Sep
23
Según Roig el nombre vulgar en Cuba para Taraxacum officinale es diente de león. Esta planta es de procedencia europea, pero se ha naturalizado y vuelto subespontánea en Cuba. Se le suele considerar una mala hierba, pero independientemente de ello es una de las principales especies de interés apícola a escala global, siendo conocida en todo el mundo por los apicultores ya que su distribución es prácticamente cosmopolita.
Las hojas y flores del diente de león tienen valor culinario ya que se consumen crudas en ensaladas, hervidas o fritas. Las raíces tienen valor como condimento y su polvo seco constituye un sucedáneo del café. Por su parte, las flores contribuyen a dar color y sabor a las ensaladas vegetales, siendo posible utilizarlas para preparar un tipo de mermelada y con ellas se elabora el así también denominado vino del estío o verano, a partir de su fermentación.
Por supuesto, el diente de león sin dudas es una especie que ha sido utilizada para tratar no pocas enfermedades. Las monografías de plantas medicinales de la Organización Mundial de la Salud plantean que toda la planta se utiliza para promover la diuresis, incrementar la secreción biliar, estimular el apetito y tratar la dispepsia, según se describe en farmacopeas y otros documentos bien establecidos.
Tradicionalmente se ha reportado su uso como galactogogo, laxante, tónico, para tratar granos y heridas, diabetes, fiebre, inflamación ocular, insomnio, dolor de garganta, absceso pulmonar, ictericia, reumatismo e infecciones del tracto urinario.
Por otra parte, en su monografía europea de 2021, esta especie se recomienda para aliviar síntomas asociados a trastornos digestivos ligeros tales como sensación de plenitud abdominal, flatulencias y digestión lenta.
Además, se emplea para el alivio temporal de la pérdida de apetito y, al aumentar la cantidad de orina, se utiliza como coadyuvante del tratamiento convencional de problemas urinarios leves. Aquí particularmente se refiere el empleo de la raíz de la planta.
En el caso de las monografías de la Organización Mundial de la Salud, para el uso del diente de león se propone utilizar una cucharada del material vegetal bien troceado o en polvo. Con esto se puede preparar una infusión o decocción utilizando 150 mililitros de agua, lo cual se consume tres veces al día.
Hay que tener en cuenta que con el diente de león se han reportado reacciones alérgicas, incluyendo anafilaxia y dermatitis de contacto pseudoalérgica, así como reactividad cruzada en individuos hipersensibles al polen de otras especies de asteráceas., entre ellas la achicoria y la caléndula.
Su uso está contraindicado en casos de obstrucción del tracto biliar o intestinal, así como de inflamación aguda de la vesícula biliar. En presencia de enfermedades de la vesícula biliar, el diente de león solo podría emplearse bajo la supervisión de un especialista.
Además, la planta puede causar hiperacidez estomacal y disminuir la concentración plasmática de ciprofloxacino. Las mujeres embarazadas o que lactan, así como los niños, no deben hacer uso de esta especie.
De cualquier manera, más allá de sus limitaciones o contraindicaciones, incluso de su fama como maleza, el diente de león resulta una importante planta medicinal, que puede ser de ayuda en presencia de síntomas digestivos leves, falta de apetito o como diurético. De esta forma, se convierte en otra de esas importantes modestas aliadas del hombre para cuidar la salud… ¡desde lo natural!
16 Septiembre 2025 Fuente: Cubadebate/ Noticias/ Desde lo natural
Feb
13
Cuando se publicó a principios de año el primer artículo de esta columna, “Salud desde lo natural”, un lector comentó sobre la importancia del ejercicio físico. Coincidimos totalmente, pero acotamos que más allá de los beneficios que pueden obtenerse de la práctica habitual de cualquier tipo de actividad física bien programada, desde la Medicina Natural y Tradicional se tienen enfoques particulares que cada vez ganan más popularidad por todo el mundo.
De la India procede el yoga, de China nos llegan el taichí y el chi kung, por solo mencionar algunos de los ejemplos mejor conocidos. Para tener idea de la expansión global de estas prácticas, tomemos el caso del yoga. En el sitio web de Rishikesh Yogkulam® , una escuela de formación de profesores de esta práctica en la India, se plantea que si bien en esa nación asiática existen 160 millones de practicantes, en países occidentales como Estados Unidos de América y Canadá las cifras alcanzan los 35 millones y 7.6 millones, respectivamente.
