Feb
8
La insuficiencia cardíaca afecta a más de 64 millones de personas en el mundo. Consiste en un trastorno por el cual el corazón pierde su capacidad para bombear sangre de manera eficiente, y los tratamientos actuales no logran restaurar el tejido dañado.
Un equipo de investigadores de Alemania y Estados Unidos desarrolló un parche con tejido de músculo cultivado en el laboratorio que consigue mejorar la función cardíaca.
El tejido está compuesto por células madre diferenciadas en cardiomiocitos. Se sutura al corazón y contribuye a fortalecer su capacidad contráctil sin los riesgos de arritmias o tumores asociados a otras terapias celulares, según detallaron los científicos en su artículo publicado en la revista Nature.
En diálogo con Infobae, Sergio Baratta, médico, jefe de cardiología del Hospital Universitario Austral y presidente electo de la Sociedad Argentina de Cardiología, dijo tras leer el nuevo estudio: “Se trata de un trabajo muy interesante. Arroja una luz de esperanza al evaluar un parche desarrollado a partir de células madres inducidas. Anteriormente, hubo otros intentos que no prosperaron bien. En cambio, este nuevo desarrollo ya está dando prometedores resultados”.
Por supuesto —aclaró el experto— “se necesitan más ensayos para contar con más pruebas de eficacia y seguridad. Si todo resulta óptimo, el parche podría ser una opción para pacientes con insuficiencia cardíaca avanzada que no consiguen a tiempo un trasplante del corazón o que no responden a otras opciones terapéuticas”.
Qué síntomas provoca la insuficiencia cardíaca
La insuficiencia cardíaca afecta a más de 64 millones de personas en el mundo y es un trastorno en el que el corazón pierde la capacidad de bombear sangre eficientemente (Imagen Ilustrativa Infobae)
Los síntomas más comunes de la insuficiencia cardíaca son tos, fatiga, debilidad, desmayos, pérdida de apetito (inapetencia), necesidad de orinar en la noche, pulso irregular o rápido, dificultad para respirar cuando está activo o después de acostarse, hígado o abdomen inflamado, hinchazón de pies y tobillos, y aumento de peso.
Entre sus principales causas de la afección se encuentran los infartos de miocardio, la hipertensión arterial y la enfermedad coronaria.
Las opciones terapéuticas actuales, como los trasplantes de corazón y los dispositivos de asistencia ventricular, presentan desafíos significativos. La escasez de órganos limita el acceso a trasplantes, mientras que los dispositivos mecánicos pueden generar complicaciones y requieren un alto costo de mantenimiento.
En qué consiste la innovación para la insuficiencia cardíaca
Investigadores del Centro Médico Universitario de Gotinga, en Alemania, junto con colegas de los Estados Unidos, desarrollaron una alternativa innovadora basada en ingeniería de tejidos.
El equipo, liderado por Wolfram-Hubertus Zimmermann, creó parches musculares implantables capaces de mejorar la función del corazón afectado.
Zimmermann afirmó en diálogo con el diario The Guardian que el objetivo de esta tecnología “no es necesariamente reemplazar los trasplantes de corazón”, sino “ofrecer un tratamiento novedoso a pacientes que actualmente reciben cuidados paliativos y que tienen una mortalidad del 50% en 12 meses”.
La investigación recibió financiamiento del Consejo Europeo de Investigación (ERC) y del Centro Alemán de Enfermedades Cardiovasculares (DZHK).
Cómo funcionan los parches musculares implantables
El desarrollo de estos parches se basa en células madre pluripotentes inducidas (iPSCs), obtenidas a partir de células sanguíneas reprogramadas.
A través de procesos de diferenciación celular, los investigadores lograron transformarlas en células de músculo cardíaco y tejido conectivo. Luego, las incrustaron en un gel de colágeno y las cultivaron en moldes especializados hasta formar estructuras hexagonales. Las pruebas en seres humanos utilizaron una membrana de aproximadamente 5 centímetros por 10 centímetros, donde se fijaron los parches antes de implantarlos en el corazón del paciente.
El enfoque busca solucionar una de las principales limitaciones de las terapias celulares previas: la baja retención de células tras el implante. La inyección directa de células cardíacas en el corazón había demostrado poca eficacia, además de aumentar el riesgo de tumores y arritmias. Los parches, en cambio, permiten administrar una mayor cantidad de células con una integración más eficiente y sin efectos adversos significativos.
Cómo se hicieron los estudios con modelos animales y humanos
Las primeras pruebas se realizaron en macacos Rhesus con insuficiencia cardíaca crónica. A lo largo de seis meses, los parches favorecieron el engrosamiento de la pared del ventrículo izquierdo y mejoraron la capacidad contráctil del corazón. Los investigadores no observaron formación de tumores, arritmias, ni enfermedades asociadas al implante en los animales.
El equipo también aplicó el tratamiento en una paciente de 46 años con insuficiencia cardíaca avanzada. Los parches fueron fabricados con células de un donante y suturados sobre su corazón mediante una cirugía mínimamente invasiva.
