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Cuando se llega a San Felipe, capital del Estado de Yaracuy para conocer más de la impronta de las Misiones Médicas Cubanas, un punto obligado de encuentro es el Centro de Diagnóstico Integral “Wilfredo Conejero”, San Felipe 2, enclavado en la Parroquia Ascensión, en el mismo casco histórico de la ciudad.
Allí, más de treinta colaboradores de la isla hacen lo suyo para mantener un prestigio bien ganado. Así tienen el mérito de ser un CDI Centinela, Escuela, Quirúrgico, fragua de buenas prácticas y de formación de un personal cubano y venezolano de alto nivel, pero sobre todo con un corazón en el medio del pecho.
El Doctor Reinier Miclín Romero es de Santiago de Cuba y hace más de cuarenta meses llegó a su segunda misión en la nación hermana. Ahora dirige este centro.
“Todos los colaboradores de nuevo ingreso cuando arriban al Estado pasan por un proceso de ubicación, orientación y se les imparte la teoría, se vinculan a este centro-escuela en diversas especialidades, ya sea Médico de Comunidad, Administración, Enfermería, Rehabilitación, entre otras, y rotan por diversos servicios, donde aprenden los procedimientos.
También a nivel de Estado se hace capacitación, los colaboradores deben tener más de cuatro meses como experiencia en la Misión, y como otro requisito, haber trabajado en puntos fronterizos, entonces los mejores pasan a formar parte de esta institución. En lo que va del año 2023 por este CDI han pasado cerca de 40 colaboradores que después, más preparados, van a otros lugares”, puntualizó.
El Estado de Yaracauy está ubicado en la parte centro occidental de Venezuela, y el Centro de Diagnóstico Integral “Wilfredo Conejero” atiende una población de 65 mil habitantes, con 16 consultorios, cinco de ellos con médicos cubanos.
La parroquia se caracteriza por poseer un nivel medio alto, y los mayores padecimientos son la hipertensión arterial, la obesidad, y la Diabetes Mellitus.
Asimismo, el CDI ofrece un alto número de servicios, que van desde la promoción y prevención de salud, hasta la realización de exámenes diagnósticos, electrocardiogramas, ultrasonidos, Rayos X, así como Rehabilitación Integral, además de contar con un Salón de Operaciones con cirugías mayores o menores, de modo gratuito, lo cual ayuda económicamente a estos pacientes de bajos ingresos.
También se presta servicios al personal cubano que contrae alguna enfermedad, por eso es catalogado como CDI Centinela, pues debido a la posición geográfica y por contar con el personal más capacitado (médicos, personal de enfermería y de servicios), allí se atiende a los colaboradores enfermos, se ingresan y reciben su atención de acuerdo con la magnitud de sus patologías.
Pero, además, el Centro de Diagnóstico “Wilfredo Conejero” ayuda a la formación de profesionales y, según explica el Doctor Miclín “somos responsables de la formación de los futuros médicos venezolanos, estudiantes que están en Pregrado, aquí los capacitamos en la parte clínica.
Asimismo, los alumnos de cuarto, quinto y sexto año se vinculan a las prácticas con el Hospital y nuestra institución. Muchos de estos médicos pasan a ser parte de nuestro colectivo, son Doctores graduados con profesores cubanos y aprenden de nuestra idiosincrasia, conocen nuestro sistema de trabajo, nuestros rasgos de humanidad y compañerismo, es evidente el agradecimiento que muestran hacia nosotros”.
Otra de las virtudes del centro es que allí se realizan operaciones con un equipo bien calificado de especialistas venezolanos y cubanos, tal y como ha sucedido en las jornadas quirúrgicas nacionales.
Gracias al respaldo de las autoridades venezolanas se restauró el Salón de Operaciones para dar servicios al pueblo venezolano, y en una primera jornada fueron operados alrededor de 60 pacientes de fistulas arteriovenosas para que fuera menos invasivo el proceso de diálisis, y recientemente se operaron 44 pacientes, los cuales recibieron el tratamiento quirúrgico, todo lo cual contribuye al bienestar del pueblo venezolano.