En Cuba el Ministerio de Salud Pública incluye los ejercicios terapéuticos tradicionales dentro de las modalidades reguladas de la Medicina Natural y Tradicional. Acá el yoga incrementa el número de seguidores y desde hace ya más de una década se celebra oficialmente su día internacional. Por todo el archipiélago es cada vez más común ver grupos de practicantes de taichí o chi kung, sobre todo adultos mayores…
El yoga
El yoga es una disciplina tradicional, espiritual, física y mental originada en la India. Es una de las seis doctrinas ortodoxas del hinduismo, que enfatiza la meditación y la liberación, siendo su texto principal, el Yoga sutra (400 d. C.). Tiene varias escuelas, siendo las fundamentales el raya yoga, jñana yoga y karma yoga. Las no fundamentales son el hatha yoga, bhakti, ashtanga vinyasa yoga, kriyā yoga y kundalini yoga.
El sitio web Medline Plus de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos de América, plantea que el yoga es una práctica que conecta el cuerpo, la respiración y la mente a través de posturas físicas, ejercicios de respiración y meditación para mejorar la salud en general. Aunque se desarrolló como una práctica espiritual hace miles de años, hoy en día la mayoría de las personas que en occidente lo practican, lo hacen más como ejercicio o para reducir el estrés.
El yoga puede mejorar el estado físico, la postura y la flexibilidad de las personas. También contribuye a reducir la presión arterial y la frecuencia cardíaca, ayuda a relajarse y a mejorar la autoconfianza, reduce el estrés, mejora la concentración y la calidad del sueño, favorece la coordinación y el equilibrio, ayuda a la digestión y, de manera particular, puede beneficiar a pacientes afectados de trastornos de ansiedad, depresión o dolor de espalda.
Las evidencias generadas a favor del yoga en la atención a pacientes, en fechas más recientes, han permitido la integración del yoga en guías de práctica clínicas. Por ejemplo, las directrices conjuntas sobre terapias integrativas de la Sociedad de Oncología Integrativa y la Sociedad Americana de Oncología Clínica para el manejo de síntomas en pacientes con cáncer plantean que:
- El yoga puede ser recomendado en el tratamiento del dolor articular relacionado con inhibidores de aromatasa en mujeres con cáncer de mama y el hatha yoga en pacientes con dolor después del tratamiento del cáncer de mama o de cabeza y cuello.
- El yoga se recomienda para tratar la ansiedad y la depresión durante y después del tratamiento activo del cáncer.
- Para los supervivientes con fatiga, una vez finalizado el tratamiento, el yoga tiene una recomendación condicional.
El 11 de diciembre de 2014, las Naciones Unidas proclamaron el 21 de junio como el Día Internacional del Yoga y la UNESCO anunció el primero de diciembre de 2016 su inclusión en la Lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
El taichí
El taichí, taichi o taichí chuan significa literalmente ‘supremo puño definitivo’ o ‘sublime último puño’. Es un arte marcial desarrollado en China, pero en la actualidad se le considera cada vez más como una práctica físico-espiritual para mejorar la salud y la calidad de vida.
Su principio fundamental es la suavidad. Los movimientos que se ejecutan deben seguir un modo natural, relajado, suelto y fluido, sin necesidad de realizar ejercicios de fuerza, rapidez o endurecimiento, aunque algunos de sus estilos pueden ser más rápidos, en especial cuando se practican las formas con armas.
El sitio web de Harvard Health Publishing, la división de información de salud del consumidor de la Facultad de Medicina de Harvard, señala los siguientes beneficios asociados a la práctica del taichí:
- Fuerza muscular: Puede mejorar tanto la fuerza de la parte inferior como la de la parte superior del cuerpo. Cuando se practica con regularidad, el taichí puede ser comparable al entrenamiento de resistencia o a caminar a paso ligero.
- Flexibilidad: Puede aumentar la flexibilidad de la parte superior e inferior del cuerpo.
- Balance: Puede mejorar el equilibrio y, según algunos estudios, reduce las caídas.
- Acondicionamiento aeróbico: Dependiendo de la velocidad y el tamaño de los movimientos, el taichí puede proporcionar algunos beneficios aeróbicos.
A lo anterior, se agregan los efectos de la práctica del taichí sobre la salud mental y la calidad de vida. De forma general se sabe que al practicarlo, se disminuyen el estrés, la ansiedad y la depresión. Según un estudio bibliométrico publicado en 2021, otras áreas donde puede utilizarse este tipo de ejercicios, desde la prevención y la rehabilitación, son las enfermedades cardiorrespiratorias, los accidentes cerebrovasculares y el Parkinson.
