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La V Convención Internacional Cuba-Salud 2025 destacó en su tercera jornada los avances y futuros proyectos en la colaboración bilateral en salud, biotecnología y formación académica entre Cuba y China.
El ministro de Salud Pública de Cuba, Dr. en Ciencias José Angel Portal Miranda, resaltó la importancia de China como socio estratégico en el desarrollo sanitario de la nación y en la promoción de un modelo de cooperación Sur-Sur en salud.
Durante su intervención en el Foro de Cooperación China-Cuba, el titular cubano subrayó los logros históricos y las nuevas oportunidades de colaboración en áreas como biotecnología, atención primaria y respuesta a emergencias.
Una alianza basada en la solidaridad y la ciencia
Portal Miranda recordó que los vínculos entre ambos países se remontan a 2006, cuando, por iniciativa del líder histórico Fidel Castro, se estableció un programa de colaboración médica que incluyó la construcción de hospitales oftalmológicos en China, atendidos por profesionales cubanos. “A China y a Cuba nos une la convicción de que la salud no puede ser un privilegio de unos pocos, sino un derecho de todos”, afirmó.
Además, destacó que, durante la pandemia de covid-19, ambos países reforzaron su apoyo mutuo con el intercambio de insumos y conocimientos. “Nos solidarizamos y desarrollamos diversas acciones de cooperación que salvaron vidas”, señaló.
La realización de este Foro científico hace realidad uno de los acuerdos adoptados en noviembre del pasado año, durante la visita del doctor Lei Haichao, ministro de la Comisión Nacional de Salud de China, cuando nos propusimos, entre otras acciones, incrementar los intercambios científicos y académicos; avanzar en el desarrollo de proyectos de investigación conjuntos, así como fortalecer la colaboración en el sector médico farmacéutico, apuntó Portal Miranda.
“Esa visita, así como la firma del Plan de acción para el periodo 2024-2026 en el campo de la Salud, se abren nuevas oportunidades para la colaboración en nuestro sector”, refirió.
Entre los avances más recientes, el ministro cubano mencionó la adopción de cinco contratos para servicios médicos cubanos en China, incluyendo la construcción del Hospital Internacional de la Amistad China-Cuba en la Universidad de Hebei.
Asimismo, un centro Internacional de Estomatología en desarrollo, como parte del Proyecto Parque Industrial China-Latinoamérica (PICLA), y 15 agencias chinas vinculadas al turismo de salud en Cuba, con contratos firmados para servicios médicos especializados.
“China representa un aliado estratégico para el intercambio científico-técnico en las áreas de la Salud Pública, la atención de Salud y la tecnología médica, aseguró Portal Miranda, resaltando la importación de medicamentos y equipos médicos desde el gigante asiático.
“La visión que compartimos de hacer de la ciencia una herramienta para el bienestar de los pueblos, nos ha permitido a través de los años recorrer importantes caminos juntos, como parte de lo cual ha sido clave el funcionamiento de la Comisión Intergubernamental Cuba-China para las relaciones económicas, comerciales, financieras, de cooperación y científico-técnicas, convertida en un instrumento clave para identificar prioridades, concretar proyectos conjuntos y ampliar los marcos de colaboración”, señaló el ministro.
Recordó que en el más reciente de esos encuentros, que sesionó en octubre de 2023 en la ciudad china de Pekín, presidido por el viceprimer ministro cubano Ricardo Cabrisas Ruiz, se destacó el papel determinante que tiene esa Comisión para potenciar la participación efectiva de China en el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social 2030, así como para el impulso y fortalecimiento de la cooperación en todos los ámbitos.
“Es alto el reconocimiento que manifiesta la población china que se ha beneficiado con ellos, tanto en la actualidad como en momentos anteriores, sobre todo en los hospitales oftalmológicos construidos por Cuba en China que forman parte de un amplio Programa oftalmológico diseñado y promovido por Fidel, que contribuyó a la presencia de médicos cubanos en la República Popular China, y que en la actualidad continúa activo”, apuntó.
Educación e innovación: Pilares de la colaboración futura
El titular de Salud enfatizó el potencial de crear una Red Binacional Académica entre universidades médicas de ambos países, así como el impulso a la medicina tradicional y la cirugía mínimamente invasiva.