“En esta jornada se trabajó como un binomio, en colaboración de especialistas cubanos con entes venezolanos, nos apoyó el Ministerio de Salud, tuvimos una fructífera experiencia con médicos cirujanos cardiovasculares y una Doctora anestesista de este país, que participaron con el personal cubano de enfermería, y otros especialistas”, dijo el Doctor Reinier Miclín.
Para este joven médico, la mayor recompensa ante tanto esfuerzo es el reconocimiento del pueblo venezolano a la labor del colectivo.
“Contamos con más de 30 colaboradores, todos tenemos los mismos principios, somos una familia y nuestra premisa es tratar siempre de educar con el ejemplo y decidir juntos el mejor camino a seguir. Tenemos un índice de aceptación inmenso, el impacto de la labor de la Misión Médica Cubana se aprecia en todas partes.
“Venezuela también es un país bloqueado, y aquí las personas con bajos recursos agradecen, una cirugía cuesta entre mil dólares a 2 mil dólares, y nosotros lo hacemos de manera gratuita y con profesionalidad, incluso hay declaraciones muy positivas del Alcalde y el Gobernador del municipio con su reconocimiento a lo que hacemos”, refiere.
Este hombre sencillo tiene otros sentimientos. En su patria querida hay una familia que lo espera y que vive orgullosa de la entrega de este joven médico, santiaguero nato.
“Desde el 2013 al 2016 estuve en el Estado Guárico, luego en el período 2017-2019 presté servicios en Brasil y ahora regreso a Venezuela con una gran responsabilidad sobre mis hombros. Trabajamos con colaboradores, uno comienza a querer y sentir como familia a estos hombres y mujeres que comparten el día a día con nosotros”, confiesa este especialista.
Finalmente añade: “la impresión que uno se lleva del pueblo venezolano es muy linda, ellos nos dan muestras de cariño, que lo manifiestan con una sonrisa de un niño, una palmada sobre los hombros, uno siente que ha crecido como profesional, como amigo, como hijo; mi mamá está muy orgullosa de lo que hago.
“En Cuba me esperan ella y mis hijos, la hembra estudia Laboratorio Clínico y el varón, Esgrima en la Escuela de Iniciación Deportiva, claro que se extraña mucho a la familia, el barrio, los amigos, aunque cuando uno viene, ellos saben que estamos cumpliendo con el deber, sus palabras son muy alentadoras y eso nos inspira para seguir”. ¿Qué le queda de Venezuela cuando pise tierra santiaguera? Le preguntamos finalmente antes de la despedida y de recorrer todas las áreas del Centro.
Nos mira fijamente y responde: “Me llevo algo significativo, el parecido del pueblo venezolano al pueblo cubano, son pueblos que resisten una guerra económica, tenemos tradiciones similares, la cultura alimentaria, la música, las maneras de expresarnos, los barrios son parecidos y el calor humano que se respira en esta tierra, somos pueblos hermanos”.
Hoy es válido reafirmar que en Yaracuy está la impronta de un Centro de Diagnóstico Escuela, Quirúrgico y Centinela, con una Brigada Médica que tiene como rutas el amor y la entrega profesional para seguir conquistando el cariño y admiración del pueblo venezolano.
9 noviembre 2023 | Fuente: Radio Rebelde | Tomado de Ciencia
Nov
9
La nariz aguileña de Laura siempre ha sido su peor carta de presentación. Desde niña la miraban constantemente, y no por su estatura de 1.85 –poco común en una mujer– o por las pecas que adornan sus mejillas, sino por aquella protuberancia enorme que sale del entrecejo hasta arriba de la boca. Ante el bullying inquisidor, su sueño siempre ha sido tener una nariz perfecta, con un ángulo y tamaño ideales. Quería ser modelo, pero su rostro no cumple con “los estándares de belleza”.