El 17 de diciembre de 2020 la UNESCO incluyó la práctica del taichí en el listado de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
El chi kung
El chi kung es un sistema de posturas, movimientos corporales coordinados, respiración y meditación que se considera útil para la salud, la espiritualidad y el entrenamiento en artes marciales. Literalmente significa ‘trabajo de la energía vital’ y sus raíces provienen de la medicina, la filosofía y las artes marciales chinas. En muchos países asiáticos es considerado tradicionalmente como una práctica para cultivar y equilibrar el organismo.
Existen muchos sistemas diferentes de chi kung. Este puede practicarse con el cuerpo estático o en movimiento, así como involucrar patrones prefijados o no. Varias formas del chi kung tradicional en China están relacionadas con la salud, las corrientes espirituales de ese país (taoísmo, confucianismo y budismo) y las artes marciales.
El chi kung para la salud se basa en los principios de la medicina tradicional china. Su práctica suele implicar meditación en movimiento, coordinación de movimientos lentos, respiración rítmica profunda y un estado mental de introspección tranquila. Actualmente el chi kung se practica con fines recreativos, preventivos, de ejercicio, para relajación y meditación, como herramienta para el autocuidado y en el entrenamiento para artes marciales, entre otros.
En el sitio web del Centro Nacional de Salud Complementaria e Integrativa (NCCIH, por sus siglas en inglés), se plantean los beneficios del chi kung desde la perspectiva de las evidencias científicas publicadas. Algunas áreas de impacto son:
- Cuidados paliativos del cáncer: Una revisión de 2017 que incluyó 22 estudios de 1751 personas con diversos cánceres, encontró que el uso de chi kung es prometedor para controlar los síntomas físicos y psicológicos relacionados con esta enfermedad y su tratamiento.
- Enfermedad de Parkinson: La evidencia acumulada hasta ahora sugiere que el chi kung ayuda a mejorar el movimiento, la capacidad para caminar y el equilibrio en personas con enfermedad de Parkinson, más en adultos jóvenes que en mayores. La cantidad de mejora observada en el movimiento y la capacidad para caminar es similar en comparación con otras formas de ejercicio, pero en el caso del equilibrio los beneficios del chi kung parecen ser mayores.
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica: Un pequeño número de investigaciones sugiere que el uso de chi kung como terapia complementaria puede ayudar con la depresión, la ansiedad y las funciones pulmonar y física en estos pacientes.
- Fibromialgia: La práctica frecuente y constante de chi kung puede ser útil para las personas con esta enfermedad en el manejo del dolor, el sueño y la función física y mental, aunque la investigación en este campo es escasa.
- Prevención de caídas en adultos mayores: Una estudio de revisiones publicado en 2019 encontró evidencia suficiente para respaldar el chi kung en el entrenamiento del equilibrio y la prevención de caídas. Al compararlo con intervenciones más convencionales sus efectos pueden ser similares y hasta a veces mejores.
El último sábado del mes de abril, desde el año 1999, se celebra el Día Mundial de Taichí y el Chi Kung. De tal forma, se consolida la práctica de estos ejercicios fuera de la Gran Muralla, los que sin dudas nos ayudan a mantener la mente y el cuerpo con salud… ¡Desde lo natural!
11 Febrero 2025 Fuente: Cubadebate/ Salud/ Desde lo natural
Abr
29
Cheylan Pérez Acosta es una joven doctora de carácter serio, pero al sonreír brota de su rostro la imagen alegre, de satisfacción por su obra social, pues mediante su especialidad, Medicina Natural y Tradicional (MNT), beneficia a quienes acuden a su consulta en busca de alivio para sus dolencias.
Se le halla en el policlínico José Luis Dubrocq (calle Contreras), aledaño al Parque de la Libertad, luego de hacer la residencia en MNT en el Hospital Clínico-Quirúrgico Docente Dr. Faustino Pérez Hernández, ambas instituciones en la ciudad de Matanzas.
A su arribo a la consulta la esperan quienes depositan en ella toda confianza; por lo que, desde el amable intercambio de saludos hasta que se sientan, no desaparece de sus labios la sonrisa que Cheylan aprecia.
Otros, vistos con anterioridad, en su mayoría pacientes de avanzada edad, con dificultades físicas internas y externas –por razones neurológicas, en extremidades u otras partes del cuerpo, etc.—, la escuchan atentos luego de que la especialista recibiera información sobre cómo se encuentran, tras cumplir un proceso de indicaciones médicas y el paso de determinado tiempo desde la anterior visita a la actual.
