Feb
19
La alianza permitirá “unir la experiencia cubana con las capacidades productivas novedosas bolivianas en pos de desarrollar productos promisorios en la lucha contra el cáncer” Fotografía: Simon Dawson/PA
Cuba y Bolivia firmaron hoy en La Habana un convenio de colaboración que permitirá a instituciones de energía nuclear de ambas naciones trabajar en conjunto para lograr radiofármacos contra el cáncer u otras afecciones.
El Centro de Isótopos (Centis), perteneciente a la Agencia de Energía Nuclear y Tecnologías de Avanzada (Aenta) de la nación caribeña, y la Agencia Boliviana de Energía Nuclear (ABEN) consolidaron este acuerdo que permitirá elaborar componentes biotecnológicos que no se hacen en Latinoamérica.
René Leyva, director del Centis, señaló a Prensa Latina que, con más de 30 años de experiencia en radiofármacos en la institución, esa alianza permitirá “unir la experiencia cubana con las capacidades productivas novedosas bolivianas en pos de desarrollar productos promisorios en la lucha contra el cáncer”.
Por su parte, la directora general de la ABEN, Hortensia Jiménez, expresó que el convenio con Centis está dado a partir de un concepto de complementariedad científica y tecnológica, el cual pretende también acercar a los profesionales bolivianos al conocimiento generado por Cuba en cuanto a radiofarmacia, radioisótopos y la aplicación de la energía nuclear en salud.
“Cuba es un ejemplo de lucha, de soberanía científica para todos los latinoamericanos y para nosotros es muy emocionante ver cómo avanzan, a pesar de los obstáculos, en pos del bienestar del pueblo; encontramos con Centis sinergias para cooperar en la investigación radio farmacéutica, la producción y las áreas clínicas, preclínicas para teranósticos”.
En medicina nuclear, teranóstico se refiere al uso de moléculas específicas (péptidos, agonistas, antagonistas, aminoácidos, análogos) que marcadas con un radionúclido específico permiten hacer diagnóstico y tratamiento de una enfermedad.
Jiménez resaltó, además, que Centis tiene un gran desarrollo en cuanto a la biotecnología y Bolivia ya cuenta con las capacidades para producir radioisótopos de alta energía y ‘ahí tenemos trabajo conjunto para elaborar componentes que no se hacen en Latinoamérica’.
“Hemos estado trabajando en grandes proyectos en el sector nuclear: uno en la red de centros de energía nuclear y radio terapia para el cáncer y otras patologías; el centro de investigación nuclear donde pusimos en funcionamiento y operaciones el ciclotrón para la radiofarmacia preclínica, además de un centro de irradiación gamma para la parte agrícola y estamos aún en la construcción del reactor de investigación nuclear”, detalló la experta boliviana.
El Complejo Ciclotrón, instalado en la ciudad de El Alto, ubicada a más de cuatro mil metros sobre el nivel del mar, inició la producción de radiofármacos en 2023 para el diagnóstico altamente especializado del cáncer y patologías neurológicas y cardiológicas.
Con toda esta capacidad, aseveró Jiménez, los tres centros poseen la parte diagnóstica para el cáncer, aceleradores lineales, braquiterapia que permiten que los pacientes puedan de forma gratuita accedan a esa tecnología, a partir del sistema único de salud implementado en Bolivia y también hemos dejado de importar radiofármacos para pasar a producirlos en el país.
Resaltó que Bolivia ha incorporado la tecnología nuclear como una herramienta de desarrollo para la nación. La víspera, la embajadora de Cuba en Bolivia, Elba Rosa Pérez, dijo en exclusiva a Prensa Latina que la salud de ambos países se beneficiará con la firma de un Convenio de Cooperación Interinstitucional entre dichas instituciones.
17 Febrero 2025 Fuente: Cubadebate/ Noticias/ Salud
Feb
18
Desde hace casi 17 años la familia de Miguel Ángel Martínez Manzano conoce del esmero y dedicación de los profesionales que en el servicio de Oncohematología, del Hospital Pediátrico Provincial Mártires de Las Tunas logran lo extraordinario ante la calidad de vida de la población infanto-juvenil.
El agradecimiento se erige cada jornada para el personal de la Salud Pública que estabiliza hemodinámicamente a su hijo quien a los tres meses de nacido le detectaron una anemia hemolítica, tras varios estudios específicos.