“Hemos graduado a 666 profesionales chinos en nuestras universidades, y ahora buscamos ampliar los intercambios”, dijo. Recientemente, se firmaron acuerdos con instituciones como la Universidad de Medicina Tradicional China de Henan para impulsar la investigación conjunta.
Durante el evento, China fue designada Invitado de Honor de la XVI Feria Comercial “Salud para Todos”, lo que refuerza su papel como socio comercial en el sector biofarmacéutico. Más de 20 empresas chinas participan en la feria, mostrando equipos y tecnologías para el sistema sanitario cubano.
El ministro Portal Miranda cerró su intervención con un mensaje de gratitud hacia China y un llamado a “seguir construyendo un modelo de cooperación que sea ejemplo para el mundo”. La alianza entre ambas naciones, basada en solidaridad y desarrollo científico, sigue siendo un pilar para la salud global, sostuvo.
“Reiteramos nuestro compromiso con estos propósitos y nuestra disposición para seguir fortaleciendo esta cooperación”, concluyó.
Wang Kai, director general del Instituto Nacional de Gestión Hospitalaria de China, destacó el papel clave de los farmacéuticos clínicos en la optimización de los servicios médicos. “El gobierno chino prioriza la gestión farmacéutica para garantizar la seguridad en el uso de medicamentos”, afirmó.
El rol del farmacéutico clínico es esencial para la optimización de costes, selecciones de medicamentos costo efectivos, evitar terapias redundantes o de alto costo sin beneficios. “También en la prescripción, como un puente en educación al paciente”, dijo.
Explicó que China ha implementado sistemas integrales para la revisión de recetas, el uso racional de fármacos y el control de calidad. Además, mencionó que desde 2023 se ejecuta un plan de acción para mejorar la calidad médica, fomentando la seguridad y perfeccionando los mecanismos de gestión.
Por su parte, Wang Yi, investigadora del Hospital de la Facultad de Medicina de la Unión de Pekín, expuso sobre la estandarización de registros médicos en China. Detalló que el país utiliza sistemas de codificación unificados para garantizar la interoperabilidad de datos en más de 10 000 hospitales.
Subrayó que se han establecido protocolos estrictos para la recolección y validación de información clínica, dividida en cuatro categorías: datos del paciente, hospitalización, diagnóstico y costos. “La capacitación masiva a profesionales ha sido clave para lograr una vigilancia efectiva”, añadió.
La doctora Ileana Morales Suárez, directora de Ciencia e Innovación Tecnológica del Minsap, enfatizó que Cuba concibe la calidad como un “componente estratégico vinculado a la ciencia”. “No puede haber excelencia sin sistemas de valores que prioricen la seguridad del paciente”, señaló.
Destacó que la nación caribeña cuenta con un programa nacional de calidad, respaldado por manuales de acreditación para hospitales, clínicas estomatológicas y atención primaria. “La innovación y la tercerización de servicios especializados son vitales para sostenibilidad”, afirmó, e invitó al lanzamiento de un libro sobre el modelo cubano este viernes en La Habana.
Li Xiaoming, consultor de la Administración China para el Control de Enfermedades, compartió la experiencia de su país en el manejo de un brote reciente de viruela símica (Mpox). Relató cómo se activaron protocolos de identificación rápida, rastreo de contactos estratificados por riesgo y desinfección de áreas críticas. “La coordinación multinivel y la comunicación transparente fueron decisivas”, resaltó.
Precisó que China ha reforzado su sistema de prevención con 15 centros regionales de salud pública y 3 380 equipos de respuesta rápida, logrando un 15% más de profesionales capacitados desde 2019.
Los expertos coincidieron en que la colaboración bilateral en formación, tecnología y gestión de riesgos es esencial para enfrentar desafíos globales como el cambio climático y las pandemias. Morales Suárez apuntó: “La excelencia ya no es un lujo, sino un requisito mínimo para sistemas de salud resilientes”.
El foro hizo también un llamado a profundizar el intercambio en áreas como inteligencia artificial aplicada a la farmacología y la vigilancia epidemiológica integrada.
El doctor Francisco Alberto Durán García, director nacional de Epidemiología del Minsap, resumió la estrategia cubana contra la pandemia: “Implementamos un modelo de gestión integral con tres pilares: capacidad diagnóstica, producción nacional de medicamentos y vacunación masiva con fórmulas propias”.
