Sep
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A pesar de que ya hemos dedicado algunas columnas a la rabia, su prevención y control, con el principal interés de que se conozca mejor la enfermedad, resulta importante que las personas adquieran los conocimientos, que les posibiliten una actuación efectivamente responsable.
A nivel mundial son muchos los profesionales, las organizaciones gubernamentales y civiles que dedican tiempo y energías a la lucha contra tan antigua, como terrible enfermedad.
Resulta que a pesar de conocerse cuáles son los animales que pueden transmitirla, cómo se puede prevenir en los susceptibles y en humanos, de la eficacia de las modernas vacunas devenidas del sabio descubrimiento de Louis Pasteur en el siglo XIX, de los programas nacionales de prevención y control, así como las investigaciones científicas y normas, directivas o reglamentos establecidos, cada año se reportan unos 70 000 casos en humanos, lo que resulta incomprensible.
Claro está, la mayor parte de los casos se producen en los países pobres del planeta, donde hay poco conocimiento poblacional sobre la entidad o es limitada la accesibilidad a los servicios de salud.
Aunque en Cuba la rabia humana no constituye un problema para la salud pública, se le presta igual importancia al tema.
Internacionalmente, cada 28 de septiembre se dedica al Día Mundial contra la Rabia con la finalidad de sensibilizar al público sobre la prevención de la enfermedad y la reducción de su transmisión.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) y la comunidad sanitaria de todos los países, le otorgan la relevancia que realmente tiene esta enfermedad invariablemente mortal, que es prevenible, gracias a la innovación de Pasteur en 1885, pero siempre que se actúe a tiempo.
Este año 2025 se celebra con el lema propuesto por la OMSA: Actuemos ahora, tú, yo y la comunidad.
Este lema indica que todos, que cada uno de nosotros, podemos desde nuestra visión, posición, formación o responsabilidad, hacer por la prevención en animales y humanos, actuar en favor de la reducción de la transmisión entre los animales y de estos, al hombre.
Quizás no todas las personas perciban que desde sus espacios y posibilidades pueden hacer para evitar o reducir la incidencia de la enfermedad, pero hay muchas formas de contribuir a esa lucha, que lideran los sistemas sanitarios de los países donde hay circulación del virus y esta enfermedad viral zoonótica, está presente.
¿Cómo usted puede colaborar?
- Buscando información básica sobre la enfermedad, lo que hoy es factible a través del acceso a las redes sociales.
- Poniendo en práctica la tenencia responsable de las especies susceptibles, especialmente si posee perros y gatos.
- Conociendo las normas sanitarias y programas nacionales de prevención y control de la enfermedad.
- Informando al servicio veterinario sobre sospechas o evidencias de síntomas compatibles contra la rabia en animales, en sus áreas de residencia o permanencia.
- Garantizando que sus mascotas (perros y gatos) se vacunen anualmente contra la rabia.
- Acudiendo con prontitud a los consultorios o clínicas veterinarias con sus animales en caso de que estos sean mordidos por otros y manifiesten cambios de comportamiento.
- Conduciendo a sus perros a la vía pública con bozal y arreo, para un control de sus movimientos en áreas públicas.
- Poniendo atención a la consejería y las orientaciones del personal de salud pública y de los servicios de sanidad animal.
- Concurriendo inmediatamente al médico en caso de rasguños o mordeduras por animales, sean sospechosos o evidencien síntomas de la enfermedad.
- -Cumpliendo con los tratamientos antirrábicos completamente en caso de ser mordido por un animal.
- Contribuyendo con la realización de los controles de focos rábicos en sus comunidades o áreas de residencia.
- Estando siempre atentos a cualquier información sobre esta enfermedad que publiquen o informen las autoridades sanitarias, y
- Teniendo en cuenta siempre, que prevenir enfermedades es tarea de todos, pues convivimos y compartimos los mismos espacios.
En la prevención de la rabia, actuemos ahora, tú, yo y la comunidad. Unidos por Una Sola Salud.
28 Septiembre 2025 Fuente: Cubadebate/ Noticias/ Salud
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El Laboratorio de Anticuerpos y Biomodelos Experimentales (Labex), entidad adscrita al Centro de Inmunología Molecular, consolida su papel en el desarrollo de reactivos nacionales para el diagnóstico de enfermedades autoinmunes y el monitoreo inmunológico en pacientes con inmunodeficiencias, como parte de su misión de contribuir al fortalecimiento del sistema de salud cubano.
Ubicado en Santiago de Cuba, Labex centra su labor científica en la obtención de productos biotecnológicos con un alto valor agregado, destinados tanto al suministro interno como a la posible exportación.
Entre los logros más recientes destacan las láminas HEp-2 y los conjugados anti-IgG humana-FITC, empleados en el diagnóstico de patologías autoinmunes como el lupus eritematoso sistémico y la artritis reumatoide.
Sandra Rivera Infante jefa de proyecto y especialista principal en productos terminados explicó a la Agencia Cubana de Noticias, el laboratorio ha desarrollado y validado dos productos que responden a necesidades concretas del sistema nacional de Salud, en un contexto marcado por la escasez y el elevado costo de estos reactivos en el mercado internacional.
Las láminas HEp-2 se obtienen a partir de cultivos celulares, fijados y procesados mediante técnicas especializadas que permiten detectar anticuerpos antinucleares en pacientes sospechosos de enfermedades autoinmunes, señaló la investigadora.
Rivera Infante destacó que ambos productos han sido registrados ante el Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos, lo cual garantiza su empleo en instituciones de salud del país.
Entre los proyectos estratégicos de Labex también se encuentra la obtención de anticuerpos monoclonales conjugados con fluoróforos, empleados para marcaje múltiple en citometría de flujo, una tecnología fundamental para el seguimiento inmunológico de pacientes con VIH/SIDA.
El Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí es uno de los principales usuarios de estos reactivos, junto a otras instituciones como el Instituto de Oncología y Radiobiología y el Hospital Clínico Quirúrgico Camilo Cienfuegos, precisó Fernández Duarte.
Añadió que el desarrollo nacional de estos productos no solo garantiza el acceso a tecnologías diagnósticas avanzadas, sino que también disminuye la dependencia de insumos importados y fortalece la soberanía tecnológica del país en un área estratégica para la Salud Pública.
Labex trabaja de manera articulada con universidades e instituciones científicas como la Universidad de Oriente, la Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba y centros del polo científico cubano, lo cual favorece la formación de capital humano calificado y el avance de nuevas líneas investigativas en el campo de la inmunoterapia.
Como único centro en Cuba que produce, valida y registra estos productos, Labex constituye una plataforma esencial en el desarrollo de soluciones nacionales para el diagnóstico inmunológico, en correspondencia con las prioridades del sistema sanitario cubano.
26 Septiembre 2025 Fuente: Cubadebate/ Noticias/ Salud
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Dijo Martí que la química celosa ha robado sus retortas a la naturaleza. Y es muy cierto. Antes que surgieran los fármacos el hombre utilizaba las bondades de la medicina verde, y las sigue utilizando.
Y es que ella no es una solución de tiempos difíciles como algunos han considerado erróneamente sino de todos los tiempos. También se equivocan quienes la califican de medicina de los pobres porque en naciones desarrolladas se recetan fitofármacos.
Pocos conocen los antepasados vegetales de la aspirina, por ejemplo. Su origen está en la corteza del sauce cuya decocción se empleaba desde la antigüedad para combatir la fiebre. En la Grecia de Hipócrates, la escuela médica de Cos utilizaba la corteza de Sauce para el tratamiento de la fiebre y el dolor, incluso con preferencia sobre el opio.
Con el transcurso de los siglos la aspirina fue evolucionando y ha demostrado propiedades antiplaquetarias por la cual se convierte en un útil recurso para la prevención de enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares y se siguen estudiando sus efectos en otras afecciones.
De manera parecida surgieron muchos fármacos que utilizamos hoy: primero el empleo terapéutico de la planta, después el uso de las sustancias activas que encierran y más adelante estas fueron imitadas por los químicos quienes las reprodujeron por síntesis.
La menta, de la cual existen varias especies, tiene una historia curiosa. En la Roma antigua su aroma era buen síntoma, se consideraba que su olor levantaba los ánimos y amenizaba las tertulias. Los científicos antiguos afirmaban que influía en el funcionamiento del cerebro, por eso Plinio el Viejo, célebre historiador romano, llevaba siempre en la cabeza una corona de hojas de menta fresca y aconsejaba a sus discípulos que hicieran lo mismo.
El efecto refrescante de la menta alivia la irritación de la garganta, combate la tos crónica y es un bálsamo para descongestionar la nariz. Sus infusiones se han utilizado desde tiempos remotos para aliviar la hinchazón abdominal y los cólicos. Por tanto, alivia los gases y permite digerir las comidas pesadas.
Podrían mencionarse infinidad de plantas cuyo uso está estudiado y aprobado por el Ministerio de Salud Pública.
Según el sitio Web de medicina natural de Infomed, la información obtenida de los clásicos de la literatura botánica de las plantas medicinales empleadas en Cuba, enriquecida con la información etnobotánica recopilada en los tres últimos lustros, así como con las investigaciones farmacológicas realizadas por distintas instituciones del país durante los últimos años, han permitido detectar la presencia en Cuba de mil 258 especies (de ellas 106 son endémicas), agrupadas en 732 géneros de 180 familias para las que se conocen o atribuyen propiedades medicinales.
El ajo, por ejemplo, protege las arterias, combate la hipertensión y disminuye el colesterol, además su tintura ayuda a combatir los hongos. El gel de la sábila (Aloe vera) funciona para tratar diferentes lesiones en la piel. De este modo, uno de sus principales usos es como cicatrizante de heridas, quemaduras, y hasta para tratar problemas de acné. Además, es una planta medicinal que ayuda a superar problemas estomacales y gastrointestinales. Como resultado, su consumo favorece la digestión, ayuda a superar problemas de gastritis, acidez, e igualmente funciona como antioxidante.
Para la ansiedad es muy conocido el boldo, al que la población llama metrobamato, la pasiflora también promueve la relajación. Una de las mejores opciones para consumir antes de ir a dormir es el té de romero y manzanilla para combatir la ansiedad, el estrés y los problemas de sueño.
El té de orégano resulta muy eficaz para combatir la tos y aliviar el dolor y la inflamación de garganta. Además, es un excelente antiviral para prevenir infecciones originadas por virus. Entre otras bondades. A la caña santa se le reconocen cualidades antihipertensivas en el sistema cardio-circulatorio, también es antiespasmódica en el sistema digestivo; antiasmática para el sistema respiratorio, y anti fúngica y antibacteriana en su aplicación sobre la piel y mucosa.
Dependiendo de su maduración la guayaba puede usarse tanto para tratar la diarrea como el estreñimiento. Cuando está verde es rica en compuestos astringentes que ayudan a controlar la diarrea; cuando está madura aporta gran cantidad de fibra insoluble, que actúa como un suave laxante.
Podrían mencionarse otros muchos ejemplos, pero lo importante en el uso de las plantas medicinales es que no se empleen de forma desordenada, sino consultar con un médico la forma de prepararla y su empleo.
24 Septiembre 2025 Fuente: Trabajadores/ Noticias/ Salud