«Cada vez que hemos estado en este servicio, que es muy frecuente, existe una atención muy buena desde el trato del personal de enfermería hasta los médicos dentro o fuera de la sala, ellos se preocupan por mejorar y mantener estable a mi hijo», comenta su mamá Adaimis Martínez Manzano.
Esta maestra de primera infancia sabe del cuidado y la protección a tener con su jovencito pues padece de microesferocitosis, mientras insiste junto a la familia en el desarrollo de Miguel Ángel, quien vive además con su abuelita en el barrio Indaya, en el municipio cabecera.
«Su enfermedad se comporta bastante estable, hasta hace dos años antes que hubo que transfundir, pero normalmente facilitamos su cuidado evitando siempre los sangrados, acotó esta tunera.
Oncohematología: a favor de los pacientes infanto-juveniles
En Cuba el cáncer que se presenta en población infanto-juvenil constituye un problema de salud con alta prioridad que dispone de un Programa Integral para el Control del Cáncer.
Para Sistema de Salud Pública en Las Tunas el servicio de Oncohematología, del Hospital Pediátrico Provincial Mártires de Las Tunas, resultó uno de los más destacados durante el 2024 entre las prestaciones sanitarias de las instituciones de la Atención Secundaria en la provincia.
Al frente de este servicio la especialista en primer grado de Hematología, Yicenia Díaz Cabrera, detalló que «la provincia tiene un alto índice de enfermedades oncológicas y hematológicas en edad pediátrica y principalmente en el año anterior incidieron los tumores cerebrales así como las enfermedades oncológicas por ejemplo el osteosarcoma.
«En el caso del comportamiento hematológico fue un poco menor el índice pues en el servicio se detectaron tres pacientes con leucemia, remitidos a los centros de referencia».
Subrayó Díaz Cabrera que «junto a especialistas en Pediatría se logra la vigilancia de quienes ingresan en las salas de miscelánea y luego de varios estudios se diagnostican, se acogen en el servicio y posteriormente se trasladan hacia las instituciones establecidas, lo cual posibilita mayores probabilidades de supervivencia.
«También reciben el manejo asistencial quienes en algún proceso de su enfermedad tienen alguna descompensación y se ingresan para asegurar los cuidados necesarios y su evolución ante su traslado o el retorno al hogar».
Apuntó la galena que «aparte del diagnóstico y los medios para la conducta terapéutica el territorio tiene un amplio número de pacientes que oscilan con seguimiento por este servicio, otros por sus patologías van en seguimiento a centros de referencia en Holguín y Camagüey, o se remiten a las instituciones de La Habana.
«Indistintamente de su patología de base los pacientes se ingresan independiente de la causa por la que acuda, ya sea algún proceso infeccioso, una neumonía o los procesos de enfermedad de piel, como una piodermitis, entre otros».
Apuntes de la Oncología Pediátrica…
En la década de 1960 en Cuba inició la centralización gradual de la atención oncológica pediátrica en los centros especializados, inspirados en modelos de países de Europa y Norteamérica, que demostraron que este enfoque de concentración de materiales y de recursos humanos especializados en las prácticas asistenciales mejoraba la supervivencia de esta población.
Actualmente según datos de la Organización Panamericana de la Salud el cáncer es una de las principales causas de mortalidad entre niños y adolescentes en el mundo, con el diagnóstico de unos 274 mil afectados de entre 0 y 19 años.
El cáncer infantil comprende numerosos tipos de tumores, constituyendo los más comunes la leucemia, el cáncer cerebral, el linfoma y los tumores sólidos como el neuroblastoma y el tumor de Wilms.
Desde el 2001 se conmemora el Día Internacional de la lucha contra el Cáncer Infantil, una fecha que distingue la trascendencia del diagnóstico temprano y el acceso al tratamiento, y que en el 2025 la iniciativa mundial se enfoca en seis tipos: Leucemia linfoblástica aguda, Linfoma de Hodgkin, Retinoblastoma, Tumor de Wilms, Linfoma de Burkitt y Glioma de bajo grado.
Este año se celebra el día bajo el lema «Inspirando Acción por un Acceso Equitativo a la Atención para Todos los Niños con Cáncer».
15 Febrero 2025 Fuente: Tiempo 21/ Noticias/ Salud
Feb
6
El diagnóstico de cáncer suele ser uno de esos momentos que se convierten en un punto de inflexión en la vida de las personas; todo su mundo cambia, se desmorona y tanto los enfermos como sus familiares comienzan una ardua batalla contra una de las enfermedades más temidas. El cáncer, más que un simple juicio médico, es un asunto profundamente personal.