Detalló que en 2020 se desplegaron laboratorios de biología molecular en todos los municipios y un sistema de información diario para monitorear casos, fallecidos y complicaciones. “La intersectorialidad fue clave: todas las autoridades, encabezadas por el presidente Díaz-Canel y el general Raúl Castro, participaban en reuniones diarias para tomar decisiones”, destacó.
Sobre el impacto de las vacunas Abdala y Soberana, mostró datos contundentes: “La curva de contagios y muertes en 2021 cayó en paralelo al avance de la inmunización. Logramos cobertura masiva gracias al sistema primario de salud y otros organismos”. Cuba registró 8 517 fallecidos acumulados, con picos críticos durante la introducción de variantes más virulentas antes de la vacunación.
Cai Wenjia, profesora del Departamento de Ciencias del Sistema Terrestre en la Universidad de Tsinghua, alertó que los eventos climáticos extremos en China son ahora hasta 3.6 veces más frecuentes que hace cuatro décadas. “Las olas de calor, incendios forestales y sequías ya generan costos sanitarios históricos”, advirtió.
Presentó el Plan Nacional de Adaptación en Salud 2024-2030, que incluye un sistema de alertas tempranas para enfermedades vinculadas al clima (como dengue o encefalitis); 1 904 millones de personas cubiertas por monitoreo de riesgos por temperatura; transición energética, pues en 2023, por primera vez, la capacidad de energías renovables superó a la del carbón.
Destacó casos como Tianjin, donde un sistema de alertas por olas de frío evitó 4 millones USD en gastos sanitarios en dos años. “La neutralidad de carbono para 2060 no solo es ambiental: salva vidas, especialmente de grupos vulnerables”, concluyó.
Ambos países enfatizaron la colaboración intersectorial y el enfoque preventivo como claves ante crisis sanitarias, ya sean pandemias o emergencias climáticas. La soberanía científica y la participación social marcan la diferencia, coincidieron los expertos.
Al cierre del intercambio el embajador de China en Cuba, Hua Xin, resaltó los avances y el futuro de la colaboración médica entre ambos países.
El diplomático subrayó que “los gobiernos de China y Cuba consideran la protección de la salud de sus pueblos como una misión fundamental”. Destacó los logros conjuntos en la construcción de sistemas de salud sólidos, el desarrollo de tecnologías médicas avanzadas y la mejora continua de los servicios sanitarios.
“Cuba ha demostrado liderazgo en la formación de talentos médicos, la investigación en biomedicina y sus contribuciones a la salud global”, afirmó el embajador, reconociendo el papel de la isla en la cooperación médica internacional.
En el contexto del 65° aniversario de relaciones diplomáticas entre ambos países, en 2025, Hua Xin reiteró el compromiso de su gobierno para profundizar la cooperación en salud con resultados “concretos y prácticos”.
Por ejemplo, el impulsar proyectos en biotecnología, respuesta a pandemias y capacitación médica. “Escribir un nuevo capítulo en nuestra amistad”, dijo.
El embajador señaló que ambos países tienen “una oportunidad histórica” para consolidar el modelo de cooperación Sur-Sur entre China y Cuba, enfatizando que esta alianza “contribuye al destino común de la humanidad”.
“Haití continúa facilitando el acceso a los servicios de salud a pesar de los desafíos críticos que enfrenta. Agradecemos el apoyo de otros países, y hacemos mención especial a las brigadas médicas cubanas y la contribución histórica de Cuba en la esfera de la salud”, agregó.
Sinal afirmó que el sistema de salud cubano representa un modelo de referencia en acceso a la salud y señaló que los indicadores de mortalidad infantil de Cuba son ejemplos alentadores en la región. También destacó que Cuba ha permitido reflexionar sobre aspectos esenciales relacionados con la universalidad en el acceso a los servicios sanitarios, resaltando su paradigma como un caso digno de estudio.
En su discurso, el ministro reafirmó el compromiso de Haití con los principios de salud para todos que sustentan sus políticas públicas. Asimismo, hizo un llamado a la solidaridad internacional, instando a la comunidad global a apoyar al pueblo haitiano, frente a los significativos desafíos que enfrenta en el contexto actual.
