Jul
27
Desde comienzos de la segunda semana de julio, la temporada ciclónica de 2024 en la cuenca del Atlántico norte, que incluye el golfo de México y el mar Caribe, transita por una etapa de calma total.
Según han planteado reconocidos especialistas de diferentes universidades e instituciones científicas del orbe, incluido el Instituto de Meteorología (Insmet) de nuestro país, la presencia de altas concentraciones de Polvo del Sahara y la permanencia de ese tipo de nube son las causas fundamentales de la actual «tranquilidad» en el estado del tiempo observada en toda esa área geográfica, condición que, al parecer, pudiera extenderse hasta finalizar el mes.
Para conocer de qué manera el polvo sahariano limita la actividad ciclónica y otras cuestiones de interés, relacionadas con los impactos ambientales de ese evento natural, Granma conversó con el doctor en Ciencias Físicas Eugenio Mojena López, asesor del Insmet y pionero de las investigaciones sobre el tema en Cuba.
–¿Qué son las nubes de Polvo del Sahara y cómo llegan a la región del Caribe?
–Las nubes son generadas por las tormentas de arena y polvo del desierto del Sahara y la región del Sahel, en África. Suelen alcanzar alturas de tres a siete kilómetros, y una vez emergidas del continente africano, avanzan en dirección oeste y suroeste, impulsadas por el flujo de los vientos alisios.
Así, se propagan por el océano Atlántico, hasta alcanzar el mar Caribe y cubrir a las Antillas Mayores, incluida Cuba. Pueden llegar también a Centroamérica, partes de México, el sudeste de Estados Unidos y la península de la Florida.
De modo general, vienen cargadas de material particulado pm10 y pm2,5, altamente nocivos para la salud, además de contener minerales como hierro, calcio, fósforo, silicio y mercurio, junto a virus, bacterias, hongos, ácaros, estafilococos y otros compuestos.
Las primeras nubes de polvo arriban generalmente al mar Caribe a partir del mes de marzo. Ese proceso se va intensificando, y alcanza su máximo en los meses de junio y julio, para comenzar a declinar en septiembre, y fijar su mínimo en octubre.
Para Cuba en particular, el máximo de frecuencia de días con nubes de Polvo del Sahara ocurre entre mayo y agosto, pero, al igual que se observa en el resto del área del Caribe, los picos se producen en junio y julio. Hasta el presente, han tenido la peculiaridad de comportarse de manera inestable en cuanto a su presencia sobre el territorio nacional, y con baja concentración.
Es oportuno recalcar que las nubes de Polvo del Sahara existen hace miles de años, pero la comunidad científica conoció de su importancia con el desarrollo de la tecnología satelital, a inicios de la década de los años 60 del pasado siglo. Gracias a ese avance, hoy es posible detectarlas a partir de su formación, y darles seguimiento a lo largo de todo su recorrido.
Debo señalar que, cuando estamos bajo la influencia de las nubes de polvo sahariano, el cielo adquiere una tonalidad blanquecina o lechosa, es decir, que pierde su habitual color azul intenso, y aparece una densa bruma que limita la visibilidad a larga distancia.
Datos de instituciones internacionales señalan que, en las últimas tres décadas, la cantidad de Polvo del Sahara diseminada en la atmósfera, aumentó en más de diez veces.
–¿Por qué las llaman el «verdugo» de los ciclones tropicales?
–Esas nubes actúan como un muro de contención para el surgimiento e intensificación de los ciclones tropicales, al crearles un ambiente sumamente hostil, caracterizado por el aporte de aire muy caliente y seco, con valores mínimos de humedad relativa.
También incrementan la llamada cizalladura vertical del viento en las altas capas de la atmósfera, lo cual impide a los organismos ciclónicos concentrar la energía requerida para su formación y gradual fortalecimiento.
Por supuesto, toda regla tiene su excepción, y hemos visto algunos organismos ciclónicos tropicales resistir y mantenerse con vida, a pesar de las condiciones ambientales hostiles que estas les crean en el entorno por el que se desplazan, pero son casos muy aislados.
Otro detalle de interés es que, si bien acentúan la sensación de calor y disminuyen la probabilidad de lluvias en las áreas bajo su influencia, tienden a favorecer el aumento de la actividad eléctrica cuando ocurren las típicas tormentas de verano».
–¿Cuáles son los principales impactos ambientales que provocan?
–En altas concentraciones, la presencia de nubes de polvo disminuye la calidad del aire y puede incentivar los cuadros de alergia, sobre todo irritación de la piel, los ojos y las mucosas, en personas sensibles, como niños y adultos mayores.
Igualmente, en los individuos con enfermedades respiratorias crónicas, en particular asma bronquial y enfisema pulmonar, pueden acentuar los efectos de esas dolencias, de ahí la conveniencia de que quienes las padezcan, eviten exponerse a ese ambiente enrarecido.
