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Con más de 500 contagios en la última jornada en la población pediátrica, la doctora Lissette López, Jefa del Grupo Nacional de Pediatría del MINSAP y Miembro del Grupo Nacional de
Medicina Intensiva y Emergencias, calificó la situación de la última semana como la peor de toda la pandemia.
“Prácticamente cada día rompemos el récord del día anterior”, dijo la experta, quien llamó no solo a preocuparnos sino a ocuparnos todos de revertir la preocupante situación.
Sobre la cifra de las últimas 24 horas refirió que es particularmente compleja, y es el reflejo de una semana donde los contagios en niños, niñas y adolescentes han crecido. Insistió en la responsabilidad no solo de las familias, sino de toda la ciudadanía.
“No se trata solo de alarmarnos con los números, sino de pensar qué podemos hacer cada uno de nosotros como madres, padres o ciudadano para disminuir esta incidencia”, señaló.
El mes de junio cerró con más de 7000 contagios en pacientes pediátricos, pero en la última semana se han reportado 3 188 niños, niñas y adolescentes contagiados con el coronavirus.
De esos 3188, son contactos de casos positivos 3 080. Esa cifra, subrayó, habla por sí sola de la fuente de contagio y de la importancia que tiene una buena dinámica familiar en la protección de nuestros menores.
Al referirse específicamente a los adolescentes, la especialista mencionó que se han contagiado 8 000 entre los 15 y 18 años, y en ello ha incidido también la autoresponsabilidad de los mismos, en tanto son mayores para tener cierto nivel de autodeterminación y realizar actividades sociales, por lo cual también deben ser responsables de su conducta.
De los 3 188 infantes contagiados en la última semana, 186 son lactantes, es decir que 186 niños menores de un año han requerido ingreso hospitalario por el riesgo que supone estar enfermos de COVID-19, dijo la experta.
“Aun cuando existen protocolos de tratamiento, y más del 90 % se haya recuperado, hay un porciento de menores que, aunque se negativice y se cure, puede tener, y están teniendo, secuelas en su vida posterior”, enfatizó López.
De acuerdo con la jefa del Grupo Nacional de Pediatría del MINSAP, señaló que es importante entender que los lactantes están en un periodo de formación biológica y social, por lo que el papel de la familia es crucial. De los 186 lactantes, 14 son menores de 28 días, dijo la doctora, quien destacó el rol fundamental que están desempeñando los neonatólogos en todo el país.
Por otra parte, la experta comentó que la pediatría debe un agradecimiento particular al Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología que en el día de ayer arribó a su 35 aniversario, pues en la robustez del protocolo que se aplica tiene un peso importante esta institución científica.
Recién se aprobó el estudio Ismaelillo con el candidato vacunal Abdala en población pediátrica y ya se desarrolla el estudio Soberana-Pediatría con el candidato vacunal Soberana 02; pero con más fuerza ahora hay que seguir teniendo una percepción de riesgo elevada, sostuvo López.
Aún son ensayos, estamos dando los primeros pasos, por tanto todo niño, niña o adolescente que no esté sano, debe acudir a un servicio de salud ante el menor síntoma o signo, sostuvo.
Insistió en que la gravedad ha aumentado. En esta semana, dijo, se han ingresado 9 menores en las terapias intensivas (graves o críticos) con peligro para la vida, y tuvimos que lamentar el fallecimiento de un menor de 2 años.
El llamado no puede cansarnos, subrayó.
López añadió que el escenario más crítico lo tiene la provincia de Matanzas, que en esta jornada reportó 149 casos en estas edades, la cifra más elevada de un territorio a lo largo de la pandemia, superando el pico anterior en La Habana.
Tenemos confianza en los pediatras y la atención que brindan en esta provincia, pues tienen un desvelo desmedido. En esta provincia no reportamos fallecidos en edades pediátricas, ni tiene pacientes graves o críticos en estos momentos, pero justo en este territorio se han atendido los dos pacientes con síndrome pos COVID más complejo que ha tenido la nación. De ahí la alerta a la población matancera. La COVID hay que evitarla, tratarla a tiempo y evaluar las complicaciones que puede tener, dijo.
En otro orden, la experta alertó sobre la diarrea, que está siendo en los últimos días un signo importante de diagnóstico de la COVID. Los fenómenos meteorológicos traen aparejados un cambio extra en la dinámica familiar, por lo que extremar las medidas de bioseguridad frente a la COVID y extremar las medidas higiénico, sanitarias ante el posible impacto del huracán Elsa es fundamental. Mucha prevención y cuidado con los niños para evitar accidentes en el hogar, concluyó la especialista.