Bertrand Sinal resaltó la importancia de fortalecer los lazos de cooperación global para garantizar sistemas de salud resilientes y accesibles, subrayando la urgencia de responder con acciones conjuntas a las crecientes necesidades del sector.
Cooperación y tecnología, pilares de la lucha contra enfermedades crónicas en África
En los paneles desarrollados a continuación, relacionados con las políticas públicas y su papel en el control de las enfermedades crónicas, Celso Da Nascemento Matos, ministro de Salud de Sao Tomé y Príncipe, destacó los avances y retos de su país en materia de salud pública, así como el desarrollo de nuevas estrategias para enfrentar los desafíos actuales y futuros.
El ministro enfatizó los buenos resultados alcanzados en los últimos 35 años en el control de ciertas enfermedades, y abordó el papel fundamental de los recursos humanos y la infraestructura hospitalaria en el fortalecimiento del sistema de salud.
Sin embargo, reconoció que los problemas persistentes en el sistema han llevado al desarrollo de un nuevo plan de acción que incluye la definición del perfil de cada comunidad, la presentación y ejecución del plan, su monitorización y evaluación, así como el financiamiento y sostenibilidad.
Asimismo, destacó que el principal objetivo del plan es garantizar la prestación de cuidados de salud de calidad en todos los niveles del sistema sanitario, promoviendo una reforma integral basada en un enfoque multisectorial y transversal.
En este contexto, subrayó la importancia de estar preparados para enfrentar nuevas epidemias y resaltó el apoyo constante de Cuba a través de sus misiones médicas en Sao Tomé y Príncipe.
En ese sentido, Aaron Motsoaledi, ministro de Salud de Sudáfrica, centró su intervención en la importancia de las políticas públicas para el control de enfermedades crónicas y en las iniciativas llevadas a cabo en su país para abordar este desafío en el contexto nacional y global.
“África también enfrenta el impacto de estas enfermedades, para las cuales se han establecido prioridades que buscan abordarlas con eficacia. Sin embargo, las desigualdades en el acceso a los servicios de salud, agravadas por la situación económica, continúan afectando al sistema sanitario sudafricano”, expuso el ministro.
En este marco, subrayó la incorporación de tecnologías que permiten diagnosticar estas enfermedades con mayor rapidez, facilitando una respuesta más eficaz.
Motsoaledi mencionó también los logros alcanzados tras la pandemia de COVID-19, incluyendo una reducción del 20% en los casos de tuberculosis gracias a un programa amplio de pesquisaje. Resaltó también los resultados de las políticas implementadas, como la disminución en el consumo de tabaco y alcohol mediante estrategias de concientización, y la notable reducción del consumo de sal, lo que ha incidido en una menor prevalencia de enfermedades cardiovasculares en un periodo de ocho años.
El ministro afirmó que las leyes no solo tienen impacto en la economía, sino también en la promoción de la salud. Además, compartió avances en la integración de la atención a la salud mental en las políticas y estrategias sanitarias del país, destacando el compromiso de garantizar el derecho al acceso a estos servicios bajo los principios de universalidad y solidaridad social.
Motsoaledi reforzó la necesidad de construir sistemas de salud equitativos y sostenibles, destacando el papel de la colaboración internacional para enfrentar los retos compartidos en materia de salud pública.
23 Abril 2025 Fuente: Cubadebate/ Noticias/ Salud
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Durante su misión internacionalista en Granada, el doctor villaclareño Omar Hernández Rivero, viajaba el primer viernes de cada mes a la isla granadina de Carriacou para cumplir sus funciones como único consultor de psiquiatría en el sistema de salud pública de ese país caribeño.
En uno de sus primeros viajes, el trabajador social le pidió que visitara a un hombre de 68 años que padecía de un trastorno esquizoafectivo, quien estaba aferrado a su casa sin querer ver, ni hablar con nadie.
Llegaron al hogar, bastante alejado de la ciudad y muy cerca del mar y las montañas, pero los primeros intentos de comunicación fueron fallidos.
Gracias a esa feliz coincidencia, el doctor logró cierto acercamiento a aquel paciente. Allí supo que se negaba a comer por miedo a ser envenenado y que se rehusaba a hablar con las personas porque «solo hablaba con Dios».