La rinoplastia pudiera ser una opción, pero desconoce cómo o dónde hacérsela, aunque llegara hipotéticamente a ahorrar la cifra a la que ascienden tratamientos de este tipo. Por el momento, opta por “mejorar” lo que está en sus manos y visita frecuentemente salones de belleza para combatir con bótox líneas de expresión a las que llama arrugas, aunque Laura no ha cumplido aún los 23.
Su Instagram está lleno de “mujeres perfectas”, tratamientos de belleza y rutinas fitness. El historial de su buscador de Google está repleto de dudas, investigación y el dolor por esa niña de 24 que murió recientemente en su décima cirugía. Laura sabe que mientras no haga las paces con el espejo, no estará bien consigo misma.
En 2022, el valor del mercado de la cirugía y medicina estética en el mundo superó los 75 000 millones de dólares, una cifra que se prevé que siga en aumento, porque cada día son más quienes acuden a un salón de operaciones para someterse a mamoplastias de aumento y liposucciones. En el caso de los tratamientos no quirúrgicos, las inyecciones de bótox y ácido hialurónico son las más frecuentes.
De acuerdo con los últimos datos disponibles, Brasil fue el segundo país con mayor porcentaje de operaciones estéticas en 2021, solo antecedido de Estados Unidos, donde se realizan el 15% de los procedimientos registrados a nivel global.
Según la American Society of Plastic Surgeons, este tipo de cirugía ha aumentado en los últimos años, con las mujeres como mayores consumidoras. En la década de los 90, la intervención preferida era el aumento de mamas. Hoy la liposucción ocupa el primer lugar.
En el caso cubano, según datos del Segundo Congreso de la Sociedad Cubana de Cirugía Plástica y Caumatología, desde 2001 hasta 2016 se realizaron 309 469 cirugías plásticas. La mayoría de ellas (200 508) fueron estéticas y las demás reconstructivas -que son, sobre todo, las realizadas a personas que sufrieron accidentes-.
La cirugía estética (que junto a la reconstructiva integra la especialidad de cirugía plástica) constituye uno de los métodos más invasivos para modificar la apariencia física, y suele realizarse a personas sanas.
Procedimientos avanzados, la ausencia de dolor en las operaciones y la reducción de cicatrices animan a cada vez más seres humanos a “retocarse en el quirófano”.
Estas intervenciones son de las que más alta mortalidad tienen asociada, en dependencia del tiempo y el volumen de grasa extraído, explica la doctora Heizel Escobar Vega, especialista del Hospital Clínico-Quirúrgico Hermanos Ameijeiras. Según la especialista, su realización lleva también a modificar los mecanismos metabólicos, bioquímicos y hepáticos del organismo.
“Me sometí a la cirugía porque no me sentía cómoda con mi talla anterior, y sufría dolores de cervical por el peso de los senos. Luego de la operación me he sentido muy bien física y mentalmente. No me arrepiento en lo absoluto”.
Pero no todas las cirugías pasan por “caminos de rosas”. Rebeca* se hizo una liposucción hace una semana. Pagó 1 300 USD para operarse, de forma clandestina, en un hospital de La Habana cuya identidad no quiso revelar.
Cada faja le costó 30 USD, y ahora paga diario sesiones de drenaje linfático, que deben durar 15 días. La suma de dinero gastada no ha impedido que tenga complicaciones con la raquídea. “Me la pusieron con una aguja que no llevaba. Ahora tengo mareos cada vez que me levanto, vómitos y mucho dolor. Espero que pase pronto”.
Muchos de quienes crecieron escuchando la frase “El físico no importa, sino los sentimientos”, hoy buscan hacerse “retoques” para perfeccionar la nariz, aumentar los senos o quitar un poco de grasa aquí y allá.
