar.

El HeberFast Line Maternitest II es una versión del primer autoensayo que crearon los especialistas espirituanos en el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología en 1996, aunque en aquel momento se producía en el CIGB de La Habana. Los resultados que permiten valorar su efectividad son superiores al 99 por ciento.

26 junio 2024 Fuente: Tvsantiago/ Noticias/ Salud

Casi al cerrar el primer semestre del año el municipio de Trinidad muestra indicadores favorables del Programa Materno Infantil y no reporta niños fallecidos menores de un año, un resultado notable que corona el desvelo de los trabajadores de la salud en función de reorganizar servicios y optimizar recursos.

En el sureño territorio sobresale el quehacer de los médicos y enfermeros de la familia, ginecobstetras, clínicos, pediatras, trabajadores sociales y otros especialistas involucrados en el seguimiento a la mujer desde la etapa preconcepcional, tanto en el nivel primario, que incluye la proyección comunitaria, como en la atención secundaria.

Para el doctor Luis Sáenz, director de Salud en Trinidad, las cifras que ubican al municipio entre los más estables de la provincia, no son obra del azar, sino expresión de un sistema de trabajo bien engranado y del carácter intersectorial con que se trabaja este programa.

Tampoco han ocurrido hasta la fecha muertes maternas, logro que, de acuerdo con el especialista, se sostiene en la calidad de la atención obstétrica, el seguimiento al embarazo de alto riesgo y la implementación de otras estrategias para la reducción de parámetros negativos.

Entre ellas, expresó, figuran la atención de las gestantes para prevenir la anemia y compensar enfermedades crónicas, factores directamente vinculados con la prematuridad, el Crecimiento Intrauterino Retardado (CIUR) y el bajo peso al nacer, este último, con cifras que imponen un control permanente a dicho indicador.

El sistema de salud en el territorio ha diagnosticado otros desafíos, como el decrecimiento de la tasa de natalidad- hasta la fecha se reportan 52 nacimientos que en igual etapa del año anterior- y el embarazo en la adolescencia, con consecuencias para la salud de la madre y el bebé.

El director de Salud en el municipio enfatizó que el propósito es lograr mantener en cero la tasa de mortalidad infantil al concluir el 2024; y para ello es fundamental continuar articulando el trabajo en la comunidad con la atención primaria y secundaria de salud.

25 junio 2024 Fuente: Escambray/ Noticias/ Salud

La improvisación, esa que permite componer al vuelo sorprendentes décimas, nada tiene en común con servicios estratégicos de la Salud cubana, como los neonatales y otros que inciden directamente sobre la tasa de mortalidad infantil.

Tampoco media la casualidad en ese terreno. Lo confirma la estabilidad que durante años ha mantenido ese indicador en Sancti Spíritus, una de las razones que tuvo muy en cuenta el Buró Político del Partido para otorgarle a la provincia la sede de los festejos centrales por el aniversario 71 del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, fortalezas militares con que contaba la tiranía en Santiago de Cuba y Bayamo, respectivamente, en 1953.

Baste saber que, durante los últimos cinco años, a pesar de las crecientes adversidades económicas y sociales, agravadas por la pandemia de la COVID-19, el territorio ha mostrado una estabilidad que lo ha mantenido entre los tres mejores del país: 4,7 fallecidos por cada mil nacidos vivos al cierre de 2023; y 3,8 hoy.

En opinión del doctor Francisco García González, jefe del Programa Materno Infantil, sigue siendo vital la interacción de la atención primaria y secundaria en vertientes como el programa genético integral, más allá de la labor para detectar oportunamente malformaciones congénitas, en un empeño que «aterriza» a escala de policlínico.

Tampoco hay casualidad cuando entran en acción proyectos como la consulta provincial de Crecimiento Intrauterino Retardado (CIUR), cuya tendencia pudiera ser al incremento si se tiene en cuenta la insuficiente base alimentaria de madres que nacieron en los más crudos años del periodo especial y, sin embargo, el territorio ha logrado prepararse para ello.

Visto así, puede parecer asunto sencillo, pero especialistas, directivos y trabajadores de la Salud saben cuánto tiempo y seguimiento hay que dedicar para poder fortalecer, digamos, el servicio de perinatología, o para exhibir supervivencias superiores al 97 % en pacientes graves y no menos alentadoras en casos críticos.

Obviamente, la decisión de rescatar el funcionamiento del hogar materno en cada municipio creó bases para prevenir riesgos de atención prenatal y obrar con un enfoque intersectorial que ayuda a destrabar nudos en ese entorno.

Aunque no es lo predominante, aislados casos de madres que abandonan esos hogares e incluso salas como la de Neonatología, en el Hospital Provincial Camilo Cienfuegos, generan mayor preo­cupación y ocupación para las especialistas Midalis Martínez Barrios, Amary Yumar Díaz y el joven doctor Lázaro Díaz Sieiro, vicedirector del área materno-infantil.

Con su pequeña Enma Alejandra en brazos, Damarys Pérez González, de Jatibonico, no halla palabras para agradecer la atención a su niña allí, durante dos meses (nació con apenas tres libras de peso) y, finalmente, afirma: «Aquí no hay médicos ni enfermeras, tú sientes que hay padres, madres, abuelos, una familia a tu disposición».

Minutos después, la joven enfermera Yanisleydis Valdivia comentó: «Entregamos nuestro conocimiento y mucho amor, pensando que ese niño puede ser nuestro hijo. Por eso nos queda tremenda alegría cuando se van de alta, y sufrimos cuando hay alguna complicación o fallecimiento».

Con razón, la también enfermera Elba Ibis García lleva 48 años trabajando en ese servicio. Se jubiló y… qué va, al poco tiempo, ante el llamado de Lazarito, respondió: ¡Allá voy de nuevo! Y ahí está.

19 junio 2024 Fuente: Escambray/ Noticias/ Salud