El Ministerio de Salud de Cuba convoca cada año a los profesionales del sector a participar en el concurso por el Premio Anual de Salud, máxima expresión de reconocimiento por hacer uso del talento científico en aras de un mejor estado de salud de la población cubana.

Sumar galenos al plan de actividades científicas nacional en la Isla de la Juventud representa un logro para el sistema sanitario pionero. El Premio Anual de Salud 2024 fue la plataforma idónea para que especialistas, estomatólogos y estudiantes de las ciencias médicas presentaran 15 trabajos investigativos que responden a uno de los pilares del Gobierno.

Ello propicia el desarrollo de la ciencia y la tecnología, pues como expresara el presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez: Hemos aprendido que la ciencia, la innovación y la investigación tienen respuesta para todo.

Temas relacionados con el Carcinoma Basocelular, Estrategias Educativas para la Salud Oral en el quinto año de vida; Diagnóstico temprano del Cáncer Digestivo; los Factores Predictores de Lesiones Residuales después de la Conización Cervical; y la Intervención Educativa sobre el Cáncer Bucal en Pacientes de Alto Riesgo ponen de manifiesto la labor investigativa de los médicos en medio de la compleja situación económica que da paso a la carencia de insumos, por solo mencionar algunos factores.

En torno a ello, el Dr. Carlos Borges Peralta, presidente del Consejo de Sociedades Científicas de Salud Pública, expresó que la celebración de este premio en la actualidad es un reto, pues el sistema sanitario atraviesa por duros momentos donde se impone, a través de las investigaciones, crear alternativas científicas que permitan el desarrollo.

“Si bien eventos de este tipo constituyen un paso de avance, no estamos ajenos a las dificultades que presenta el territorio, pues nos falta adueñarnos de la metodología de la investigación, así como mayor publicación de artículos científicos”, enfatizó.

En esta 47 edición del certamen recibieron premio en la categoría Artículo Científico los doctores Yoneisy Abraham Millán y Henry Luis Dávila Gómez, este último se presentará al concurso Nacional de la Salud 2025.

En Investigación Aplicada resultó premiada la Dra. Rosa María Montano Silva. Asimismo, fueron entregadas cinco menciones en: Trabajo de Terminación de la Especialidad; Investigación en Servicios de Salud y Trabajo Científico Estudiantil.

Sandra González Gómez, especialista en Primer Grado de Dermatología, mereció lauro por su investigación en cuanto a la Caracterización Clínica Epidemiológica del Cáncer Basocelular en el municipio entre los años 2020-2022.

“Fue una experiencia única poder participar en el certamen junto con grandes médicos del territorio y sobre todo haber alcanzado premio en la categoría de Terminación de la Especialidad”, comentó.

El Premio… abrió nuevas expectativas para estimular el desarrollo de las investigaciones en el sector desde los escenarios asistenciales hasta los docentes; así dio a conocer el Dr. Mariano Valle, presidente del tribunal del evento.

Señaló, además, que se realizó una exhaustiva revisión previa de los trabajos presentados, los cuales contaban con gran calidad investigativa ya que la mayoría son artículos científicos publicados en revistas de Salud.

De igual forma la Dra. Bárbara Daudinot, directora general de Salud Pública en el territorio, reconoció a los participantes por la preparación en cada temas y aseguró sentirse orgullosa de contar con colegas dispuestos a hacer ciencia de calidad más allá de las limitaciones y complejidades cotidianas.

Agradeció al tribunal por su rigor en el análisis de los trabajos y ponderó la necesidad de realizar otros dedicados a la investigación para crear herramientas de referencia que permitan un mejor servicio de salud.

Aplicar con efectividad, equidad y racionalidad los avances científicos en la práctica social es el reto del sistema nacional de Salud Pública.

10 julio 2024 Fuente: Victoria/ Noticias/ Salud

 

La vacuna antineumocócica cubana Quimi-Vio recibió este viernes el registro sanitario por parte de la entidad reguladora de la nación caribeña, después de realizar un proceso riguroso de evaluación.

Luego de concluir todos los ensayos clínicos requeridos, que demuestran suficientes evidencias de calidad, seguridad y eficacia, el Centro para el control Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos de la República de Cuba otorgó dicha condición a ese inyectable a cargo del Instituto Finlay de Vacunas (IFV).

