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Entre las proyecciones investigativas inmediatas del CIE figura la búsqueda de nuevos diagnosticadores y productos para la pesquisa neonatal, pruebas rápidas y novedosos ensayos vinculados a la sanidad agropecuaria.
A inicios de la década de los años 70, un equipo de médicos, liderado por el doctor José Luis Fernández Yero, comenzó a trabajar en los laboratorios del Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNIC), en la creación de una tecnología que pudiera realizar el diagnóstico prenatal de malformaciones congénitas, sin riesgo para la madre.
En julio de 1981, los resultados preliminares fueron presentados en una exposición realizada en el Palacio de la Revolución, cuyo propósito era mostrar recientes desarrollos científicos nacionales aplicados a la medicina.
Como contó a Granma hace unos años el doctor Fernández Yero, en esa ocasión pudo explicarle al Comandante en Jefe Fidel Castro la esencia del proyecto, en el cual venían laborando, y le enseñó fotos de niños nacidos con diferentes tipos de malformaciones.
Después de observarlas en silencio, el máximo líder de la Revolución expresó: «Uno solo de estos casos que se detecte y pueda evitarse, vale la pena todo el esfuerzo que se haga».
Orientó, de inmediato, validar la tecnología y extenderla a todo el país. Bajo su permanente seguimiento, al año siguiente surgió el Sistema Ultramicroanalítico, conocido por Tecnología suma.
Para garantizar la producción a escala industrial de los reactivos, equipos y demás componentes del suma, en enero de 1986 la dirección del país aprobó la construcción de una nueva instalación que asumiera esa misión.
Terminada en apenas 19 meses, el 7 de septiembre de 1987, Fidel inauguró el Centro de Inmunoensayo, conocido por su sigla: CIE.
Al rubricar sus impresiones en el libro de visitantes, recalcó: «Este centro es una verdadera joya de la cual nos sentimos orgullosos. Felicidades a todos sus trabajadores. Nuestro pueblo espera mucho de ellos».
SOSIEGO PARA LA FAMILIA CUBANA
Fundadora y directora general del CIE por dos lustros, la doctora Niurka Margarita Carlos Pía afirmó que el mayor aporte de la entidad en sus 36 años de labor, radica en ser el soporte tecnológico de importantes programas nacionales de Salud, entre ellos el materno-infantil.
Puso de ejemplo que, mediante el empleo de la Tecnología Suma, el país logró hacer las pruebas para el diagnóstico precoz del hipotiroidismo congénito, a todos los niños cubanos nacidos a partir de 1986.
«La realización de ese estudio posibilitó detectar y tratar de manera oportuna a más de 1 150 infantes con la enfermedad, evitando que crecieran con retraso mental severo. Cuba fue la segunda nación de América en tener un programa completo de hipotiroidismo congénito en recién nacidos, después de Canadá y primero que Estados Unidos».
Destacó, asimismo, los resultados en el diagnóstico prenatal de malformaciones congénitas, que forma parte del programa cubano de alfafetoproteína.
«En la actualidad, las gestantes estudiadas desde 1985 sobrepasan la cifra de 4 500 000, detectándose un determinado porciento de deformaciones incompatibles con la vida», afirmó.
Siempre que la pareja lo decidió de mutuo acuerdo, se interrumpieron esos embarazos, lo cual representó un aporte significativo en los indicadores de mortalidad infantil, aseveró la doctora Niurka Margarita.
Es justo decir que también nuestro país fue el segundo del orbe en contar con un programa completo de alfafetoproteína.
Según explicó la Directora del CIE, la Tecnología suma es utilizada hoy para diagnosticar más de 20 enfermedades, entre ellas las hepatitis B y C, el dengue, la fibrosis quística, el VIH y la lepra.
Perteneciente al Grupo Empresarial BioCubaFarma, esa institución científica concede suma atención en la actualidad a las investigaciones relacionadas con el cáncer y las enfermedades crónicas no transmisibles, al tener en cuenta su ubicación en la lista de las principales causas de muerte en el país.
Los proyectos fundamentales están centrados en la búsqueda y el desarrollo de nuevos procedimientos para la detección temprana de algunas de estas dolencias, a fin de aumentar las posibilidades de mantenerlas bajo control y prolongar los años de vida.
Muestra de ello es el análisis Umelisa PSA, dirigido al diagnóstico precoz del cáncer de próstata (extendido a las 15 provincias y al municipio especial Isla de la Juventud); la prueba rápida para la detección específica de hemoglobina humana oculta en heces fecales Sumasohf, un factor predictivo del cáncer de colon; y el sistema Sumascope, centrado en mejorar la calidad en la pesquisa y la capacidad de diagnóstico temprano y tratamiento del carcinoma cérvicouterino.
Cada equipo, tecnología, kits y otros productos del CIE destinados a los referidos fines, fueron concebidos con capacidad intelectual propia, indicó la doctora Niurka Margarita.
«Gracias a la introducción y generalización de la Tecnología suma y sus nuevos desarrollos, pudieron salvarse muchas vidas, y se evitó, para tranquilidad de las familias, el desarrollo de terribles enfermedades en los niños, que resultaron detectadas oportunamente en las gestantes», apuntó.
Igualmente, posibilitó realizar hasta el presente más de 11,7 millones de pruebas para la prevención de enfermedades infecciosas de la madre al feto, lo cual condujo a que Cuba fuera la primera nación en el mundo en eliminar la transmisión vertical de VIH, condición ratificada en 2021 por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
No menos importante son los beneficios tributados por este resultado insigne de la entidad al Programa de certificación de sangre, placentas y órganos, al acumular más de 40 millones de determinaciones en donantes voluntarios de sangre y más de 70 millones en la vigilancia epidemiológica, disminuyendo al mínimo la posibilidad de contraer por esa vía la hepatitis b y otras dolencias.
Entre las proyecciones investigativas inmediatas del CIE, que ostenta hace dos años la certificación de Empresa de Alta Tecnología, figura la búsqueda de nuevos diagnosticadores y productos para la pesquisa neonatal, pruebas rápidas y novedosos ensayos vinculados a la sanidad agropecuaria.
01/09/2023 (Granma) Tomado – Ciencia