Tres meses después, la paciente recibió un trasplante cardíaco, lo que permitió analizar su órgano original. Hasta la fecha, 15 pacientes han recibido estos implantes como parte de la intervención aún en desarrollo.
Los parches de células madre podrían representar una opción complementaria para algunos pacientes. Sin embargo, su efectividad no es inmediata. Zimmermann advirtió que “toma entre tres y seis meses para producir efectos terapéuticos”, lo que los hace inadecuados para quienes requieren una intervención urgente.
Además, debido al uso de células donadas, los pacientes tratados con esta tecnología deben recibir inmunosupresores.
El equipo de investigadores planea avanzar a un ensayo de fase III, por los buenos resultados obtenidos en seguridad en las etapas previas. También buscan optimizar la producción de los implantes, con la posibilidad de crear versiones “listas para usar” a partir de células donadas.
Sian Harding, profesora del Imperial College London del Reino Unido, no participó en el estudio, pero lo calificó como “revolucionario”, aunque señaló que “todavía se necesita más trabajo, porque las células musculares del parche no maduran completamente y el establecimiento del flujo sanguíneo es lento”.su
Por su parte, Mirta Diez, médica cardióloga y vicepresidenta de la comisión directiva de la Sociedad Argentina de Cardiología, consideró al ser consultada por Infobae que el desarrollo del parche es prometedor. Forma parte de una línea de investigación de terapia celular que lleva dos décadas de estudios.
Pero la doctora Diez, que es también jefa del servicio de insuficiencia cardíaca, hipertensión pulmonar y trasplante cardíaco del Instituto Cardiovascular (ICBA), recomendó esperar los resultados de futuros ensayos con muchos pacientes. Se debería evaluar más la seguridad con respecto al riesgo de que los pacientes con el parche tengan arritmias o tumores.
4 Febrero 2025 Fuente: Radio Caribe/ Noticias/ Salud
Feb
6
En un mundo donde la productividad y el éxito son valorados por encima de todo, la depresión se erige como un enemigo silencioso que afecta a millones de personas en el globo. Esta enfermedad mental, a menudo incomprendida y estigmatizada, no discrimina; puede tocar la puerta de cualquier persona, independientemente de su edad, género o situación socioeconómica.
Feb
5
Según el sitio web del Colegio Americano de Gastroenterología, la náusea es aquel deseo fuerte y desagradable de vomitar, mientras que el vómito es la expulsión violenta por la boca de los contenidos estomacales. Por lo general, el vómito es un mecanismo protector que permite expulsar alguna sustancia nociva que haya sido ingerida, pero también puede generarse por otras causas, incluidas varias enfermedades infecciosas o inflamatorias del organismo.
«Los músculos de la pared abdominal se contraen fuertemente a fin de crear la presión necesaria para vomitar, y a esto se le denomina arcadas. Las arcadas no siempre se presentan con el vómito, sino que pueden estar precedidas o seguidas del mismo. Por su parte, la náusea puede ocurrir sin vómito o antes de éste».
Tales síntomas resultan bastante molestos y hay que tener en cuenta que pueden relacionarse con el consumo de casi cualquier medicamento. En particular, algunos fármacos, como los de la quimioterapia para cáncer y los anestésicos, son especialmente conocidos por provocar náuseas y vómitos. Existe un trastorno conocido como cinetosis o mareo por movimiento que resulta un problema común entre las personas que viajan en automóvil, tren, avión y sobre todo en barco. Además de mareos y sudoraciones frías, este padecimiento suele acompañarse de náuseas y vómitos, los que también son frecuentes durante el embarazo.
No necesariamente las náuseas y los vómitos clasifican como síntomas banales. Estos podrían formar parte del cuadro clínico de enfermedades serias, algunas que requieren tratamiento quirúrgico, entre ellas la apendicitis y la oclusión intestinal. Por tal motivo, siempre conviene una valoración médica, sobre todo cuando a las náuseas y vómitos se asocian, entre otros, síntomas y signos como dolor abdominal o de cabeza severos, boca seca y la presencia de sangre en el vómito.
Desde la Medicina Natural y Tradicional existen recursos a los que puede recurrirse para su control. Acá compartimos dos opciones sencillas, el uso del rizoma del jengibre (Zingiber officinale Roscoe) y la estimulación del punto acupuntural Pericardio 6 (Neiguan).
Jengibre (Zingiber officinale Roscoe)
La Agencia Europea de Medicamentos reconoce el “uso bien establecido” del jengibre para controlar las náuseas y vómitos asociados a la cinetosis, lo que significa que existen datos bibliográficos que aportan pruebas científicas de su eficacia y seguridad. Por otro lado, una descripción general de revisiones sistemáticas y metaanálisis sobre el tratamiento con jengibre de las náuseas y vómitos, publicada el pasado año por autores chinos en International Journal of Food Sciences and Nutrition (DOI: 10.1080/09637486.2023.2284647), concluyó que:
“Los hallazgos (…) respaldan la eficacia del jengibre en el tratamiento de las náuseas y los vómitos inducidos por la quimioterapia en pacientes con cáncer. También reduce la gravedad de las náuseas y los vómitos posoperatorios, disminuyendo la necesidad de antieméticos de rescate. Además, el jengibre es prometedor para aliviar los síntomas de náuseas y vómitos relacionados con el embarazo. La evidencia agrupada sugiere que el jengibre es una opción botánica segura para controlar las náuseas y los vómitos (…)”.