Los conocimientos científicos corroboran que el Polvo del Sahara influye en el declive de las poblaciones de arrecifes coralinos, pues propician que esos ecosistemas puedan ser atacados por un hongo endémico de África, transportado por esas nubes. Asimismo, causan perjuicios a la agricultura y a la biodiversidad.
Más reciente, se le vincula con la proliferación de los grandes eventos de marea roja en la región del Caribe. Muestra de ello es la llegada, cada vez más frecuente, de notables volúmenes de sargazos a las playas de Barbados, Martinica, República Dominicana, Jamaica, Belice, México y el sur de Estados Unidos.
26 julio 2024| Fuente: Granma| Ciencia
Nov
3
«Más de un centenar de pacientes han sido atendidos por un equipo multidisciplinario de colaboradores cubanos de la salud, que brinda apoyo a los damnificados del huracán Otis, en el estado mexicano de Guerrero. Se unen a colegas de ese país en actividades asistenciales en barrios», informó en la red social X, el canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla.
Con anterioridad, el también miembro del Buró Político, aseguró que especialistas cubanos en medicina se encuentran en Acapulco para brindar atención en servicios de urgencia tras el paso del potente meteoro.
Por su parte, el ministro de Salud Pública de Cuba, José Angel Portal Miranda, manifestó su admiración por la labor ejemplar de los médicos cubanos. «En medio de la destrucción, su esfuerzo es un faro de esperanza para el pueblo hermano de México», dijo.
Según Prensa Latina, a 49 ascendió la cifra de fallecidos a causa de este fenómeno meteorológico en el estado sureño de Guerrero de acuerdo con su gobernadora, Evelyn Salgado, en su reporte diario al presidente Andrés Manuel López Obrador.
El Jefe de Estado mexicano apuntó que el huracán derribó más de 10 000 postes de energía eléctrica, y ya se han levantado 3 211.
La secretaria de Bienestar, Ariadna Montiel, reportó que han censado 10 468 viviendas, con la participación de 1 103 servidores de la nación que se han desplazado casa por casa en Acapulco y en el municipio de Coyuca, reportó PL.
Los especialistas cubanos en medicina, que ya se encuentran en Acapulco, brindan atención en servicios de urgencia y a hospitalizados tras paso del huracán Otis. También asisten en el traslado de pacientes hacia otros hospitales.#Cuba brinda su solidaridad a hermanos mexicanos.
2 noviembre 2023| Fuente: Granma| Tomado de Mundo
Sep
5
Nuevos amigos, personas humildes agradecidas, reconocimiento de las autoridades y sobre todo numerosas vidas salvadas es la gran satisfacción de un grupo de 62 médicos que regresó a Cuba, tras cuatro años de ayuda solidaria en Guatemala.
En noviembre venidero se cumplirán 25 años del inicio de la presencia de colaboradores cubanos de la salud en tierra guatemalteca para asistir a los damnificados por el devastador paso en 1998 por Centroamerica de los huracanes George y Mitch.
Ante el pedido de ayuda de los gobiernos centroamericanos, Cuba no dudó en manifestar su disposición de enviar personal médico y auxiliar de salud por el tiempo que fuera necesario.
Es una página más de la larga historia de la colaboración sanitaria entre la Mayor de las Antillas y otras naciones, y que en Guatemala ha tenido momentos importantes y de gran significación para los sectores más humildes.
Destacan la inauguración en 2006 del primer centro oftalmológico de la Operación Milagro, al que posteriormente se sumarían otras tres instituciones.
Guatemaltecos de bajos ingresos se vieron beneficiados con la apertura de estas instalaciones. Miles recuperaron la visión gracias a la atención brindada por los especialistas cubanos.
A lo largo de los años los colaboradores del archipiélago no solo han llevado la salud a los más recónditos lugares de la geografía guatemalteca, sino que han estado presentes ante otros desastres naturales.
Así fue cuando el huracán Stan en 2005 que dejó numerosas víctimas y grandes daños materiales y la erupción en 2018 del volcán de Fuego.
Ardua fue la labor de los profesionales cubanos de la salud durante la pandemia de la COVID 19. Junto a sus colegas guatemaltecos trabajaron sin descanso en los centros hospitalarios para hacer frente a la enfermedad causada por el nuevo coronavirus.
El ministro de Salud Pública y Asistencia Social de Guatemala, Francisco Coma, ha destacado el apoyo de Cuba con las brigadas médicas, que trabajan en zonas de difícil acceso, mejorando la prestación de servicios esenciales lo que se traduce en un mejor estilo de vida.
Los médicos de la Mayor de las Antillas están en aquellos parajes donde la pobreza extrema arrebata vidas. Son una esperanza para numerosas personas, quienes agradecen su solidaridad, humanismo y profesionalidad. Una prueba más de la falsedad de la campaña de los enemigos de la revolución contra la colaboración sanitaria cubana.
02/09/2023(Radiohc) Tomado- Especiales Radio Habana Cuba © 2020