Millones de vidas están en peligro por los recortes de EE.UU. a sus programas de ayuda en diversos países contra enfermedades como la malaria, el sida o la tuberculosis, advirtió este lunes en rueda de prensa el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus.

«En el caso de la malaria, “si continúan las interrupciones, se podrían sufrir 15 millones de casos adicionales al año y 107 000 muertes, lo que supondría perder 15 años de progresos”, destacó el máximo responsable de la agencia sanitaria de la ONU».

Respecto al VIH/sida, “podría haber tres millones de muertes relacionales más, el triple de las registradas el pasado año”, regresando a números de hace unas dos décadas, advirtió Tedros en una prolongada intervención en la que enumeró múltiples efectos de la retirada de ayuda norteamericana para la salud global.

Sobre la tuberculosis, Tedros advirtió que 27 países de África están sufriendo colapsos en sus sistemas de respuesta, con problemas de personal y suministro de tratamientos y tests.

El director general recordó en este sentido que Estados Unidos ayudó durante las últimas décadas a salvar unos 80 millones de vidas con programas de prevención de la tuberculosis, “unos progresos que ahora también están en peligro”.

Redes de vacunación

Asimismo, las redes de vacunación contra enfermedades como el sarampión, la polio o la rubeola en muchos países en desarrollo están ya sufriendo los efectos del final de la contribución estadounidense a través de la agencia de cooperación USAID y otros canales, subrayó el experto etíope.

“Una red de más de 700 laboratorios para la inmunización global de estas enfermedades estaba completamente financiada por Estados Unidos y ahora corre el riesgo de tener que cerrar justo en el peor momento, cuando está habiendo una resurgencia del sarampión”, agregó.

Tedros también llamó la atención sobre las dificultades actuales de supervisar el avance de la gripe aviar, una de las enfermedades con mayor potencial pandémico, después de que Estados Unidos reportara el pasado año los primeros casos de contagios entre ganado vacuno y humanos, en varias granjas de ese país.

Alertó de que más de 2 600 instalaciones sanitarias en una docena de crisis humanitarias han tenido que suspender ya sus servicios total o parcialmente, o están en peligro de hacerlo, a causa de la crisis que la salud global enfrenta por la marcha de EE.UU., uno de los principales contribuyentes a la OMS y sus programas durante décadas.

Salud global

“La Administración estadounidense ha sido extremadamente generosa durante muchos años, y está en su derecho de decidir los programas que apoya o no, pero tiene una responsabilidad a la hora de garantizar que cuando retira sus fondos lo hace de forma ordenada y humana”, aseguró el director general, quien conminó a Washington a negociar una salida más progresiva de los países afectados.

“Pedimos a EE.UU. que reconsidere sus decisiones, porque su apoyo a la salud global no sólo salva vidas en el mundo en general, sino que también hace más seguros a los propios Estados Unidos”, afirmó.

El director general de la OMS reconoció que, tanto si Estados Unidos reanuda alguno de los programas paralizados como si no lo hace, “otros donantes tendrán que aumentar sus esfuerzos”, así como los países que dependían en gran medida de EEUU, y recordó que la OMS ha pedido repetidamente a todos sus miembros que aumenten progresivamente su gasto en salud.

“Ahora es más importante que nunca”, concluyó el director general de la OMS, organización de la que Estados Unidos se retiró poco después de que Donald Trump fuera investido presidente por segunda vez, aunque en teoría la salida norteamericana no se oficializará hasta pasado un año.

17 Marzo 2025 Fuente: Cubadebate/ Noticias/ Salud

La ONU publicará hoy su previsión global sobre salud y bienestar humano, que describe cambios críticos y señales sobre la necesidad de prepararse mientras el mundo se acerca a una policrisis.

El texto, titulado Navegando nuevos horizontes: un informe prospectivo mundial sobre la salud planetaria y el bienestar humano, busca llamar la atención sobre una serie de desafíos emergentes que podrían perturbar a la humanidad.

Elaborado por la Agencia de la ONU para el Medio Ambiente (Pnuma), el reporte anuncia ocho cambios globales críticos «que están acelerando la triple crisis planetaria del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y naturaleza, y la contaminación y los desechos».

De acuerdo con el Pnuma, cientos de expertos globales identificaron 18 señales de cambio que ofrecen una visión de las posibles perturbaciones, tanto positivas como negativas, que el mundo debe vigilar de cerca.