Y es que la expresión pareciera fuera de contexto en un mundo que, en apariencia, ensalza los valores, pero premia con ciertas oportunidades laborales a las personas más atractivas. Una sociedad donde los dibujos animados, películas y novelas suelen otorgar a los menos agraciados el papel de villanos y a los más jóvenes y atractivos los roles protagónicos.
“El concepto de belleza está social, temporal y culturalmente condicionado. Se trata de lo que socialmente se considere atractivo, agradable, deseable y que se impone como estereotipo o como patrón a imitar. Cuando por nuestro físico no cumplimos con esos estándares de lo que se considera bello puede tener una repercusión en el autoconcepto y la autoestima, o incluso volverse tendencia una moda a imitar al punto de someternos a procedimientos estéticos menos o más invasivos en busca de alcanzar ese estándar”, explicó a Cuba Joven Jennysey Díaz Rodríguez, profesora de Facultad Victoria de Girón, de la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana.
La también residente de la especialidad en Psicología de la Salud dijo que, cuando tiene una autovaloración inadecuada y, encima de eso, se es víctima de burlas o juicios valorativos de manera despectiva, la persona con escasas herramientas personales para afrontar de manera efectiva esta situación es susceptible de acudir a procedimientos que le hagan parecerse más al resto y ser más aceptada, sobre todo en las etapas de adolescencia y juventud y en grupos en desventaja social.
El artículo “Consideraciones acerca de la cirugía plástica en Santiago de Cuba”, expone que candidatos de ambos sexos con interés en realizarse cirugías estéticas han mostrado características psicopatológicas de la personalidad como predominio de insatisfacción corporal, bajos niveles de autoestima, altos niveles de depresión o ansiedad y trastornos de la personalidad.
La especialista Díaz Rodríguez no ha atendido casos en el área de la cirugía estética propiamente, pero sí a personas que, por su condición de salud, debieron someterse a una intervención quirúrgica que incluía mutilación en áreas del cuerpo muy sensibles desde el punto de vista estético como las mamas, el aparato reproductor femenino o masculino, etc., o a pacientes con algún desorden mental cuya imagen corporal está afectada y les resulta desagradable.
“En cualquiera de los casos, se debe trabajar con la autoimagen, la adaptación al cambio, el control de las emociones, los impulsos, el autoconcepto…, que repercuten en la toma de decisiones e influyen en la felicidad plena de las personas consigo mismos”, dijo Díaz Rodríguez.
Sobre todo, porque la percepción de la imagen corporal es uno de los factores de riesgo asociados a los trastornos de la conducta alimentaria; y la distorsión en esta imagen afecta particularmente a las mujeres, que, por motivos de índole comercial, son el centro en la promoción de un cuerpo ideal promovido constantemente desde los medios de comunicación.
Preocuparse por la apariencia corporal es un hábito productivo y saludable, siempre que sea con mesura. Un exceso de control en ese aspecto puede desencadenar lo que la psiquiatría diagnostica como trastorno dismórfico corporal. Quienes lo padecen, exigen tratamientos estéticos agresivos con frecuencia y suelen quedar insatisfechos con los resultados de las intervenciones quirúrgicas.
Los defensores de los tratamientos estéticos sostienen que no hay nada malo en cambiar el aspecto exterior, si eso produce mayor confianza y sensación de bienestar. Pero, curiosamente, fue el cirujano plástico estadounidense Maxwell Maltz, quien en los años sesenta propuso ciertos ejercicios mentales para transformar el concepto de las personas sobre sí mismas, sin necesidad de someterse a intervenciones por factores estéticos.
No todas las intervenciones son tan invasivas como las cirugías estéticas. Están, por ejemplo, el lipoláser, la cavitación, la radiofrecuencia, el bótox o la vacumterapia –aplicadas, por lo general, en salones de belleza– que prometen mejoras en la apariencia física, la mayoría relacionadas con la reducción de la grasa corporal o el rejuvenecimiento.
