Durante el verano suelen aumentar los casos de enfermedades diarreicas agudas (EDA) porque aumentan las condiciones que favorecen la proliferación de las bacterias, los parásitos y los virus que las causan, de ahí la importancia de extremar los cuidados para evitar estas afecciones que tanto malestar generan y que pueden llegar a provocar deshidratación.

Un artículo publicado en el sitio web del Ministerio de Salud Pública (MINSAP) ofrece algunas claves sobre este tipo de afecciones y su prevención. Según esta fuente, “los agentes infecciosos causantes de las EDA se transmiten habitualmente a través de la ingesta de agua o alimentos contaminados con materia fecal, o mediante la contaminación directa de las manos u objetos utilizados diariamente”.

Hay un sinnúmero de situaciones que pueden ocasionar la transmisión. Si no hay una adecuada higiene de las manos, de los utensilios y del lugar donde se elaboran los alimentos, si estos no proceden de una fuente segura, si los cocinados se ponen en las mismas vasijas que los crudos, si se congelan y descongelan varias veces, si la cocción no es suficiente, y si no se conservan a temperaturas adecuadas, pueden proliferar los gérmenes que atacan el estómago y los intestinos.

Por eso es tan importante cuidar las condiciones en que preparamos lo que se ha de comer, y si pretendemos ingerir comestibles fuera de casa, asegurarnos de que sea en un lugar pulcro, donde se cumplan las normas de higiene de los alimentos.

El agua también puede ser un vehículo para la llegada de los agentes infecciosos al organismo, no solo cuando hay frecuentes lluvias y viene turbio el preciado líquido, sino cuando hay sequía y se contamina por mala manipulación o deficientes condiciones de almacenamiento.

De ahí la importancia de utilizar hipoclorito de sodio al 1% para garantizar la inocuidad del agua, incluso la que haya sido previamente hervida.

Otras recomendaciones del MINSAP son el lavado de manos con agua tratada y jabón antes y después de comer, antes de cocinar o de dar alimentos a los niños, luego de ir al baño o de cambiar pañales y antes de amamantar. El lavado de verduras y frutas con abundante agua segura antes de consumirlas y cocinar suficientemente las carnes.

También es beneficioso usar sustancias desinfectantes para la limpieza, mantener correctamente tapados los cestos con desechos de comida y otros residuos que deben eliminarse diariamente. Y evitar el fecalismo al aire libre.

Ahora bien, ante la aparición de los síntomas es importante tener Sales de Rehidratación Oral, o saber cómo prepararlas de forma casera. Es muy importante dar al enfermo esta mezcla de agua segura, sal y azúcar, para que su organismo reponga rápidamente el agua y los electrolitos perdidos en las heces. Pero tener a mano el medicamento no significa que sea innecesario acudir al médico. Ante la aparición de la diarrea u otros síntomas, es importante la evaluación del facultativo, sobre todo si se trata de embarazadas, niños, ancianos o personas con enfermedades crónicas.

24/08/2023  Tomado – Sierra Maestra

Ante la amenaza de Idalia sobre el occidente del país, el Ministerio de Salud Pública, a través de su sitio web, recordó las medidas higiénico-sanitarias que debe cumplir la población en sus hogares.

ANTES DEL PASO DEL CICLÓN

  • Mantener la higiene personal y colectiva de la familia.
  • Asegurar agua para el consumo, hervida y clorada, siempre que sea posible.
  • Conservar adecuadamente los alimentos.
  • Disponer de recipientes para la basura, bien tapados y alejados de los alimentos.
  • Incrementar las acciones del autofocal y eliminar los posibles criaderos de mosquitos (objetos a la intemperie, que acumulan agua).
  • Realizar limpieza general en azoteas, patios, solares, entre otros.
  • Mantener el control de mascotas y animales de crianza.
  • Colaborar en labores de limpieza en la comunidad.

