Pese a los avatares económicos y persecuciones financieras, Cuba no deja de ocuparse de su pueblo. Para ello mantiene el principio de que lo primero es ser un centinela, alerta por demás, de su salud. El carácter preventivo de su Medicina, que se ha ganado, dentro y fuera de su geografía, un merecido prestigio, tiene ante sí un reto colosal: un silencioso enemigo lo acecha.

¿Pero sí ayer hablamos hasta tarde en la noche, cómo va a ser, si ese hombre no tomaba ni pastillas, era un roble? ¿Qué le pasó? Cuántas veces no hemos escuchado esas interrogantes ante la triste noticia del fallecimiento de un familiar, un amigo o un compañero de trabajo. Las respuestas no las encontramos en el raciocinio, pues el dolor del abrupto suceso nos lacera y descoloca, más están en ese adversario oculto, que nos arrebata la felicidad: la muerte súbita.

El doctor Luis Alberto Ochoa Montes nos explica que «las enfermedades cardiovasculares constituyen, hoy, la causa más frecuente de muerte prematura e invalidez en el mundo, con más de 17 millones cada año. Las proyecciones indican que continuará como la primera en países industrializados, y pasará a ser la tercera en los que se encuentran en vías de desarrollo, con un incremento en la mortalidad estimada para 2030 de 23 millones de personas. Uno de cada dos de esos sucesos acontece súbitamente».

Al decir del galeno, en Cuba, la creación de programas y protocolos de actuación por el Ministerio de Salud Pública, para la prevención, el tratamiento y la rehabilitación de las enfermedades cardiovasculares resultan pilares esenciales para evitar ese desenlace fatal inesperado.

Afirmó que la disponibilidad de consultas especializadas en la atención a pacientes de alto riesgo de muerte súbita cardiovascular, y el tratamiento eficaz y oportuno de esta enfermedad crónica no transmisible, para lograr su control a través de las modificaciones de modos y estilos de vida no cardiovasculares y tratamiento farmacológico, aseguran evitar la ocurrencia de un paro cardiaco súbito que desencadene en la muerte.

Por su impacto en la familia, en la sociedad, y en el orden económico, la ciencia cubana no deja de investigar y de combatir, a fin de preservar el derecho más sagrado: la vida. El doctor Ochoa Montes es el presidente del comité organizador del II Simposio Internacional y IV Simposio Nacional de Muerte Súbita Cardiovascular, del 15 al 17 de este mes, que tiene como premisa el compromiso de la Medicina cubana con su pueblo, al plantearse que frente a la muerte súbita todos ponemos el corazón.

Ante el chocante e inconsolable suceso de algo tan imprevisto, le preguntamos a Ochoa Montes si es posible evitar, lo que parece inevitable, cuando se manifiesta esta entidad.

«A pesar de su carácter súbito e inesperado, existen cambios en el estado cardiovascular del paciente hasta seis meses previos a la ocurrencia del paro cardiaco. Resultados de investigaciones del Grupo de muerte súbita cardiovascular de Cuba y estudios internacionales, reconocen la existencia de pródromos de muerte súbita hasta en el 40 % de los casos que, de ser interpretados correctamente evitarían, con una intervención médica eficaz, su evolución. Por ejemplo, empeoramiento o cambio de patrón de un cuadro de dolor anginoso, falta de aire en actividades habituales, palpitaciones, pérdida transitoria de la conciencia, trastornos del ritmo cardiaco, o agotamiento fácil. Valorar estas manifestaciones por el paciente, y acudir rápido al médico de la familia, permitirían revertir cualquier descompensación en la función cardiovascular».

Por eso sería muy importante que lo debatido en un evento de alto nivel científico por la vida, como este, en el hospital Hermanos Ameijeiras, trascienda el ámbito de su sede para instalarse, en cada unidad asistencial del sistema de Salud, desde la atención primaria hasta la más especializada.

13 noviembre 2023 | Fuente: Granma| Tomado de Mundo

Canberra, 24 oct (RHC) La presión arterial puede fluctuar en diferentes períodos de tiempo y esto parece aumentar el riesgo de demencia y enfermedades cardiovasculares, advirtió hoy una fuente científica.

Esta puede variar en lapsos cortos y largos, y parece incrementar el peligro sobre los vasos sanguíneos.

“Las variaciones más altas de la presión arterial sistólica (el número superior que mide la presión en las arterias cuando late el corazón) también están relacionadas con el endurecimiento de las arterias, asociado con la enfermedad cardíaca”, subrayó la revista Cerebral Circulation-Cognition and Behaviour.

Los investigadores de la Universidad de Australia del Sur afirman que es bien sabido que la presión arterial alta es un factor de riesgo para la demencia, pero se presta poca atención a las fluctuaciones.

Reconocen que los tratamientos clínicos se centran en la hipertensión, ignorando la variabilidad, y este concepto debe ser cambiado de inmediato. (Fuente:PL)

26 octubre 2023 | Fuente: Radiohc| Tomado de Noticias| Salud

octubre 26, 2023 | Gleidis Hurtado Cumbá | Filed under: Cuba, De la prensa cubana | Etiquetas: , , , |