Pero nada de lo anterior puede suplir hábitos saludables, como una adecuada alimentación, evitar el consumo de sustancias tóxicas o la práctica frecuente de ejercicio físico.
“Los tratamientos estéticos no son malos, sino que deben ser bien valorados por especialistas competentes para evitar, riesgos y resultados no deseados. Además, deberían llevar un asesoramiento psicológico previo, puesto que un cambio de imagen requiere ajustes para la adaptación a lo nuevo y no siempre resultan exitosos o a veces no cumplen con las expectativas que tenía la persona. Sería óptimo un asesoramiento multidisciplinar y por el área de salud mental”, refirió Jennysey Díaz Rodríguez, profesora de la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana Facultad Victoria de Girón.
Las instituciones, las redes sociales y los diferentes medios de comunicación influyen en la formación de la autoimagen desde que somos pequeños, de modo que lo que se considera socialmente atractivo se asocia al éxito, al estado de bienestar y, por tanto, nos moviliza a querer imitarlo. ¿Valdrá la pena modificarnos solo por aceptación social? ¿Hasta qué punto podemos distinguir entre nuestros propios ideales y la necesidad de cumplir patrones de belleza impuestos?
Continuará…
9 noviembre 2023 | Fuente: Cubadebate| Tomado de Cuba Joven| Historias
Nov
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Médicos, especialistas, técnicos y directivos participan por estos días en trascendentales debates sobre el anteproyecto de una nueva ley de Salud en Cuba, previo a su presentación en la Asamblea Nacional del Poder Popular. «Espacios para un amplio y riguroso proceso de construcción colectiva en la nación en pos del bienestar y los derechos de todas las personas», afirmó el titular del sector Dr. José Angel Portal Miranda.
Esta Ley es sumamente necesaria para el país ya que constituye un paso importante para ratificar el acceso universal y gratuito a los servicios de Salud; a la vez que reconoce nuevos derechos y servicios en correspondencia a avances y programas desarrollados en nuestro sector a lo largo del tiempo.
Por su parte, para el Dr. Julio Guerra Izquierdo Director provincial en Santiago de Cuba, es todo un orgullo contribuir a la norma legislativa y ello determina el sentido de pertenencia que siente hoy este profesional con la misma. «Agradezco la oportunidad y quiero felicitar al equipo jurídico por la propuesta, que junto a otros especialistas perfilan esta ley».
En sus valoraciones mencionó que «se cumplen ya 40 años de la vigente ley de Salud y que se imponía una actualización con propuestas que nos coloquen en un momento superior. La palabra correcta para definirla es novedosa y creemos que realmente es así, por incluir aspectos relacionados con la determinación para el final de la vida y los cuidados en esta etapa; con una Salud no solo referida a los seres humanos, sino también a los animales, las plantas y el ambiente, y por último por facilitar una participación más activa del individuo y de la familia a partir de las mejoras del consentimiento informado».
«Podemos decir que va a la esencia de la organización de los Sistemas de Salud en tres ámbitos fundamentales, primero los recursos humanos y su planificación; segundo, el proceso docente – metodológico que también se aborda en la ley, y tercero los niveles de atención y organización en el sector», señaló, al considerar como desafíos fundamentales transmitir y difundir la legislación hacia el interior del sistema de Salud y también entre la población.
Criterios que coinciden con la opinión de la Dra. Yagen Pomares Pérez, directora provincial del sector en Cienfuegos, que aseveró la urgencia en este sentido «de saber transmitir, saber comunicar y lograr que las personas entiendan y comprendan su trascendencia».
De igual manera catalogó el proceso de debate sobre el anteproyecto de Ley de Salud Pública como un ejercicio extremadamente profundo, integral e integrado, «reflejo de la realidad y como propuesta novedosa en concordancia con lo que necesitamos en estos tiempos complejos».
