El sistema de salud en la provincia de Holguín desarrolla un grupo de terapias de rehabilitación encaminadas a mejorar la calidad de vida de niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA), uno de los objetivos para facilitar la inclusión social de este grupo vulnerable.

Yanexy Pérez González, jefa del departamento de Ciencia, Tecnología e Innovación en la Universidad de Ciencias Médicas de Holguín, señaló a la ACN que la técnica propone ejercicios dirigidos a corregir disfunciones del lenguaje, ansiedad, caprichos alimentarios y agresividad.

La especialista refirió que la investigación incluye a pacientes entre los tres y los 18 años de edad, intervenidos con terapias de comunicación, lenguaje y equinoterapia en el Hospital Pediátrico Provincial Octavio de la Concepción y de la Pedraja.

Destacó que dentro de los principales objetivos está establecer un protocolo de tratamiento de rehabilitación para infantes con TEA, aplicable desde los primeros años de vida.

Como resultados del programa, que inició en julio del 2024, está el mejoramiento entre un 40 y un 50 por ciento de las áreas afectadas en estos pacientes y la orientación psicológica a la familia, puntualizó Pérez González.

También ha contribuido a la reducción en el uso de medicamentos controlados y la superación de barreras del lenguaje, de acuerdo a las características de cada caso.

El Trastorno del Espectro Autista afecta al uno por ciento de la población mundial y ocasiona deficiencias en la comunicación verbal y no verbal, inflexibilidad en el comportamiento, conductas repetitivas e intereses restringidos.

En Holguín existe una escuela especial que atiende cerca de 200 casos a partir de un programa integral donde participa un equipo multidisciplinario formado por profesionales de la salud y la educación.

13 Junio 2025 Fuente: Tvsantiago/ Noticias/ Salud

La sociedad Cubana de Medicina Física y Rehabilitación es una organización de carácter científico que agrupa a más de 2 000 profesionales de diversos perfiles asociados a la rehabilitación, la terapia física, la defectología, logopedia, foniatría, entre otros.

En consonancia con el principio de accesibilidad de los servicios de salud, nuestros profesionales están en distantes montañas a las que acuden cientos de pacientes, en centros de los diferentes niveles de atención de todos los municipios cubanos, incluido el Hospital de Rehabilitación “Julio Díaz González”, institución de Referencia Nacional en el tratamiento a niños y adultos.

Nuestra disciplina destaca asimismo por la formación de especialistas para Cuba y más de una veintena de países y los resultados en la atención de las discapacidades más complejas son reconocidos en no pocas naciones.

En medio de nuestro intenso bregar cotidiano, donde prima el sacrificio y entrega de los profesionales que se sobreponen a carencias y a dificultades, hemos observado con indignación la actitud ajena a los principios en los que fuimos formados, de un cubano, graduado de Medicina, especialista en Medicina Física y Rehabilitación, que en la actualidad reside en Colombia.

Este antiguo colega ha violado de forma sistemática y pública los principios más elementales del comportamiento de un verdadero profesional de la salud. Desde su perfil en redes sociales digitales ha mentido, coaccionado, amenazado, difamado a médicos y a instituciones cubanas vinculadas al diagnóstico y tratamiento del niño de 10 años de edad que fue trasladado el pasado 12 de marzo a un hospital en el sur de la Florida. Sus reiteradas publicaciones han mantenido como línea la agresividad y la mentira, unidas a la descalificación de quienes, en su momento, fuéramos sus compañeros de profesión.

Nuestra sociedad científica rechaza firmemente dicha actitud y toma distancia de posturas de esa naturaleza ofensiva y vergonzosa. La actitud de este ex profesional de la Salud, aunque nos indigna, no nos sorprende. Entre los meses de agosto y septiembre de 2008 participó en un evento de Neurodesarrollo en Cali, Colombia. A pesar de haber sido invitado y sus gastos asumidos por los organizadores, una vez allí amenazó y coaccionó tanto verbal como físicamente a las organizadoras, a las que exigió una remuneración no acordada por su participación. A ello se sumó la falsificación de un currículum para acreditarse el reconocimiento a una trayectoria que no poseía.