LUEGO DEL PASO DEL CICLÓN (FASE RECUPERATIVA):

  • Mantener la higiene personal y, colectiva de la familia.
  • Hervir el agua de consumo y, siempre que sea posible, aplicarle hipoclorito.
  • Desechar los alimentos que muestren cambio de color, sabor, olor o se sospeche que se hayan contaminado.
  • Realizar el lavado y la desinfección de los alimentos que se consumen crudos (frutas y vegetales) durante tres minutos, con solución clorada, y posteriormente enjuagar con agua potable.
  • Garantizar la higiene personal de los manipuladores de alimentos.
  • Acudir al médico con inmediatez ante la manifestación de cualquier enfermedad (fiebre, diarrea, rash, entre otros síntomas).
  • Sanear azoteas, patios y solares, entre otros.
  • Destruir los criaderos potenciales de mosquitos.
  • Cocinar los alimentos por encima de los 70 grados Celsius y conservarlos protegidos en todo momento.
  • Extremar las medidas de protección de los alimentos expuestos: proteger con tapas u otro medio, según se disponga.

28/08/2023, Granma – Tomado de Cuba

Aunque aseguran que el comportamiento no es inusual para esta época del año —cuando debido a las altas temperaturas y el incremento de las lluvias aparecen estas enfermedades—, alarmante sí fueron las 160 atenciones médicas por diarreas que durante la segunda semana de agosto se computaron en el Hospital Pediátrico Provincial José Martí Pérez.

De acuerdo con las autoridades sanitarias de la provincia, los infantes atendidos, la mayoría residentes en el municipio cabecera, no presentaron síntomas de gravedad y solo más de una treintena permanecía ingresado al cierre de esta edición.

El doctor Carlos Ruiz Santos, director del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología (CPHEM), explicaba en conferencia de prensa que los test de rotavirus realizados a los pacientes hospitalizados confirmaron que se tratan de diarreas de etiología viral, respaldado, además, con los coprocultivos efectuados, los cuales no arrojaron bacterias.

“Está asociado, por supuesto, a la época del año: las altas temperaturas, las lluvias que han venido sucediendo y también con la calidad del agua. No tenemos brotes institucionales ni familiares ni colectivos, solo han sido casos aislados”, aseguró a la prensa Ruiz Santos.

El tratamiento, por ende, ha sido sintomático con hidratación oral y, en los casos en que el cuadro clínico lo ha requerido, parenteral.

“La provincia ya tiene una disminución de casos, todos los territorios decrecen en las atenciones acumuladas por diarreas”, sostuvo el director del CPHEM. Para ilustrarlo añadió que en lo que va de año se han suscitado 3 530 atenciones médicas por enfermedades diarreicas agudas —donde se engloban niños y adultos—, cifra inferior a la reportada en igual período del 2022 cuando ascendía a más de 4 000.

“Se ha venido muestreando la calidad del agua en varios puntos de la ciudad y ha habido mejorías, pero todavía hay dificultades con la llegada del nivel de cloro adecuado del agua a la vivienda”, puntualizó Ruiz Santos.

Tanto que, según los exámenes realizados por Salud, entre el primero y el 15 de agosto la calidad del agua en la cabecera provincial se enmarcaba entre el 41 y el 81 por ciento. De ahí que, al decir de Pedro Jiménez Pérez, director adjunto de la Empresa Provincial de Acueducto y Alcantarillado, entre los trabajos que se acometen se hallan la limpieza de los tanques elevados y de las conductoras, la supresión de los salideros y la cloración manual del agua, para lo cual existe disponibilidad del producto.

Contra ello conspira la caducidad de las redes hidráulicas del municipio, las roturas de las bombas y los problemas técnicos que conllevan a la intermitencia en el bombeo y, por ende, al almacenamiento del líquido en los hogares.

Es por ello que los especialistas insisten en el manejo y tratamiento adecuado del agua de consumo. Y, además, porque otras de las enfermedades que ha incidido en la provincia es la hepatitis A, de la cual se diagnosticaron presuntivamente 92 casos en el mes de julio, la mayoría adultos y residentes en las cuatro áreas de salud de la cabecera provincial.

Ante tal panorama epidemiológico las autoridades sanitarias han insistido en extremar las medidas como lo es hervir el agua o administrarle el hipoclorito a razón de cuatro a cinco gotas por litro y velar por la adecuada conservación de los alimentos.

17 agosto 2023, Escambray