El proyecto con Quimi-Vio se inició en el año 2012 y ha tenido el acompañamiento regulatorio de las entidades cubanas.

Se trata de una vacuna muy compleja, la cual, al introducirse en los países que ya la han usado, ha hecho que los indicadores de salud de la infancia mejoraran significativamente en términos de morbilidad de las enfermedades respiratorias, y de mortalidad infantil por infecciones”, expresó recientemente Dagmar García, directora de Investigaciones del IFV.

El primer estudio con Quimi-Vio se llevó a cabo en la central provincia de Cienfuegos en 2023 “y en esa ocasión se vacunó a más del 90 por ciento de todos los niños entre uno y cinco años. Fueron, aproximadamente, 11 mil 600 pequeños, detalló la especialista.

Sobre los resultados de esas intervenciones, García dijo que, en Cienfuegos, en 2018 y 2019, también realizaron un ensayo clínico comunitario, en el que inyectaron al 93 por ciento de todos los niños entre uno y cinco años de edad.

Al año de haberlos inmunizado se observó un 63 por ciento de reducción de las tasas de hospitalizaciones por enfermedad respiratoria; y un 73 por ciento de reducción de la enfermedad neumocócica invasiva, por los serotipos que están contenidos en la vacuna”, añadió.

En junio de este año, se anunció que un estudio de intervención contra la enfermedad neumocócica en lactantes menores de un año (que tengan dos, cuatro y 11 meses) tendrá lugar con Quimi-Vio también en territorio cienfueguero.

Según la investigadora principal del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí, (IPK) de la nación caribeña, María Eugenia Toledo, Quimi-Vio protegerá a los infantes menores de un año de 11 serotipos que producen la enfermedad neumocócica. (Con información de Prensa Latina)

05 julio 2024| Fuente: Cubadebate| Noticias| Salud

Enrique Rosendo Pérez Cruz, doctor en Ciencias y director del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Sancti Spíritus (CIGBSS), desanda los pasillos de la Universidad de Ciencias Médicas (UCM) de la provincia, dentro de la cual está enclavada la institución científica que dirige, y en cada paso recuerda el 26 de julio de 1986, cuando Fidel inauguró esa casa de altos estudios.

“El CIGBSS existe a raíz de esas celebraciones moncadistas, porque en un recorrido por la UCM, Fidel se quedó maravillado y comentó lo excelentes que estaban estos laboratorios para hacer biotecnología”, cuenta Enrique.

A partir de ese momento, las autoridades del territorio tomaron la palabra al líder de la Revolución cubana y pocos meses después ya estaban los primeros espirituanos capacitándose en el CIGB de La Habana, hasta que finalmente regresaron a la provincia en 1990 con la encomienda de potenciar la biotecnología.

“Y lo hicieron no solo con el aporte de su intelecto, sino de sus propias manos, al tomar pico y pala para acondicionar la sede que ocupamos desde entonces en la UCM”, dice Pérez Cruz con orgullo.

Mucho ha llovido y hoy más de 50 trabajadores se afanan en encontrar respuestas a enfermedades como el dengue o la diabetes, en su compromiso por desarrollar la ciencia en la provincia y en el país.

La actual etapa está marcada por el cumplimiento de la elaboración de reactivos biológicos asociados a la liberación de más del 95% de productos biotecnológicos de la industria, lo cual han cumplido con esmero.

De igual forma, generan y comercializan anticuerpos monoclonales, sus conjugados y proteínas recombinantes para su empleo como reactivos biológicos destinados a la investigación-desarrollo de productos biotecnológicos y de diagnóstico.

“También diseñamos, desarrollamos, producimos y comercializamos diagnosticadores del tipo tira reactiva rápida, basada en la tecnología del flujo lateral, para uso humano y veterinario. Diseñamos y desarrollamos sistemas analíticos para estudios de farmacovigilancia y farmacocinética de productos líderes de la biotecnología cubana”, agrega Enrique Rosendo.

