May
20
En cualquier casa de Cuba era fácil encontrar, hace algún tiempo, un botiquín con pastillas, pomadas, jarabes y hasta curitas, compradas en farmacias físicas, que servían para situaciones de emergencia o ante el reclamo de un vecino.
Hoy esa reserva es casi inexistente (aunque, por suerte, siempre hay excepciones), en tanto adquirir los medicamentos para una enfermedad puntual o tratamientos de por vida se vuelve calvario para muchos e imposibilidad para otros, sobre todo para las personas de la tercera edad.
La salvación no deseada cae en las farmacias virtuales, esas que viven en grupos de redes sociales y en las que conviven productos traídos desde el exterior con otros nacionales desviados (en realidad robados) de las farmacias tradicionales que están a la salida de un hospital o cerca de policlínicos y consultorios.
Por supuesto, el panorama se enreda más si aseguramos que es uno de los negocios más prósperos y a la vez sórdidos, porque se juega con la vida de las personas, que están dispuestas a pagar la mayoría de las veces hasta lo increíble por una medicina que puede salvarlos de la muerte o evitar complicaciones mayores de salud.
Como si lo anterior fuera poco, crecen al amparo y a la vista de los coleros o marcadores de turno en las farmacias físicas el día del mes que entra el carro con las mercancías. Y puedo dar fe de que es tanto o más esperado ese momento como la llegada de productos alimenticios a la bodega.
Lamentable resulta luego ver a abuelitos o adultos que madrugaron quedarse sin esa medicina indicada en un tarjetón, porque se les informa que “no entró completo el pedido” o simplemente se guardó en secreto una parte del propio pedido para alimentar farmacias virtuales o vendedores ambulantes que van murmurando por las calles: “tengo alopurinol, enalapril, duralgina, captopril…”.
El esfuerzo de la industria farmacéutica cubana es titánico para garantizar la mayor parte del cuadro básico de medicamentos. Sin embargo, los mecanismos de distribución siguen agujereados, los precios del mercado negro crecen a la par que el dólar y mi vecina vuelve a tocar a la puerta a pedir un meprobamato que le calme los nervios con una realidad bien dura, pues su botiquín sigue vacío.
May
18
El Heberprot-P, un medicamento desarrollado por Cuba y hoy único de su tipo en el mundo para combatir la úlcera del pie diabético, podría estar en el mercado de Estados Unidos en 2028, anticipó el doctor Lee Weingart.
Weingart, presidente de la compañía biotecnológica estadounidense Discovery Therapeutics Caribe (DTC), con sede en Cleveland (Ohio), confirmó en declaraciones a Prensa Latina en esta capital que tienen la aprobación de la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) para comenzar la fase 3 de esos estudios clínicos.
Hemos podido operar al amparo de una excepción al embargo (bloqueo), que permite proyectos conjuntos de investigación médica en los que participamos nosotros y las organizaciones cubanas, así que hemos utilizado esa disposición para sacar adelante este proyecto”, dijo.
Adelantó que en el estudio participarán alrededor de “180 pacientes en unos 25 centros” del país y “creemos que tardaremos unos 18 meses en realizarlo. Esperamos estar en el mercado con este medicamento aprobado por la FDA a mediados de 2028”.
A una pregunta de la reportera acerca de la población con esta afectación de salud aquí, el doctor Weingart afirmó que “38,4 millones de estadounidenses padecen diabetes, de ellos 1,6 millones cada año desarrollarán una úlcera de pie diabético”.
De esa cifra “160 mil resultarán en una amputación y de ellos 80 mil morirán en los próximos cinco años, así pues, si se sigue el ciclo, cada año 80 mil personas mueren por las complicaciones de una úlcera del pie diabético lo que hace que sea la octava causa de muerte en Estados Unidos y más mortal que ciertos tipos de cáncer”, advirtió.
El experto asistió la víspera a un evento promocionado por la embajada de Cuba en Estados Unidos, en el que se expusieron las posibilidades colaboración bilateral en los sectores de la biomedicina y las investigaciones biotecnológicas.
Las presentaciones en la reunión las realizaron el doctor Mitchell Valdés, director del Centro de Neurociencias de Cuba y miembro de la Academia de Ciencias de la isla, el distinguido profesor Mark M. Rasenick y Weingart.
En el auditorio estaban la congresista demócrata Jan Schakowsky, el doctor Peter Agre, Premio Nobel de Química 2003, entre otras personalidades.
Schakowsky y la congresista Barbara Lee hicieron circular en 2013 una carta entre sus colegas pidiendo al Departamento de Hacienda que emitiera una licencia a un grupo que quería realizar un ensayo clínico de Heberprot-P en Estados Unidos, explicó.
Seis años más tarde la congresista Lee interrogó al comisario de la FDA sobre por qué el Heberprot-P no estaba disponible todavía en el país, “así que siento que estamos haciendo realidad lo que se pensó debió suceder en 2013 y en 2019”, acotó.
DTC, que se dedica a mejorar los resultados de salud de los estadounidenses mediante el desarrollo de terapias regenerativas para enfermedades graves y potencialmente mortales, al hacer el anuncio de la FDA a inicios de mayo expresó que logró un hito importante que refleja el progreso en su programa clínico.
El fármaco cubano, que ayuda a cerrar heridas difíciles de curar en pacientes diabéticos, fue desarrollado hace dos décadas y su uso fue autorizado ya en 26 países.
Otras colaboraciones de investigación médica entre Estados Unidos y Cuba tienen lugar entre el Roswell Park Cancer Institute (RPCI) y el Centro de Inmunología Molecular de Cuba para estudios sobre ese mal.
En 2022, el RPCI se convirtió en el primero en obtener la autorización de la FDA para ensayos clínicos en Estados Unidos con terapia cubana.
17 mayo 2024| Prensa Latina
May
6
En los mercados internacionales donde Heberprot-P® está disponible comercialmente, el medicamento es una opción importante en el arsenal terapéutico para pacientes con úlceras del pie diabético.
El medicamento cubano Heberprot-p recibió la autorización para el desarrollo de un ensayo clínico en EE.UU., dio a conocer el Grupo Empresarial Biocubafarma en su página de Facebook.
Detalló que Discovery Therapeutics Caribe (DTC), una compañía estadounidense especializada en biotecnología, anunció haber logrado un hito significativo que refleja el progreso en su programa de desarrollo clínico.
En el primer trimestre de 2024, DTC presentó una solicitud de un nuevo medicamento en investigación a la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA), la cual incluía un protocolo de Fase III para un ensayo aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo del producto líder de Biocubafarma, el factor de crecimiento epidérmico humano recombinante intralesional para el tratamiento de úlceras complejas, una de las principales complicaciones de la diabetes.
Para el producto mundialmente comercializado como Heberprot-P, la FDA concluyó que DTC puede continuar con su investigación clínica de Fase III.
Si bien el producto rhegf (por su sigla en inglés) está disponible en más de 20 países, esta es la primera vez que se estudiará en pacientes estadounidenses que padecen úlceras del pie diabético (UPD).
El proceso de obtención del Heberprot-p es realizado por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) y se estima que a más de 400 mil pacientes con UPD se les ha administrado este medicamento en el mundo, desde su autorización comercial en junio de 2006.
5 Mayo 2024 Fuente: Radio 26/ Noticias/ Salud