Detrás de cada paciente oncológico hay historias de dolor, sufrimiento, sanación, resiliencia y mucho amor. Sentimientos compartidos por todos los que rodean al enfermo, desde los más allegados hasta el personal médico encargado de los tratamientos, pues para ser oncólogo hay que ser extremadamente sensible.
Desde hace varias décadas el cáncer se ha convertido en una de las principales causas de muerte a nivel global, además de ser una de las enfermedades que más años de vida potencialmente perdidos generan. Cuba comparte esas estadísticas con el resto del mundo, algo que también ocurre en Sancti Spíritus. Nuestra provincia es una de las que mayores tasas de incidencia registran al año, con la detección de aproximadamente 2 000 casos en un período de 12 meses, y alrededor de la mitad lamentablemente fallecen.
Conscientes de ello, los especialistas del servicio de Oncología del Hospital General Provincial Camilo Cienfuegos ejercen su papel de médicos y amigos de forma abnegada. Cada día llegan a la sala con una sonrisa y una mano amiga lista para acariciar a sus pacientes, para darles las palabras de aliento que necesitan en esos momentos tan duros, además de acompañarlos en todos los procesos del tratamiento.
El especialista en Oncología tiene matices emocionales que son diferentes a los demás colegas de profesión; nunca es superior, más duro o triste como muchos aseveran, pero sí más especial. Ellos no tienen horario libre, pues, más allá de terminar el trabajo y quitarse su bata, se mantienen en contacto, siempre disponibles a las visitas a sus hogares, las llamadas en la madrugada y el teléfono constantemente encendido, además de los recurrentes pensamientos dedicados a quienes sufren en carne propia los estragos del cáncer.
Lo más duro para estos especialistas es ver que sus pacientes no evolucionan hacia la mejoría, el sufrimiento familiar y la impotencia de no tener disponibles todos los recursos para sus tratamientos. Esos días en que pierden a un enfermo la desesperación se apodera de ellos internamente y no pueden evitar llenar de lágrimas sus ojos.
Pero también llevan con ellos la satisfacción de que muchos superan esta batalla, que se recuperan y vuelven a su vida habitual profundamente agradecidos de las atenciones que los llevaron a ese momento y suelen volver a la sala donde una vez padecieron para agradecer.
El cáncer no discrimina edad o sexo, puede llegar en cualquier momento, sin esperarlo y comenzar a causar estragos. Como pacientes oncológicos saben de primera mano lo delgada que es la línea entre la vida y la muerte, lo difícil que es el camino que tienen por delante y la inconmensurable cantidad de fuerza que necesitarán parar desandarlo.
Los tratamientos son agotadores, el desconsuelo a veces supera la esperanza, los pronósticos no siempre son los deseados y el miedo suele ser la emoción predominante. Pero las personas que padecen esta enfermedad saben afrontarla con valentía y, luego de reponerse del impacto, del diagnóstico salen a pelear y luchar por la vida; aunque algunos no lleguen al final del camino de la sanación y vuelvan a la normalidad, todos sí se convierten en un ejemplo de superación para otros; una historia puede inspirar, pero muchas pueden cambiar el mundo.
No debe olvidarse que alrededor del cáncer aún se ciernen muchos estigmas y la gente lo cree una enfermedad incurable, cuando en materia de cáncer se ha avanzado mucho a nivel global. Hay patologías que se pueden curar, otras que pueden mejorar y tienen pronósticos alentadores, pero incluso para los más desfavorables hay cuidados dignos que garantizarán al paciente una mayor calidad de vida.
Por ello es tan importante que las personas se mantengan informadas en materia de cáncer, no pensar que es algo ajeno, pues puede afectar a cualquiera de nosotros cuando menos lo esperamos. Mantenernos informados con respecto a ese tema, llevar un nivel de vida lo más saludable posible, además de realizar chequeos médicos periódicos, pues un diagnóstico temprano puede marcar la diferencia en estos padecimientos. Así como mostrar empatía y solidaridad con los afectados y sus familiares, entender el momento que atraviesan y siempre tender una mano amiga que acompañe.
Así que unidos por lo único comienza la lucha contra el cáncer este año, no solo conscientes de los peligros que supone y las posibilidades de tratamiento. Esta vez enfocados en eso único que es el paciente, pues cada experiencia así lo es, y esa batalla nos necesitará a todos juntos para crear un mundo en el que miremos más allá de la enfermedad y veamos al verdadero protagonista.
4 Febrero 2025 Fuente: Escambray/ Noticias/ Salud