Entre otras mentiras, incluyó cursos de preparación en Corea del Sur, Inglaterra y Estados Unidos, países que jamás visitó y conocimientos que tampoco adquirió. Se trataba de logros de otros profesionales de nuestra sociedad que se adjudicó de forma engañosa y que acreditó con documentos falsos. Su vergonzosa conducta fue denunciada por los organizadores del evento, quienes aportaron las pruebas documentales, así como grabaciones de su actitud y comportamiento. Estas graves violaciones lo llevaron a ser inhabilitado del ejercicio de su profesión en el año 2009.

Los dilemas éticos a los que un médico se enfrenta durante su actuar son disímiles, pero un médico no miente, no manipula, no hiere, no humilla; pone siempre su solidaridad, altruismo, el deseo de vencer la enfermedad y las dificultades que puedan aparecer por encima de todo, por el bien de su paciente, familia y compañeros.

Un médico cubano cuida y protege. Un médico cubano rehabilitador, se solidariza y compromete con el bienestar integral de las personas, sea cual sea su origen, etnia, posición social, su estado y el de su entorno familiar. Un médico cubano, donde quiera que se encuentre, muestra además respeto profundo por otros especialistas.

Nuestra Sociedad Científica repudia la conducta deplorable de este practicante de origen cubano y traslada su preocupación a los verdaderos y reconocidos profesionales de la medicina física y la rehabilitación en ese hermano país, con muchos de los cuales mantenemos excelentes y sistemáticos vínculos. Lazos reforzados con la formación en Cuba de una veintena de colombianos como Especialistas de Rehabilitación, cifra que se eleva a 1029 graduados como médicos y a los 1319 que en este momento estudian la carrera o alguna especialidad.

El gremio que representamos no compartirá jamás la agresión al sistema de salud cubano, ni a la labor que a diario hacemos. Nuestra obra, en medio de enormes carencias, de sacrificios colectivos e individuales, habla por sí sola. El legado de la medicina cubana será siempre más fuerte que viles ataques de anodinos.

Presidencia de la Junta de Gobierno de la Sociedad Cubana de Medicina Física y Rehabilitación

1ro. de abril de 2025

Fuente: Cubadebate/ Noticias/ Salud

En los márgenes de La Habana y casi a la misma distancia entre Artemisa y Mayabeque se encuentra el Hospital Dermatológico Dr. Guillermo Fernández Hernández-Baquero, centro de referencia del Programa Nacional de la Lepra y del tratamiento del pie diabético con Heberprot-P.

La institución es la única en Cuba con un santuario dentro: el dedicado a San Lázaro en El Rincón. En los últimos años, quienes la visitan la encuentran reparada, con mayor limpieza y cultura del detalle.

Carteles alusivos a los héroes de la patria, un césped bien podado, edificios recién pintados o en labores de reparación y cestos y señalizaciones por doquier hacen una experiencia agradable caminar por las calles que conectan los edificios del complejo hospitalario.

“Nos preguntan cómo hemos mejorado en estos años. Nuestra filosofía de trabajo es que, si se quiere resolver un problema, debemos movilizarnos y buscar mecanismos de solución. La pasividad y el acomodamiento conllevan a la mediocridad, que es lo opuesto al desarrollo”, señala el Dr.C. Rolando Montero Díaz, director del hospital.

En el centro son atendidos pacientes de todo el país en las áreas de dermatología, angiología, psiquiatría, psicología, ortopedia, medicina interna, rehabilitación y medicina natural y tradicional.

La instalación cuenta con 190 camas y 271 trabajadores. En sus salas, los pacientes se benefician con un laboratorio clínico y microbiológico, un departamento de rayos X, un área de trabajo social, de esterilización y ergoterapia; así como una farmacia y una biblioteca.

El doctor Montero Díaz explica que, entre las novedades de los últimos años, destaca la creación de nuevas consultas, y la colocación de una estancia para recibir a los pacientes que llegan, aunque no tengan turno, porque la premisa es que nadie se vaya sin recibir atención.

Según comenta, en este hospital especializado se atienden personas de todo el país, y el laboratorio, el servicio de rayos X y la sala de rehabilitación son utilizados tanto los pacientes ingresados como por los pobladores de El Rincón, San Antonio de los Baños o Bejucal, que son quienes más cerca viven.

Por la profesionalidad de los trabajadores, la calidad del servicio y las mejoras en infraestructura y organización logradas en el último quinquenio, el hospital ostenta la condición de Institución Colectivo Moral.

17 junio 2024 Fuente: Cubadebate/ Noticias/ Salud