Según Omar, el señor tenía criterio para ser ingresado de urgencia en un hospital psiquiátrico, pero él y su familia se negaron, razón por la que tuvo que proponer una estrategia de intervención comunitaria. Mas ese primer día el paciente no aceptó que la enfermera granadina lo inyectara y le extrajera sangre para análisis. Esos procederes solo permitieron que se los realizara el médico de Cuba.
Después de dos meses de tratamiento el enfermo mejoró notablemente. De forma voluntaria fue al Centro Comunitario de Salud Mental, acompañado de su hija. En modo de jarana, la enfermera le dijo que no quería saber de él porque ella lo atendía desde hacía muchos años y él se negaba a hablar con ella, sin embargo, conversaba con el médico cubano que era nuevo allí.
Desde entonces aquel señor no tuvo otra crisis tan intensa. Cada primer viernes era uno de los primeros pacientes en llegar a la clínica de Carriacou, a atenderse con el doctor Omar. Recibía al galeno cubano con frases bien pronunciadas en español: “Buenos días. Bienvenido”. Mientras, se despedía con la expresón “Long live Fidel [Larga vida para Fidel], Long live Cuba [Larga vida para Cuba]”.
La doctora pinareña Laura Margarita González Valdés siempre añoró tener un día a Fidel muy cerca. Y muchas veces imaginó cómo sería ese encuentro. Sin embargo, lejos estaba de imaginar que, en febrero de 2003, sería ella una de las personas elegidas para preparar el camino y escribir la propuesta de la Misión Barrio Adentro.
El 3 de marzo de ese mismo año, Laura aterrizaba en Maiquetía, Venezuela, junto al doctor Víctor Ernesto Felipe Tamayo (especialista en Medicina General Integral, de La Habana) y al doctor Antonio Torreblanca Pineda (epidemiólogo de Guantánamo), para buscar los locales destinados a las consultas y las casas de venezolanos donde ubicarían a los primeros 50 médicos cubanos que iniciarían la misión en los cerros de Caracas.
Cumplida la encomienda, regresaron a Cuba el día 11 de abril, a recoger a los colaboradores. Al llegar le comunicaron que el Comandante quería reunirse y almorzar con ellos, luego de la clausura del II Foro sobre VIH/SIDA/IYS en el Palacio de Convenciones, el día 12.
“Conocer a Fidel… esa era la añoranza de todos los cubanos. Yo lo había visto varias veces, pero siempre había sido de lejos, no era igual, estaba feliz y muy emocionada. Como a las tres de la tarde cuando finalizó el encuentro nos pasaron a una habitación donde estaba previsto el almuerzo, una mesa gigante con vajillas y cubiertos, que yo no tenía idea de cómo iba a usar. Allí estábamos esperando los tres y apareció Fidel, inmenso en su inseparable traje verde olivo y me pareció entonces que la habitación y la mesa eran pequeños y yo también me veía pequeña ante un hombre tan grande.
“Ya no me preocupaban tantos cubiertos, ni no saber para qué servían, ni el temor de cometer una pinareñada. Ya no me preocupaba nada, solo lo veía a él y me parecía que lo había vivido todo, solo me hubiera gustado que mis hijas estuvieran allí. Nos saludó, se sentó y comenzó a preguntar de todo, de todo lo que se puedan imaginar, quería saberlo absolutamente todo de Caracas y procesaba la información a una velocidad increíble”.
Allí les dieron las seis de la mañana del día siguiente. De pronto, él preguntó: “Estos muchachos llegaron ayer, ¿no es así?, ¿ya vieron a su familia?”. Quienes lo acompañaban le contestaron que Víctor era de La Habana y que la familia del epidemiólogo también estaba en la capital. Pero que la doctora Laura aún no había podido ver a los suyos.
Entre los médicos de la Brigada Henry Reeve que respondieron al llamado de Fidel para ayudar al pueblo pakistaní luego del terremoto que estremeciera a esa nación árabe en octubre de 2005 estuvo el doctor Arturo A. Viciedo Vivas, de La Habana.
Como de costumbre, Fidel se reunió con los colaboradores cubanos que marcharían a esa misión humanitaria. El intercambio comenzó con un saludo muy cálido y familiar por parte del mandatario, quien despertó una gran admiración, especialmente, en quienes como él cumplían su primera misión internacionalista, porque era un líder muy detallista y preocupado por los suyos.