De hecho, el quipo del CIGBSS está inmerso en la producción de tirillas para el diagnóstico temprano del embarazo, que se comercializan bajo el nombre de HeberFast Line® MaterniTest II. Es un método sencillo y confiable que, tras poco tiempo de espera, ofrece un resultado certero.

Investigar, desarrollar y transferir tecnologías enzimáticas de uso industrial para obtener productos de alto valor agregado, aplicables a las industrias azucarera y alimentaria, y expresar proteínas recombinantes en diferentes hospederos para usos biotecnológicos, son también áreas en que sobresale el centro espirituano.

Según el director del CIGBSS, actualmente desarrollan varios proyectos en colaboración con centros de BioCubaFarma, entre ellos los relacionados con la generación de anticuerpos monoclonales para el diagnóstico temprano de los candidatos vacunales que se crean contra el dengue y el virus del papiloma humano.

Nuevos retos para nuevos tiempos

Para logar soberanía tecnológica y resolver los casos en menor tiempo se trabaja, en conjunto con el Laboratorio Central de Criminalística y el sistema criminalístico de la provincia, en la creación de varios reactivos que permitan identificar la especie a la cual pertenece determinada mácula de sangre hallada en la escena de un delito.

Esta investigación se proyecta con el empleo de la tecnología del Sistema Ultramicroanalítico (SUMA) del Centro de Inmunoensayo (CIE).

“Ya hemos dado una respuesta inicial en la producción de anticuerpos policlonales que reconocen hasta siete especies diferentes sin reactividad cruzada entre ellos, y eso es un resultado importante. Ha sido un trabajo de ambas partes y pretendemos, en unos dos años, mostrar un resultado con total soberanía nacional”, señala el director del CIGBSS.

También tienen el compromiso de desarrollar las enzimas que intervienen en el diagnóstico por reacción en cadena de la polimerasa o PCR, toda vez que Cuba enfrentó la pandemia de la covid sin tener un juego de reactivos con que realizar el PCR.

“Varias empresas aglutinadas por el Grupo de las Industrias Biotecnológicas y Farmacéuticas, BioCubaFarma, desarrollan actualmente los reactivos que pueden emplearse a modo de un PCR de producción nacional. Entre esas entidades está nuestro centro, que produce los biocatalizadores”, precisa Pérez Cruz.

“Hay, además, un laboratorio de biología molecular. Esa es una fortaleza, no solo para diagnosticar el SARS-CoV-2, sino para diagnosticar otros virus respiratorios o enfermedades que demanden la realización de PCR”, añade.

De igual forma, tienen un trabajo asociado a la leche materna como continuidad de un estudio realizado en Sancti Spíritus, el cual demostró que la respuesta inmune en las gestantes vacunadas con Abdala presentaba anticuerpos neutralizantes contra el SARS-CoV-2 en su leche materna, por lo que se generaba una protección en el lactante.

Los especialistas espirituanos demostraron que existe esa protección, incluso, contra las nuevas variantes del SARS-CoV-2, lo cual puede corroborarse en los artículos científicos “SARS-CoV-2 spike RBD-specific IgA and IgG antibodies in breast milk after vaccination with the protein subunit vaccine Abdala” y “Anti-SARS-CoV-2 Omicron BA.5 RBD antibody titers generated by the protein subunit vaccine Abdala in breast milk”, publicados en las revistas Infectious Medicine 1 (2022) y Vacunas (2024), ambas de la editorial Elsevier.

“Mientras hubo lactancia exclusiva, no tuvimos infantes enfermos de covid. Eso demuestra la producción de anticuerpos neutralizantes en las gestantes vacunadas con Abdala”, explica Enrique.

Por si esto no bastara, en la línea de desarrollo de sistemas analíticos de farmacovigilancia y farmacocinética se ha logrado desarrollar sistemas de optimización de ELISA basados en el llamado paso a paso.

“Estos son aportes al conocimiento, pero en la práctica obtenemos sistemas más sensibles y esto lo corroboran las publicaciones de varios estudios en revistas de alta repercusión como Analytical Biochemistry y Journal of Immunological Methods”, señala.

El CIGBSS tiene, además, el proyecto Desarrollo de tecnología para la producción de los fructooligosacáridos (FOS).

1 julio 2024 Fuente: Victoria/ Noticias/ Salud