Entre los más críticos, el documento identifica la escasez de recursos y la competencia que reconfiguran la dinámica de la seguridad global.

Como consecuencia se prevé un aumento del 400 por ciento en la demanda de minerales críticos en los próximos 15 años, lo que puede amenazar la biodiversidad en terrenos prístinos.

Asimismo, advierte un aumento de los conflictos armados, la violencia y la desinformación junto a la persistencia y ampliación de las desigualdades y los desplazamientos forzados masivos como consecuencia de los conflictos, los fenómenos climáticos extremos y los impactos ambientales.

Como respuesta, el informe propone una mejor toma de decisiones mediante la creación de un nuevo contrato social, la adopción de una gobernanza ágil y adaptativa y el aumento de los datos y conocimientos integrados y accesibles.

Se trata, a juicio del organismo, de un duro recordatorio de la interconexión y la fragilidad de los sistemas en el siglo XXI al tiempo que llama a priorizar los beneficios a corto plazo por sobre la acción anticipatoria y la preparación pone en peligro la prosperidad a largo plazo y la salud del planeta.

No obstante, también señala el enorme potencial y el ingenio humano que se pueden aprovechar con espíritu de descubrimiento y cooperación para ofrecer soluciones a la triple crisis.

15 julio 2024 Fuente: Tvsantiago/ Noticias/ Salud

Poco más de 30 años atrás inició la cooperación de Cuba con el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA). Múltiples son los proyectos y acciones conjuntos que se han puesto en marcha desde entonces con el objetivo de proteger y atender a las personas que viven con esa enfermedad, tanto en nuestro país como en otros del mundo.

«Con el propósito de evaluar cuánto se ha hecho en ese camino y a su vez seguir buscando qué más podemos hacer para fortalecerlo en beneficio de la salud y de la vida, desde el pasado lunes se encuentra de visita en Cuba la directora ejecutiva de ONUSIDA, Winnie Byanyima, con quien sostuvimos un fructífero encuentro de trabajo en la tarde de este martes».

En nuestro diálogo compartimos importantes ideas asociadas al desarrollo del Programa Nacional de Prevención y Control del VIH/SIDA, que se puso en práctica desde 1986 y tiene como base la prevención social, con un enfoque comunitario, intersectorial y multisectorial.

«Actualmente en Cuba 28 mil 643 personas viven con VIH/SIDA, de las cuales el 96.8% tiene tratamiento. Un 89.3% de quienes reciben la terapéutica tiene una cargar viral suprimida de la enfermedad».

No olvidemos además que, en el 2015, nuestro país fue certificado como el primero del mundo en eliminar la transmisión materno-infantil del VIH/SIDA y la sífilis congénita, condición que fue revalidada en los años 2017, 2019 y 2022.

Son resultados que tienen como respaldo las acciones contenidas en el Programa nacional que se implementa, lo cual ha sido posible, entre otros elementos, debido al compromiso político del Estado con la atención a las personas que viven con VIH/SIDA y las inversiones que para ello ha realizado, así como las características que distinguen a nuestro Sistema de Salud, con base en la Atención Primaria, y una proyección hacia la prevención, aspecto en el que resulta esencial el enfoque multisectorial con que trabajamos.

Todo ello tiene un amplio respaldo legal en diversas normativas cubanas como son la Constitución de la República, el Código de las Familias y la recientemente aprobada Ley de la Salud Pública.

Unido a esos elementos, es importante destacar también los aportes que en diferentes aspectos ha hecho a la lucha de Cuba contra el VIH/Sida el Fondo Mundial, organización internacional cuyo objetivo es acelerar el final de las epidemias de sida, tuberculosis y malaria.

Sumamente significativa ha sido también la contribución de ONUSIDA en aspectos relacionados con asesorías, adquisición de medicamentos y creación de capacidades para el fortalecimiento del Programa cubano para hacer frente a la pandemia.

Cuba ratifica su compromiso y firme voluntad de proteger y atender a las personas que viven en nuestro país con el virus, así como de cooperar con otras naciones a las que puedan ser útiles las experiencias y logros que hemos alcanzado en lo referido a su prevención, diagnóstico, tratamiento y control.

8 Mayo 2024 Fuente: MINSAP/ Inicio