Los autores también agregan que “es importante mejorar la calidad científica de los metanálisis publicados en el futuro”, pero sin dudas el rizoma de esta especie resulta un excelente recurso antiemético. Así lo reconoce la Farmacopea Vegetal Caribeña en su tercera edición, que avala su uso con base en el empleo significativo tradicional documentado en las encuestas TRAMIL, los estudios de toxicidad y la información científica publicada.
Este texto recomienda emplear el rizoma fresco, a razón de 20 gramos en un litro de agua, lo que equivale aproximadamente a dos cucharadas y media de dicho rizoma rallado. La mezcla se hierve por 10 minutos en un recipiente tapado y posteriormente se deja enfriar, se filtra y se bebe una taza (250 mililitros) entre dos y cuatro veces al día.
Se recomienda administrar el jengibre con cuidado en pacientes que padecen de cálculos biliares y en aquellos que consumen anticoagulantes o antiagregantes plaquetarios. A dosis excesivas puede provocar irritación del tracto digestivo y en el caso de embarazadas su uso no debe ser prolongado, siempre bajo criterio médico. Tampoco se recomienda en niños menores de seis años.
Pericardio 6 (Neiguan)
El valor de este punto acupuntural en la prevención y el tratamiento de las náuseas y los vómitos ha sido demostrado en diferentes condiciones, incluyendo el embarazo, el posoperatorio y los tratamientos de quimioterapia. Se han evaluado diferentes métodos de estimulación y generalmente se considera una terapia complementaria en estos casos pero, a partir de las evidencias acumuladas, instituciones líderes en el tratamiento del cáncer en Norteamérica como el Memorial Sloan Kettering Cancer Center, orientan a los pacientes acerca del uso de la acupresión sobre este punto para controlar las náuseas y los vómitos.
La digitopuntura o acupresión es una técnica que consiste en hacer presión sobre determinados puntos del cuerpo, utilizando principalmente los dedos. En caso de que se empleen otros medios de estimulación mecánica, entonces se habla solo de acupresión y no de digitopuntura. Se trata de un método sencillo, que puede enseñarse al enfermo o a sus familiares para aplicarlo como autoayuda. No debe ser usado cuando existen heridas, presencia de signos inflamatorios, pus u otras lesiones de la piel en la zona del punto.
Neiguan o Pericardio 6 (Pc-6), se ubica en el antebrazo y su localización es sencilla. Primero se abre la mano de manera tal que los dedos apunten hacia arriba y la palma le quede de frente, luego coloca los dedos anular, medio e índice justo por debajo del pliegue de la muñeca. Una vez hecho esto se pone el extremo del pulgar debajo del dedo índice, se retiran los otros tres dedos y con el pulgar se ejerce presión sobre el punto. Debe poder sentirse dos tendones grandes entre el pulgar, lugar donde precisamente se ubica Neiguan.
Una vez que se ha localizado bien el punto, se puede relajar la mano y colocarla en una posición cómoda. Entonces se mantiene la presión con el pulgar, realizando movimientos circulares en contra de las manecillas del reloj por entre dos y tres minutos. La estimulación se debe realizar en ambos antebrazos y es posible su aplicación varias veces al día, hasta que los síntomas mejoren.
Estas dos opciones, el rizoma de jengibre y la estimulación de Neiguan, se incluyen actualmente en guías de práctica clínica basadas en evidencias. Por ejemplo, el Instituto Nacional para la Calidad de la Sanidad y de la Asistencia (NICE por sus siglas en inglés) del Reino Unido, publicó en agosto de 2021 su Guía NICE [NG201] de Atención prenatal, donde se plantean dos recomendaciones relacionadas con el jengibre y Neiguan, respectivamente:
1.4.3: Para las mujeres embarazadas con náuseas y vómitos leves o moderados que prefieren una opción no farmacológica, se sugiere que prueben el jengibre.
1.4.6: Para las mujeres embarazadas con náuseas y vómitos de moderados a intensos:
- considerar el uso de hidratación intravenosa, idealmente de forma ambulatoria
- considerar la acupresión como tratamiento complementario.
De esta forma, entre el “entusiasmo no crítico” y el “escepticismo no informado”, diferentes opciones terapéuticas tradicionales van siendo integradas a los tratamientos médicos convencionales sobre la base de evidencias rigurosas. Así, por qué no, se confirma la certeza de que podemos utilizar recursos como estos para cuidar nuestra salud… ¡desde lo natural!
4 Febrero 2025 Fuente: Cubadebate/ Noticias/ Salud desde lo natural