Sobre sus pies, o sentados en sillones de ruedas, pasan y reciben las nuevas indicaciones. Transcurridas unas horas, todo vuelve a la normalidad. Ella, con lógico agotamiento, no se marcha, espera la llegada de alguien que, por diversos motivos, arriba al filo del mediodía, porque lo esencial es atenderlos. Que no regresen a casa desmotivados y, sobre todo, sin atención médica especializada, es también una dosis vital para cada ser humano.
Convencidos, doctora y redactor, de que se agotó el caudal de llegadas, dialogamos en el espacio donde radica.
“La idea de estudiar Medicina siempre estuvo presente en mí, aunque de niña experimenté en otras ramas alejadas de la ciencia, como la música, baile y hasta deporte. Tomé la decisión definitiva al finalizar el último año del preuniversitario e ingresé en la Facultad de Ciencia Médicas por espacio de seis años, que resultaron difíciles, de extremo sacrificio y que, gracias a mi familia, logré graduarme en el 2018.
“Aunque inicialmente tuve inclinación por la Medicina Física y la Rehabilitación, ese año no se me dio la oportunidad, y fue entonces cuando derivé hacia la MNT.
Se interrumpe el intercambio por la llegada de una paciente a la que el transporte no le permitió hacerlo antes. Concluida la atención, reanudamos el diálogo.
“La MNT es una especialidad que persigue como objetivo fundamental lograr un equilibrio en el paciente, y así atender su patología e incluso enfermedades crónicas. Esto lo hacemos generalmente al vincular lo emocional con lo orgánico.
“Los médicos tradicionalistas, si bien somos capaces de tratar cualquier enfermedad, no lo hacemos enfocándonos en ellas, sino en el paciente que, con un buen interrogatorio, se llega a la esencia de su problema.
“Muchas veces las personas, por desconocimiento, acuden a la consulta pensando en que solo será para que les indiquen ‘cocimientos o infusiones’, debido a que la parte de las plantas es la que más asocian a nuestro ejercicio profesional.
“Otros acuden a nosotros para que les situemos las ‘semillitas en la oreja’, es decir, aplicar la auriculoterapia, nombre del tratamiento basado en el hecho de que el oído es un microsistema que refleja todo el cuerpo, representado en la aurícula, la parte externa de dicho lugar. En él se asume que las condiciones que afectan la salud física, mental o emocional del paciente son tratables mediante estimulación de la superficie de la oreja.
“Las personas se nos acercan sin saber cómo funciona esta terapia y, al conocerla, acuden de forma regular para el tratamiento de cualquier padecimiento”.
Aporta un nuevo elemento, es el que se refiere a principios básicos de la MNT. “Lo fundamental es no dañar a nadie. Es verdad que poseemos técnicas más invasivas como acupuntura, farmacupuntura y ozonoterapia, pero considero que el buen trato y hablar con el paciente calma su angustia por su enfermedad al hacer menos incómodo el proceder”.
No menos interesante resultó el tema siguiente. “Debido al bloqueo económico que nos impone Estados Unidos, existen carencias de insumos, y no estamos ajenos a esa realidad. Hay dificultades con las agujas de acupuntura, jeringuillas y medicamentos, pero esto no se traduce en dejar de atender al paciente. Contamos con variedad de tratamientos como la citada auriculoterapia y la homeopatía, además de los fitofármacos (plantas medicinales).
“Cierto es que mayormente atendemos a pacientes con dolores, pero en los últimos tiempos, según experiencia personal y debido a la emigración, nos visitan personas afectadas emocionalmente, sobre todo ancianos y niños con diversos trastornos.
“Con ellos aplicamos la terapia floral, cuyo campo de acción se circunscribe a las características psicoemocionales de los pacientes. Es capaz de actuar en enfermedades psíquicas y orgánicas”.
La MNT es diversa, con importantes aportes a la medicina en Cuba y demás países, pero también fascinante. Estudiarla es “adentrarse en un mundo maravilloso de soluciones inmediatas”, máxime con la cada vez más creciente crisis económica mundial.
“No hacemos magia, sino ciencia, y es importante que así se reconozca”, enfatiza la doctora.
Su rostro se ilumina y concluye: “La especialidad de MNT fue sin dudas mi mejor opción. Me siento orgullosa de ser parte de ella y de lo logrado hasta ahora. Los pacientes siempre me tendrán”.
28 abril 2024 Fuente: Girón/ Noticia/ Salud