Los trabajadores del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK) se sumaron también con profundas reflexiones a los colectivos que debaten la importante normativa, comentó Vivian Kourí Cardellá, su directora general.
«La aprobación de un anteproyecto y de una ley de Salud realmente nos beneficia a todos y por otro lado creo que las intervenciones de las profesionales del IPK fueron muy positivas y aportan significativamente a su fortalecimiento», manifestó recientemente en el Centro de Convenciones Cojímar de La Habana durante un debate previo a su presentación en la Asamblea Nacional del Poder Popular.
La ciencia y la innovación en la nueva Ley de Salud en Cuba
Como pilares esenciales, la ciencia, la tecnología y la innovación en Salud promueven el acceso equitativo a los adelantos en este campo y su introducción en beneficio de las personas, las familias y la comunidad.
Así se plasma en el anteproyecto de la nueva Ley de Salud en Cuba, que en los artículos referidos a esta actividad expone como el sistema de ciencia, tecnología e innovación está integrado por subsistemas, programas y proyectos para el desarrollo de investigaciones, estudios y ensayos clínicos, así como la introducción y generalización de resultados científicos, los movimientos de integración, la evaluación de tecnologías sanitarias y la propiedad intelectual, unido a la actividad de las sociedades científicas de la Salud, la colaboración nacional e internacional, la gestión de la información y la publicación científica.
Postulados que motivan también reflexiones en profesionales del sector como Ileana Morales Suárez, Directora de Ciencia e Innovación Tecnológica del MINSAP.
«He tenido el privilegio histórico de estar en el grupo relator de esta normativa y lo incorporo como dos años de aprendizaje para mi formación», expresó al tiempo que la caracterizó como innovadora por mostrar cualidades relevantes.
«Es innovadora porque las partes que quedaron parecidas a la Ley vigente, fueron visiblemente mejoradas sin tener que cambiarlas, y eso es innovación,» enfatizó.
Complementó su opinión refiriéndose a la posibilidad «de unir a una alta cantidad de expertos, profesionales, funcionarios, que durante dos años han protagonizado un ejercicio de sabiduría colectiva de cara a los servicios, a la docencia y a la investigación».
Sobre el tema de la ciencia, detalló «cómo se tuvo que adecuar a todas las políticas que nos han antecedido, proyectos, decretos, decretos- leyes, resoluciones de innovación, que mucho inciden en las administraciones y directivos».
Morales Suárez dijo que por ello, al implementar este documento, «no queda duda nos convertiremos en mejores directivos porque el que entienda, lea y se apropie de la Ley, va a poder dirigir de una manera mucho más eficiente».
Por último, la Directora de Ciencia e Innovación Tecnológica del MINSAP transmitió la certeza de que este texto «logra una fotografía instantánea en cuanto a los adelantos científicos, profesionales, académicos y asistenciales que ha logrado el capital humano en nuestra nación. Se parece al sistema de Salud del año 2023 y ese para mí es uno de los grandes valores que tiene, como una herramienta indispensable de trabajo para el desarrollo futuro que todos estamos obligados a hacer en la Salud pública cubana», subrayó.
Hasta la fecha, según datos oficiales de la Dirección Jurídica del MINSAP, más de 2150 participantes han contribuido al enriquecimiento de la norma, a partir de consultas especializadas y despachos con expertos externos que suman 74 y con profesionales del gremio que superan los 2 mil.
Además se han realizado constantes intercambios con integrantes de la Comisión de Asuntos Constitucionales y Jurídicos del Parlamento, con miembros de la Dirección Jurídica de la Secretaría del Consejo de Ministros, y con otros organismos como el MINJUS, MINFAR, MININT, MTSS, MINAGRI, CITMA, MINDUS, Defensa Civil, BioCubaFarma, Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana y la Unión Nacional de Juristas de Cuba.
8 noviembre 2023| Fuente: Salud Pública-Cuba|Tomado de Noticias