Según contó el joven doctor, el Comandante no solo les habló de la importancia de la misión a cumplir, o los objetivos de la misma. Fidel tuvo en cuenta y preguntó hasta si ya tenían consigo abrigo y ropa de frío, les aconsejó cómo enfrentar las bajas temperaturas, cómo alimentarse e integrarse a la cultura de los pakistaníes y muchas otras sugerencias.
En lo particular, quien hace esta historia se sintió como en un grupo de hermanos que se despiden de su padre”, evocaría el galeno cubano, destacando las últimas recomendaciones del máximo dirigente de Cuba, poco tiempo antes de que la Brigada abordara el IL 62: “Hay que poner miel y chocolates en la mochila, pues estos proporcionan calorías y ayudan a soportar el frío”. Orden que sus asistentes cumplieron de inmediato.
Un chiste del máximo líder de la Revolución los liberó momentáneamente de las tensiones propias de la situación: “Esperen a llegar para comerse los chocolates”. Luego, la habitual foto de despedida. A decir del doctor Arturo, “la última vacuna de honor y valentía”.
Esa fotografía y el dibujo que su hermanito de cinco años le regalara fueron sus mayores alicientes en momentos difíciles. Cuando la soledad, el frío y el paisaje dibujado por aquella fuerza telúrica lo zarandeaban, él recordaba su diálogo de despedida con el pequeño, cuando le dijo que iría a un país muy frío a atender a unos niños enfermos, y Alejandro le entregó un papel con unos rústicos trazos y le comentó: “Tatico, te regalo este sol, le pinté muchos rayos para que cuando tengas frío lo saques y te calientes”.
Acerca del legado de la persona de Fidel en él, comentaría el doctor habanero Arturo A.Viciedo Vivas: “Aunque no creo que pueda estar jamás tan alto, pero el solo hecho de intentarlo, me hizo el hombre más fuerte que mi cuerpo y mi espíritu me permitían (…) Quien escribe estas líneas sigue tratando de crecer, usando como abono el pensamiento del mejor: ‘Ser internacionalistas es saldar nuestra propia deuda con la humanidad. Quien no sea capaz de luchar por otros, no será nunca suficientemente capaz de luchar por sí mismo’”.
Por la impactante experiencia que vivió el doctor villaclareño Omar Hernández Rivero, en Granadas, el lunes posterior al fallecimiento de nuestro Comandante en Jefe, volvemos a él y contamos lo que le sucedió.
25 noviembre 2023 | Fuente: Cubadebate | Tomado de Especiales |Salud
Oct
13
Claudia Bernal es una joven investigadora cubana del CIGB (Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología) de la Habana, donde se creó la primera vacuna cubana contra la Covid-19, la Abdala, que hoy se aplica, en el marco de la cooperación Sur-Sur, además de en Cuba, en México, Vietnam, San Vicente y las Granadinas, Nicaragua, Venezuela y Siria. Voluntaria en centros de aislamiento y Premio Jóvenes por la Vida, Bernal centrará su exposición en los esfuerzos de la ciencia y la salud pública de Cuba frente al bloqueo económico, financiero y comercial que impone a la Isla el Gobierno de EEUU.
Javier Motta, representante de la Fundación Un Mundo Mejor Es Posible (Argentina), hablará de la experiencia de la cooperación Sur-Sur de Cuba en su país y, en concreto, de la llamada Operación Milagro de operaciones oftalmológicas gratuitas para personas sin recursos, realizadas en el Centro Oftalmológico Ernesto Che Guevara de Córdoba, así como del trabajo en red, movilización y transformación comunitaria gestado a partir de dicho programa solidario cubano.
Daylin Cárdenas es médica cubana internacionalista, destinada actualmente en el Centro Oftalmológico Ernesto Che Guevara de Córdoba (Argentina), en la llamada Operación Milagro. Con dos especialidades (medicna general integral y oftalmología), es también profesora auxiliar e investigadora agregada del Instituto Cubano de Oftalmología “Ramón Pando Ferrer” de la Habana. Anteriormente estuvo cumpliendo misión en Angola (2008) y Haití (2020).
La presencia de Claudia Bernal se enmarca en la gira que, en el mes de octubre, realizará por localidades del Estado español, a cargo de los colectivos del Movimiento Estatal de Solidaridad con Cuba (MESC).
11 octubre 2023 |Fuente: cubainformacion | Tomado de Solidaridad